En la noche del 24 y 25, el municipio local -en coordinación con la Unidad Regional Primera de Policía, URI- labró tres 3 actas de infracción por fiestas clandestinas en la ciudad. Pero también, fuentes policiales informaron que se logró desarticular otras dos reuniones sociales no permitidas en la localidad de Rincón.
Agentes de la Comisaría Distrito 14ta. De San José del Rincón -junto a personal dependiente de la Municipalidad local- desactivaron dos fiestas clandestinas que se desarrollaban en la vecina ciudad. La primera de ellas era realizada en Calle del Sol al 2400 y al arribo de los agentes había aproximadamente 40 personas. Por otro lado, en Los Aromos y Callejón Laborie, se desarrollaba un encuentro con unos 450 jóvenes.
Tenés que leerMar del Plata: desactivaron 20 fiestas clandestinas“En ambos casos, los agentes municipales labraron las correspondientes actas de infracción y los efectivos se abocaron al desalojo y retiro de todos los asistentes, que se desarrollo sin inconvenientes”, indicaron las fuentes policiales.
“Tuvimos prestando colaboración con la policía e hicimos tres actas de infracción por fiestas clandestinas (o reuniones sociales no permitidas). Se hizo la denuncia policial y el fiscal realizará las actuaciones que considere pertinentes”, le dijo a El Litoral Virginia Coudannes, secretaria de Control y Convivencia Ciudadana municipal. La funcionara adelantó que la planificación va a continuar la semana que viene, en las celebraciones de Año Nuevo.
Además, hubo dos actas por ruidos molestos, que llegaron por el 0800 del Municipio; se realizaron 70 controles vehiculares (Costanera Oeste, zona norte de la cudad, Ruta 1 con la Agencia Provincial de Seguridad Vial, APSV, y algunas avenidas troncales del ejido urbano). Y, con respecto a la pirotecnia, desde el martes hasta anoche hubo 22 lugares controlados: fueron 16 los decomisos de pirotecnia ilegal.
Ese fue en líneas generales el saldo que dejó el operativo de control durante Navidad en la ciudad, en el que más trabajaron 30 agentes en calle (inspectores tránsito, vía pública y GSI) con ocho móviles en la ciudad, prestando colaboración a la policía en diferentes puntos de la capital.
“El objetivo fue mantener ordenados los espacios públicos y la circulación vehicular. Se trabajó en conjunto con la URI, prestando acompañamiento en los procedimientos de la policía sobre todo en estrategias disuasivas en espacios que habíamos identificado. Fue un operativo que nos llevó mucho tiempo diseñar”, expresó Coudannes.
-¿Notó cierto descontrol o irresponsabilidad social durante la Navidad, o no fue tan así?, consultó El Litoral a la funcionaria.
-Me esperaba más afluencia de gente. Creo que hubo menos (afluencia) porque no hubo ningún “llamador social” (los paradores estuvieron cerrados y los boliches también) para que la gente se aglutine. Se trabajó muy bien con la policía en las postas de control.
Lo que noté fue a las familias en las veredas con algún vecino; creo que se volvió a una dinámica que tiene más relación con lo doméstico. Pienso que eso fue bueno. Estuvo ordenando, aunque por supuesto siempre hay cosas por ajustar.