Luego de varios meses de prolijas tareas, la Agencia de Investigación Criminal de Las Colonias logró atrapar al cuarto y último integrante de una banda de piratas del asfalto conformada por tres hermanos y la mujer de uno de ellos.
Luego de varios meses de prolijas tareas, la Agencia de Investigación Criminal de Las Colonias logró atrapar al cuarto y último integrante de una banda de piratas del asfalto conformada por tres hermanos y la mujer de uno de ellos.
El arresto del hombre se realizó por pedido del fiscal del caso, el doctor Alejandro Benítez, con ordenes de allanamiento otorgadas por el juez Leandro Lazzarini.
Las irrupciones fueron concretadas por equipos del Grupo de Operaciones Especiales de la Unidad Regional I y del Grupo de Operaciones Tácticas de la Unidad Regional XI, en dos domicilios de Sa Pereyra: en calle Gálvez s/n y en 25 de Mayo al 200. En este último inmueble estaba "aguantado" el sospechoso, que terminó esposado sin mayor resistencia.
Sus familiares y cómplices habían sido detenidos el 3 de julio del año pasado, durante una serie de allanamientos realizados en las ciudades de Rafaela, Recreo y Santa Fe (en el distrito costero de Alto Verde). En esa oportunidad cayeron dos de los hermanos y la concubina de uno de ellos. Todos fueron imputados y permanecen en prisión preventiva desde entonces.
Los hechos
Están acusados de ser quienes perpetraron al menos tres robos a mano armada, con similar modus operandi, sobre la ruta nacional 19, en inmediaciones de la localidad de Sa Pereyra.
Para el fiscal, los cuatro fueron quienes asaltaron a un camionero en horas de la madrugada del 21 de abril del año pasado. El chofer detuvo su marcha al ver a una mujer haciendo dedo. Cuando ella abrió la puerta del acompañante los que aparecieron fueron otros tres hombres encapuchados y armados, quienes amenazaron y agredieron a la víctima para despojarla de dinero en efectivo, teléfonos celulares y herramientas.
Tres días después, también de madrugada, los tres hombres sorprendieron a un camionero que habían parado en el kilómetro 60,5 para revisar las cubiertas. Los malvivientes estaban encapuchados y con ropa oscura. Tenían cuchillos y un arma de fuego que le apoyaron en la espalda al chofer. Lo despojaron de sus pertenencias sin lastimarlo.
Finalmente, a la 1 de la mañana del 4 de mayo del año pasado, emboscaron a otro trabajador del volante que pasaba por el lugar. El conductor paró al ver a una persona inconsciente tendida sobre el guardarrail, pero al descender fue atacado por ese sujeto y otros dos que salieron de la oscuridad. Los delincuentes lo amenazaron con armas blancas y lo golpearon salvajemente para quitarse todo lo que tenía encima.
Los testigos señalaron en todos los casos que se trataba de personas con similares características en cuanto a contextura física. Además, los malvivientes escapaban siempre corriendo por el campo en dirección al pueblo.
Antecedente de robo y tragedia
Los tres hermanos piratas del asfalto pasaron varios años en prisión por un violento asalto ocurrido en enero de 2015 en Sa Pereyra, donde un matrimonio de abuelos fue sorprendido a primera hora de la mañana en su propio hogar.
Teresita y Carlos acababan de levantarse y se preparaban para tomar unos mates cuando fueron tomados por sorpresa por un grupo de jóvenes que iban en busca de plata y un arma de fuego, que los dueños de casa juraron no tener. Los golpearon hasta el cansancio y después los dejaron maniatados en una de las habitaciones.
Carlos fue dado de alta luego de algunos días; pero Teresita, que primero fue trasladada a una clínica de San Jerónimo Norte y luego derivada a un sanatorio privado de Santa Fe, falleció dos semanas más tarde, como consecuencia de un accidente cerebro vascular.