El año pasado, Argentina logró alcanzar un total de 56,5 millones de toneladas de granos embarcados, los que implicó un 6% menos que en 2019, quedando de esta forma en el segundo mayor volumen histórico, de acuerdo con un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).
Dentro de las zonas portuarias, el Gran Rosario volvió a ganar participación ya que subió un 68 % llegando a sus máximos históricos y el maíz ganó protagonismo y representó el 64 % del total de granos. El sorgo también tuvo un buen año y alcanzó un incremento del 43 %. Soja, cebada y trigo, en tanto, muestran caídas del 30%, 17% y 8%.
Según el informe, los motivos por los que se vieron menos embarcaciones se deben a las consecuencias del clima seco y caluroso de febrero y marzo del 2020. Además, se debe sumar la bajante del río Paraná y el desafío de la pandemia.
Analizando en detalle los productos exportados, se puede observar que el maíz y el sorgo fueron los granos que más crecieron en exportaciones. "El maíz, con 36 millones de toneladas embarcadas, representó nada menos que el 64% de los despachos totales de granos de nuestro país", aseguraron desde la BCR.
En este sentido, el volumen embarcado en el 2020 supera en más del 50% el promedio despachado en el último lustro. Hace apenas 5 años, las exportaciones eran de 15 millones de toneladas, menos de la mitad de lo que se exportó el 2020.
En lo que respecta a soja, sus embarques cayeron con una caída interanual del 30 %. Sólo en el año 2018 los embarques de poroto de soja fueron más bajos que en el 2020, año en el que Argentina sufrió una severa sequía que diezmó la producción, explicaron desde la entidad.
El informe sostiene que, por un lado, la producción de soja en la trilla 2020 cayó un 10% y, por el otro, el grano argentino perdió competitividad respecto a los otros dos grandes proveedores, Estados Unidos y Brasil.
Por su parte, la cebada y el trigo, también, vieron caer sus embarques debido, principalmente, a la caída de la producción. "En el caso de la cebada, con 2,6 Mt despachadas, se tiene el volumen más bajo desde el 2017, en tanto que las 10,25 Mt embarcadas de trigo representan el menor volumen desde el 2016", sostuvo la Bolsa de Comercio de Rosario.
Los especialistas de la BCR también realizaron el análisis de las terminales portuarias del Gran Rosario. Estas son las que mayor participación tuvieron en el total del 2020: San Lorenzo (nodo que agrupa las localidades de Timbúes, Puerto General San Martín y San Lorenzo) con el 42% de los despachos totales, y Rosario (que contiene los puertos de Arroyo Seco, General Lagos, Punta Alvear, Rosario y Villa Gobernador Gálvez) con el 25%. "Así, el nodo Gran Rosario dio cuenta del 68% de los embarques totales de granos de la República Argentina en el año 2020, en línea con sus máximos históricos", aseguraron.
Debe destacarse que, de las 10 terminales portuarias líderes en volumen de grano despachado, las siete primeras se encuentran emplazadas en el nodo Gran Rosario.
"Los puertos de ADM en Arroyo Seco, Cargill en Punta Alvear y T6 en Puerto General San Martín (PGSM) encabezan el ranking, seguidos por Servicios Portuarios 6 y 7 en Rosario y las plantas de COFCO en PGSM en el quinto puesto y en Timbúes el sexto puesto", explicaron desde la BCR.
Finalmente, se indicó que la terminal de ACA en San Lorenzo cierra el top 7. Sumando estas terminales, los embarques llegan a 24,9 millones de toneladas en el 2020, un 44% del total nacional.
Faltan trabajadores para las cosechas regionales
En un país donde el nivel de desempleo roza el 12% según las cifras oficiales, al mismo tiempo muchas economías regionales ven peligrar sus cosechas por falta de trabajadores. Estas labores requieren de mano de obra intensiva y anualmente involucran a más de 600.000 cosecheros golondrinas que se trasladan a diversas regiones del país. Es inminente la fecha para cosechar peras y manzanas en el Alto Valle, tabaco en Salta, uva en Mendoza y cítricos en la Mesopotamia, entre otros, y aún no se pueden cubrir los puestos para estas labores.
"Los trabajadores no quieren asistir a las fincas para cosechar porque eso implica que deben dar de baja a los beneficios de los planes de asistencia que reciben, tanto nacionales como provinciales", explicó Pablo Vernengo, director ejecutivo de Economías Regionales de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came), según el sitio A24.