De lo peor en la era Azconzábal y ocasión desperdiciada
Unión y el vicio de errar
Jugó mal, pero aún así tuvo chances para no perder. Racing, con muy poco, pero con algo que en Unión falta -eficacia- pudo quedarse con la victoria. Este resultado le dio vida a Arsenal, que está a tres puntos y juega el lunes con Atlético Tucumán.
Ignacio Izaguirre La maniobra más clara que tuvo Unión, en el final del partido. Andereggen metió un lindo centro, falló el arquero Ibañez que no pudo desviar el disparo pero se pasó de largo Comas, que intentó empujarla de taco, casi debajo del arco.
Definitivamente, no fue un buen partido de Unión. ¿Pudo haberlo empatado?, sí, ¡claro que pudo!. ¿Fue justo el resultado?, premió, en definitiva, al que tuvo eficacia y al que supo aprovechar alguna de las jugadas que supo construir frente al arco rival. Racing jugó mejor que Unión en el primer tiempo. Pero fue más por lo muy pobre de Unión que por algún mérito superior de su rival. El partido fue flojo, chato, impreciso, a veces prestándose la pelota, con muchos errores en los pases. En eso fallaban los dos. Ocurre que Racing descubrió por dónde poder atacarlo a Unión. Montoya, de buen partido, se juntó bien con Alcaraz y aprovecharon un sector poco sólido del equipo: el de su costado izquierdo.
El gran defecto de Unión es su falta de contundencia, la falta de gol. Ya le había pasado en otros partidos, donde el lamento fue el mismo pero se vio en parte compensado porque la actuación del equipo tuvo aspectos para destacar. Se agrava en este caso porque no se jugó bien. Los ejemplos inmediatos de partidos similares fueron el de Atlético Tucumán y el de Bahía. Pero en ambos partidos, la producción del equipo fue superior a la de Racing. Entonces, lo que podría ser una virtud, que es la generación de algunas situaciones claras (que Unión las tuvo) o la ejecución de 10 córners, por ejemplo, que justifican que hubo llegadas, se termina convirtiendo en un defecto por la falta de definición.
La ineficacia en el fútbol de hoy se paga caro. Sobre todo cuando el rival va ganando y se dedica a defender el resultado. En el fútbol de hoy, son pocos los equipos que arriesgan de la misma manera cuando pasan a ganar el partido. La mayoría -y Racing no fue una excepción- se repliegan, achican espacios cerca de su área y juegan de contra. Eso fue lo que pasó en un segundo tiempo en el que había que abrir la cancha o penetrar a través de una gambeta o la precisión de un pase filtrado, cosa que fue muy difícil de conseguir.
En ese tren de imprecisiones contínuas que fue el partido, apenas surgió en Unión la luz de claridad que le dio Zenón por el costado izquierdo. Poco de Troyansky, inconvenientes en la dupla Leyes-Assís para generar juego, controlado Cabrera y algo de Márquez, pero en cuentagotas. Estos dos, Cabrera y Márquez, quizás preservados por el técnico pensando en el partido del martes, le dejaron el lugar a Luna Diale y González en el arranque del segundo tiempo. Sorprendió la posición de Gastón González, porque arrancaba muy de atrás y se sabe que es un delantero, que no puede retroceder 40 o 50 metros a buscar la pelota. Por momentos, Zenón jugaba más adelantado que él. Y Troyansky pasó a jugar por el medio, sector de la cancha en la que tampoco pudo prosperar ante una defensa que empezó a fortalecerse por la poca precisión en los centros , sobre todo los que venían desde el costado de Gerometta, que hacía las cosas relativamente bien en la generación de la maniobra, pero que después no la terminaba con un centro preciso a la cabeza o el pie de un compañero. Quizás la única haya sido una de Esquivel, desde el otro costado y cuando ya estaba jugando de volante (había ingresado Portillo para defender por ese lugar), metiendo la pelota por encima de la cabeza de todos los defensores y al pecho de Luna Diale, que remató en forma cruzada y desviada.
Si en el primer tiempo Racing había acumulado méritos, pocos pero suficientes, para ir ganando el partido, es posible que Unión los haya tenido en el segundo, al menos por la obligada búsqueda del protagonismo, para empatarlo. Pero se hace difícil cuando no se aprovechan las situaciones, cuando el equipo carece de claridad, de precisión y de definición. Todo eso constituyó un combo letal para sus aspiraciones. Y Racing, con muy poco, se terminó quedando con un triunfo que no le sirve de nada, sólo alcanza a calmar un poco los ánimos que de por sí vienen bastante caldeados por Avellaneda.
Unión dejó pasar la chance, desperdició la oportunidad. Era ideal para que se pueda asegurar la clasificación. El equipo que puso en la cancha, más allá de la necesidad de reservar jugadores para el martes, era depositario de otro tipo de expectativas. ¿O acaso el trío Cabrera-Márquez-Troyansky no fue el que Azconzábal ideó para que arrancara la competencia?. Fue, si la memoria no falla, la primera vez en forma oficial, por los puntos, que el Vasco tuvo a los tres en condiciones de elegirlos. Sin embargo, no pudieron darle la posibilidad del gol. Y en el medio, la poca claridad de la dupla Leyes-Assís hizo que la generación de fútbol no tenga el volumen y la solidez deseada. De un flojísimo primer tiempo se pasó a un segundo en el que hubo protagonismo pero falló la precisión para tratar de aprovechar situaciones. Y por eso perdió.
Ignacio Izaguirre Cabrera maniobra ante la marca de un rival. El delantero-volante de Unión jugó 45 minutos, seguramente porque será titular el martes ante Bahía, pero no anduvo bien.
Cabrera maniobra ante la marca de un rival. El delantero-volante de Unión jugó 45 minutos, seguramente porque será titular el martes ante Bahía, pero no anduvo bien. Foto: Ignacio Izaguirre
BAJO LA LUPA
BONANSEA (6).- De lo mejor de Unión, le tapó un mano a mano a Montoya en el primer tiempo y otro a Cáceres en el segundo.
GEROMETTA (5).- Si hubiese terminado mejor las jugadas, podría haber merecido un mejor puntaje. Se proyectó mucho y por sorpresa, pero sin un buen final para sus proyecciones.
CALDERÓN (5).- Por más empeño que pone, le cuesta recuperar el nivel. Se le nota la falta de competencia y la pérdida de esa confianza que tenía en el torneo pasado.
NANI (4).- Muy impreciso e inseguro con la pelota, en la jugada del gol salió a esperar el centro pero sin observar que por su callejón entraba el autor del gol.
ESQUIVEL (4).- Tuvo un primer tiempo flojo, complicado por un Montoya que le ganó en varias ocasiones incluida la jugada del gol. Le puso ganas y en el segundo tiempo terminó jugando un poco más arriba.
ASSIS (4).- Despliegue con escaso fútbol. Está para otra cosa y el equipo necesitaba un jugador que le aporte claridad en el medio.
LEYES (4).- Trató de cuidar la posición pero no tuvo la gravitación deseada. Mucho despliegue pero con poca claridad para que la salida de la pelota sea ordenada y prolija.
ZENÓN (6).- Otro de los pocos jugadores para destacar en Unión. Vigor y buena presencia para llegar al fondo en varias situaciones. Inclusive, tuvo otra vez un mano a mano y se lo tapó Ibañez.
CABRERA (4).- Intentó desequilibrar en el mano a mano pero no lo consiguió. No pudo meterse nunca de lleno en el partido.
MÁRQUEZ (5).- Tuvo dos situaciones (un tiro libre y un cabezazo que le sacó Ibañez) y trató de entrar y salir para no ser un blanco fijo de los centrales.
TROYANSKY (4).- Está en un bajo nivel, no encuentra la mejor posición y no arrima peligro. Empezó por izquierda y terminó de centrodelantero, sin influir.
LUNA DIALE (5).- Algo más que Cabrera pero sin esos desbordes que, por ejemplo, dieron vuelta el trámite del partido en la tarde de Arsenal.
GONZÁLEZ (4).- No se entiende mucho el lugar de la cancha en el que lo puso Azconzábal, demasiado replegado y por izquierda. No encontró el partido.
PORTILLO.- Entró a jugar de lateral por izquierda. A los pocos minutos lo amonestaron injustamente.
COMAS.- Sobre el final tuvo una buena oportunidad, pero la pelota le quedó atrás luego del centro de Andereggen.
ANDEREGGEN.- Entró por derecha y metió un centro peligroso que casi fue gol de Comas en el final del partido.
Cañete
Si bien no se dio a conocer de manera oficial, se supo que el volante Ezequiel Cañete está aislado luego del test que se le realizó al regreso de Bahía.
Racing 1 | Unión 0
Cancha: Racing.
Arbitro: Andrés Merlos.
Racing: Ibañez; Cáceres, Orbán y Prado; Montoya, Banega, Tanda, F. Sánchez; Alcaraz, Leandro Godoy y A. Gómez. D.T.: Sebastián Beccacece.
Unión: Bonansea; Gerometta, Calderón, Nani y Esquivel; Assís, Leyes y Zenón; Cabrera, Márquez y Troyansky. D.T.: Juan Manuel Azconzábal.
Gol: a los 39 minutos del primer tiempo, Alcaraz (R).
Cambios: en el complemento, al inicio, Luna Diale (U) por Cabrera y González (U) por Márquez; a los 15 m Cardozo (R) por Gómez; a los 21 m Pillud (R) por Godoy; a los 28 m Portillo (U) por Zenón y Comas (U) por Leyes; a los 40 m Luque (R) por Montoya y a los 43 m Andereggen (U) por Gerometta.