“Cuando la pandemia obligó a cerrar todas las salas en un hecho inédito e histórico, quienes hacemos teatro, cine o televisión comenzamos a explorar nuevos territorios, y frente a un futuro incierto y un mundo sin cartografía, comenzaron a surgir islas de creación”, afirman las creadoras de “Desbordadas”, un microformato pensando en Instagram como plataforma: un encuentro entre los personajes de Daniela Cometto (Solito) y de Yanina Bileisis (Soledad).
“Las fronteras y las distancias pasaron a tener nuevos significados y así como no podíamos tocarnos y vernos frente a frente, pudimos, vaya paradoja, aprender a vivir en un mundo virtual donde las distancias no existen. Un lugar y espacio de reencuentro que permitió que dos amigas que comenzaron en Santa Tomé en los años 90 a transitar el teatro con solo 13 y 18 años nos reuniéramos nuevamente una en Santa Fe, y la otra en Buenos Aires para trabajar en un nuevo proyecto desde otros formatos”, agregan.
Solito es un empleado del Subte “B” a quién lo despiden por realizar muchas torpezas en su trabajo, de esta manera se encuentra con Soledad, empleada pública, eterna candidata recientemente electa a concejal de la comuna de un pequeño pueblo, quien asume tras ganar las elecciones dándole una oportunidad a Solito como su asistente. Del desopilante encuentro de estos dos seres tan particulares surgen las aventuras que dan forma a los capítulos de esta serie web en micro formato.
Tras varios años de transitar el trabajo audiovisual en el taller de Raúl Perrone “Hace tu película” además de filmar varios cortos y películas como actriz tanto en Santa Fe como en Buenos Aires, Daniela Cometto encuentra la oportunidad de encarar proyectos audiovisuales como directora. De esta manera fusiona el humor con lo audiovisual con un abordaje clownesco y, junto a su compañera Yanina Bileisis, reconocida actriz, bailarina, generadora de proyectos como directora teatral y en danza, Profesora en la escuela de teatro de Santa Fe, deciden llevar adelante este proyecto juntas. Solito y Soledad invitan a verlo desde este viernes 29 a las 21, en el teléfono o la computadora, siguiendo desde Instagram en @desbordadasserieweb, @daniela_cometto y @YaniBileisis.
El Litoral eligió profundizar sobre esta iniciativa, de la mano de sus protagonistas.
-Se conocen hace años, son dos santotomesinas que empezaron en la adolescencia en el teatro. ¿Cómo fue la decisión de volver a trabajar juntas, y cómo fue la experiencia?
Yanina: -Empezamos en la adolescencia, recorrimos varios escenarios juntas, varios encuentros de teatro, varias obras; después cada una siguió por su lado. Ahora cuando se hizo la primera apertura de la pandemia Daniela vino a visitar a su familia, y nos encontramos; ya veníamos charlando por Zoom.
Nos encontramos en Roja Moreno, a probar; con barbijos, con distanciamiento, siguiendo todos los protocolos, a ver qué nos pasaba. Ni siquiera habíamos pensado aún en el formato, sino qué pasaba con estos dos personajes. Así, como un juego, fueron surgiendo en este encuentro de Solito y Soledad, fueron surgiendo situaciones insólitas, inéditas y divertidas.
Daniela: -En esto de que el distanciamiento social nos ha alejado mucho, nos ha encerrado, también hizo que los afectos se acerquen un montón. Con Yani nos conocemos hace muchos años, y hemos conectado primero desde la amistad. En un viaje de estos que voy para Santa Fe (en Buenos Aires fue un poco más duro el encierro) a despejar un poco apenas se pudo, primero nos encontramos desde la amistad, con mucha charla de por medio.
Desde mi visión, ella tiene un personaje que ya traía, yo también; y como directora veía que el personaje de Yani podía ir muy bien con la estética de solito. Considero que Yanina es una excelente actriz, y su imagen daba con este personaje; lo cual a mí me enciende para ponerlos juntos y poder dirigirlos dentro de un microformato.
Por supuesto, el encuentro fue a partir de muchos juegos: la primera vez que nos juntamos a ensayar o a probar surgieron cosas que ni tuvimos que hablarnos, fluían muchísimo, con mucha diversión. Los personajes conectaron desde el primer ensayo juntas. Que fue barbijo de por medio, con distanciamiento, ventanas abiertas, alcohol y todas las precauciones que había que tener en el espacio que usamos para filmar.
-Ya habían trabajado estos personaje en monólogos. ¿Cómo fue adaptarlos a este nuevo formato?
Daniela: -Con Solito venía trabajando en salas de teatro y espacios culturales en Buenos Aires, como también en Santa Fe. Por suerte ya lo venía adaptando en este microformato cuando se hizo Escena Despierta, además desde el principio de la pandemia utilicé este formato, haciendo videos de un minuto con Solito. Ya que empecé a largarme como directora: hice videoclips, videos individuales; y fue muy enriquecedora la pandemia para poder meterme dentro de este formato.
Yanina: -Adaptarlo a este nuevo formato fue parte del juego. Fue parte de divertirme, y de probar algo nuevo. Es un personaje que lo tengo muy aceitado, que es mí personaje, que lo llevo siempre; hago muchas obras, y a este monólogo no lo abandono: lo adapto, lo he cruzado con otros personajes de otros actores y actrices, y han surgido un montón de cosas lindas. Así que este formato fue un desafío más, pero muy divertido, y me encantó. Fue una experiencia fantástica.
-La comedia en vivo tiene la respuesta inmediata de la audiencia. ¿Cómo se hace ahora cuando la risa no está?
Daniela: -Cuando falta la risa es distinto: se siente como un vacío y una falta de acercamiento al público; el calor del público que uno necesita. Pero sí este formato está más acercado a lo televisivo, donde no tenemos el calor del público pero tenemos el calor de la gente que nos sigue y nos hace comentarios lindos, que nos va alentando dentro de lo que son estos microformatos en las redes sociales.
Yanina: -En este caso estaban nuestras risas. Creo que el hecho de que no sea un estreno, y que ya tenga las risas incorporadas a cada cosa que hago con este personaje ayudó un montón: las risas estaban dentro. Y estaban entre nosotras, en el encuentro nuestro.
Creo que hay una resiliencia y un redireccionar todo: entender dónde estamos paradas. No está la risa; estábamos nosotras, están nuestras risas, y están los aplausos resonando en nuestro interior. Aprendiendo de lo nuevo, adaptándonos, y esperando ansiosas un escenario.
De la cabeza a la pantalla
-En tu caso a tu trabajo como actriz en cortos y películas le sumaste una formación en el taller de Raúl Perrone. ¿Cómo fue ponerse en el rol de guionista, directora y camarógrafa?
Daniela: -Al ser cine independiente es un trabajo arduo: mucho pulmón, mucho trabajo y mucho esfuerzo. Pero lo que sí me queda de todo esto y del aprendizaje con Raúl es hacerlo sí o sí. Es hermoso como guionista poder ser generadora de ideas: tener ideas en la cabeza y poder plasmarla en un pantalla. Es alucinante: poder llevar las ideas a un papel y plasmarlas es lo visual es muy enriquecedor y muy gratificante.
Como camarógrafa por suerte tengo un asistente de dirección que es Ariel (Piluso), que pueden entender prácticamente de una sola dirección cómo va la cámara, y fluye de manera muy rápida el trabajo. Entonces en muy poco tiempo filmamos mucho; venimos aceitados de todo este año de la pandemia. Le digo: “Es acá, contrapicado, subo, bajo, pum pam”; él lo hace de una manera que nos entendemos perfectamente.
Como directora fue muy lindo. Por ahí me ha costado un poquito que Yani entienda un poco la dinámica, porque hay trabajos distintos en cada una en cuanto a set de filmación. Pero Yanina es una persona muy inteligente que capta todo muy rápido; entonces eso me alivianó.
Es muy gratificante como directora poder estar plasmando en la pantalla lo que realmente me gusta hacer, y poder dirigir este proyecto. Me da mucha alegría y mucha satisfacción. De hecho se lo he mandado a Raúl, y me dijo: “Es muy bueno lo que estás haciendo”. Pedí su “aprobación” (risas), y lo tengo ahí al pie del cañón, como un profesor, un padre, un guía del trabajo: para mí su mirada es importante también. Tener su “es muy bueno”, y que me ponga un “ja” muy grande, fue lo mejor que me pudo pasar como directora.
Dirección: Daniela Cometto.
Actuación: Yanina Bileisis, Daniela Cometto.
Guión, cámara y edición: Daniela Cometto.
Maquillaje: Yanina Bileisis.
Producción: Yanina Bileisis, Daniela Cometto.
Asistencia de dirección y fotos fija: Ariel Piluso.