El mercado de motos usadas experimentó un fuerte crecimiento del 24,7% interanual en noviembre último, informó la asociación de concesionarios ACARA, y fuentes del sector lo atribuyen al auge del delivery en medio de la pandemia.
En medio de la recesión, la venta de unidades usadas creció 24,7% interanual. La necesidad de trabajar, una clave del fenómeno.
El mercado de motos usadas experimentó un fuerte crecimiento del 24,7% interanual en noviembre último, informó la asociación de concesionarios ACARA, y fuentes del sector lo atribuyen al auge del delivery en medio de la pandemia.
"El mercado de motos usadas sigue mostrando un nivel de actividad en crecimiento, con cifras de noviembre que muestran un mes similar a octubre (2,2% menos), pero con marcado crecimiento interanual del 24,7%", indicó la entidad.
La División Motovehículos de ACARA reportó 33.716 unidades transferidas en ese período, casi lo mismo que en octubre, cuando se hicieron 34.482 operaciones.
El delivery, que tuvo su auge como recurso laboral para satisfacer una mayor demanda en medio de la pandemia, estaría explicando el fuerte crecimiento del sector de motos usadas.
En noviembre de 2019 se habían traspasado 27.032 unidades, indicó el informe. El análisis de los datos reflejó que la marca que sigue liderando en forma holgada el mercado del usado es Honda, con el 31,9% de las operaciones.
Más que duplicó a Yamaha, que alcanzó un 14,8%, y que sigue superando con amplitud a Zanella que alcanza el 9,3% del total. El "top five" se completó en noviembre sin grandes novedades, con Motomel cuarta, con una participación creciente del mercado del 8,1%, y Corven y Guerrero, que se vienen alternando el quinto y sexto lugar en los últimos meses, con el 5,7% y 5,4% respectivamente.
Prestadores de salud en crisis
La Cámara de Entidades de Diagnóstico y Tratamiento Ambulatorio solicitaron mediante una carta "respuestas urgentes" al Gobierno nacional frente a la problemática que atraviesa el sector y advirtieron que "la actividad está en estado terminal".
"En muchos casos, la pandemia repercutió negativamente, con un marcado descenso en la atención, lo que tuvo como efecto una merma considerable en sus ingresos", se indicó.
Según detallaron en la carta dirigida a las autoridades, el sector viene padeciendo retrasos arancelarios desde los últimos cuatro años y se calcula que ese desfasaje alcanza los 70,7 puntos porcentuales respecto del IPC y en 119,7 puntos porcentuales respecto del Índice de Costos en Salud, por lo que, sumado a este contexto, alertaron que un gran número de instituciones médicas, que atienden a siete de cada diez argentinos, se verán forzadas a cerrar sus puertas de manera definitiva.
Entre otras cosas, solicitaron que se prorrogue la emergencia sanitaria cuya finalización originariamente fue prevista para el 31 de diciembre de 2020 y se encuentra prorrogada hasta el 31 de marzo de 2021; que además se prorrogue el Programa ATP para la totalidad de los prestadores del sector de la Salud durante todo el año próximo, al igual que la vigencia del Decreto 300/20; que también se arbitren los medios para que se actualice el importe nominal del monto mínimo no imponible establecido por el Decreto 688/2019, para ser aplicado por los empleadores sobre el cálculo de las contribuciones patronales.
Blue tranquilo y más reservas
El dólar blue retrocedió en el cierre de la semana a $ 148 para la venta, mientras el Banco Central logró por décima jornada consecutiva recuperar reservas y embolsó otros u$ s 10 millones, al intervenir en la plaza.
En lo que va de diciembre, la autoridad monetaria logró sumar unos U$ S 130 millones, en un escenario más tranquilo y controlado por las medidas oficiales. Respecto del dólar informal, el oficial mayorista registró una diferencia del 78%, debajo de los casi 150% de mediados de octubre.
El blue cumplió cuatro registros semanales en baja de manera consecutiva tras subir el lunes $ 3 y superar los $ 150. El tipo de cambio minorista promedio relevado por el Banco Central se ubicó en $ 82,02 para la compra y $ 88,26 para la venta, ocho centavos por encima de la jornada anterior.
Ese precio para el billete estadounidense posicionaba a la cotización "solidaria" en $ 145,63, debido a la carga impositiva del 65%, correspondiente al tributo PAIS, y el recargo del 35% deducible de Ganancias y Bienes Personales.
En el mercado mayorista, la divisa norteamericana cerró a $ 82,84, trece centavos más que en la jornada anterior, con lo que en la semana acumuló un alza de 63 centavos, la suba más alta desde fines de noviembre.