El diálogo telefónico se produjo el jueves por la mañana, en pleno viaje de la ministra de Ambiente y Cambio Climático Erika Gonnet hacia Venado Tuerto, adonde llegaría un par de horas después el presidente Alberto Fernández para visitar dos empresas. Y permitió abordar la cuestión de cómo trasladar la concientización activa en los campos que comprende su cartera a la vida cotidiana, cómo articular esfuerzos entre los distintos sectores del Estado y de la actividad privada, y el rol protagónico de los jóvenes.
"Somos la primera provincia que tiene esta ley", se enorgullece Gonnet en relación con la norma de Acción Climática sancionada hace muy pocos días por la Legislatura. El proyecto fue elevado en su momento al Consejo Federal de Medio Ambiente (Cofema), donde fue declarado de interés por unanimidad y obtuvo el respaldo del presidente de ese organismo, Santiago Azulay.l y del ministro nacional Juan Cabandié.
- ¿Qué significa en la práctica que Santa Fe cuente con esta ley ante el cambio climático?
- Primero destaco el consenso en la política. Me pareció muy importante que la dirigencia nos pusiéramos delante de un reclamo que sobre todo llevan adelante los jóvenes. Porque si hay una bandera que llevan es el reclamo ambiental, que siempre fue delante de las respuestas que se han dado incluso desde el Estado y por eso creo que estamos en deuda. Lo segundo es que no es un cambio climático: es una crisis climática. Por eso la ley se llama de acción climática, porque creemos que a la respuesta la tenemos que dar ahora y no desde un solo lugar; es un compromiso que debemos tener todos y contar con la ley es dar un paso firme.
En Santa Fe, muchos municipios, comunas y organizaciones tienen acciones para mitigar y adaptarse ante el cambio climático. Por eso digo que tenemos que bajar programas que sean adaptables a los territorios; tenemos que popularizar el término para que todos podamos ser parte de este cambio.
- Precisamente, el concepto de cambio climático puede parecer abstracto o lejano, ¿cómo podemos incorporarlo a la cotidianeidad?
- Está el caso de los incendios en el Pre-Delta, en el norte, en Sudamérica. Esto tiene que ver con prácticas que no se deben hacer, pero también con el cambio climático, porque tenemos una bajante extraordinaria del río; con el aumento de gases de efecto invernadero, con las malas prácticas. Hay que traducir en los territorios que no es normal que tengamos lluvias como tenemos en este último tiempo, y que el fenómeno de La Niña es una sequía que se va a prolongar hasta marzo del año próximo. Este es el cambio climático, es lo que hay que decirle a la población. ¿Qué podemos hacer? Plantear prácticas agrícolas distintas, hablar de la deforestación: en el norte santafesino había 8 millones de hectáreas de bosques y hoy tenemos un millón y medio. Entiendo que en los últimos años, incluso a través de la Ley de Bosque, se ha preservado. Pero no nos olvidemos que tanto en Chaco como en Santiago del Estero la deforestación, incluso en pandemia, fue extraordinaria.
Esas consecuencias las sufrimos en los Bajos Submeridionales, que tienen inundaciones o sequías extremas. Estas son las cosas que tenemos que contar ¿Qué tenemos que hacer? Forestar, tener prácticas que no dañen el ambiente, hablar con las industrias. Es un tema que tiene mucho que ver con las generaciones: los empresarios, productores agropecuarios y empresarios jóvenes ya tienen incorporadas las prácticas sustentables y desarrollos sostenibles sin dañar el ambiente. Pero nos queda mucho por hacer porque el daño que se ha hecho es mucho.
- Este año pusimos el foco en los incendios cercanos, mientras que el año pasado hablábamos de lo que ocurría en el Amazonas y parecía que acá no pasaba nada. Pero la deforestación no ocurrió de un día para el otro.
- La provincia. y puntualmente el ministerio, forma parte del Piecas (Plan Integral Estratégico para la Conservación y Aprovechamiento Sostenible en el Delta del Paraná) y lo hacemos desde marzo, antes de que se iniciaran los grandes focos de incendio. Ahí se empezó a trabajar en los Faros de Conservación, y Santa Fe propuso tres lugares de control de cercanía, con un diálogo con la producción ganadera.
El territorio de Piecas tiene 2,3 millones de hectáreas, de las que se quemaron entre enero y septiembre 328 mil. Estoy hablando solo del Piecas, de la zona Pre-Delta, no del norte santafesino. El 86 % de ese territorio es entrerriano. Santa Fe, a través de la Fiscalía de Estado, de la Corte Suprema, pidió que se junten todas las causas que hay, sobre todo en jurisdicción entrerriana, en los juzgados federales de Entre Ríos. El ministro de Ambiente de Nación fue querellante en una de las causas de Victoria. Tanto La Rioja como Córdoba sufrieron grandes incendios; y en los últimos días La Rioja ya tuvo imputados. Nosotros no logramos, en 7 u 8 meses de incendios en el Pre-Delta, con más de 300 mil hectáreas quemadas, que hubiera gente imputada.
- ¿Es un tema que se debe resolver judicialmente?
- No pongo el tema solamente en la Justicia. En territorio santafesino llegamos a tener 150 brigadistas del país en coordinación con el sistema Nacional de Manejo del Fuego y helicópteros. No fue suficiente, pero no quiero pensar en lo que hubiera ocurrido si no los teníamos. Pero la Justicia debería dar una respuesta; no quiero confrontar, pero siempre somos nosotros los que salimos a decir cuánto se quemó, qué estamos haciendo, cómo estamos apagando el fuego. Hay que poner en discusión prácticas distintas y ésa es una de las cosas que se quieren hacer desde los Faros de Conservación.
La ley de humedales es otro tema fundamental. Desde la provincia hicimos una consulta a todos los sectores y llevamos al Congreso de la Nación alrededor de 20 documentos: Santa Fe estuvo en la mesa de discusión, no desde el enfrentamiento. La crisis nos obliga a sentarnos y hablar de estas cosas. Yo no me quiero enfrentar con los productores, pero tenemos que poner en discusión las prácticas.
- La ley de Humedales fue la principal consigna de Jóvenes por el Clima en conmemoración de la Convención de los Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes. ¿Cómo piensan incorporar a jóvenes en estas acciones?
- Tenemos una mesa quincenal de juventudes que lleva adelante el subsecretario Marcelo Gallini e integran jóvenes de municipios y comunas. Esta ley, que fue aprobada en la Legislatura, también tuvo consenso de esa mesa. Todo lo relacionado con nuestro ministerio es transversal, no sólo en el Ejecutivo sino también ante la sociedad. Al proyecto lo hemos presentado en organizaciones que vienen trabajando desde hace muchos años en temas ambientales. Muchas veces nos vamos a desencontrar en la discusión: lo que no tenemos que hacer es levantarnos de la mesa, pegar un portazo. Porque si nos paramos en veredas opuestas va a ser muy complejo
Los jóvenes le pusieron a este tema un color distinto, un aire distinto, tienen incorporados los conceptos, están capacitados, por lo que tenemos que trabajar junto a ellos. Medio Ambiente es un ministerio de gente joven, de jóvenes profesionales. No tuvimos que salir a buscar técnicos en el extranjero para que hicieran la ley.
- El saldo, tras un año tan extraño, parece ser positivo en su ministerio.
- Tenemos un ministerio muy chico, pero tiene un lugar de importancia en la gestión del gobierno provincial, generamos una ley propia. Somos inconformistas porque falta muchísimo por hacer.
En cifras: 328 mil hectáreas se quemaron entre enero y septiembre en la zona del Pre-Delta del Paraná.
- ¿ Qué podemos hacer desde lo cotidiano en el marco de la ley de Acción climática?
- Dos ejemplos de lo que ya se viene haciendo: uno es el programa Plantar para el futuro. La provincia tiene un programa de forestación municipal y quisimos enriquecerlo y abrirlo al territorio, para que se puedan incorporar clubes, centros de salud, asociaciones civiles que quieran plantar árboles, con la consigna de que el 60 % sean plantas nativas, que haya un seguimiento y se forme una red de compromiso de cuidadores de esos árboles. En Villa Guillermina se trabaja en la forestación de 40 hectáreas con algarrobos y para eso se están intercambiando opiniones sobre la genética de lo que se va a plantar.
Desde el departamento Vera se planteó el tema de la guía de la madera, para conocer de dónde sale, de qué forestación se extrae para que no se toquen los bosques nativos, y hacia dónde se transporta. En poco tiempo logramos una guía digital; fue un trabajo en red con los tres departamentos del norte provincial, con Sistemas y con Seguridad que controla las rutas con este documento. Esta es una acción concreta, porque se está cuidando la forestación y el trabajo de los hacheros.
Otro tema que se está trabajando a lo largo de la provincia es el de energías renovables para llevar a los clubes -que tienen mucha importancia en las localidades- termotanques solares y paneles fotovoltaicos. No es solo llevar energía limpia, sino que sea también un lugar donde a través de los jóvenes podamos fomentar estas prácticas y poner en consideración un ahorro para las instituciones.