Los proyectos iniciales que tenía el Coro Polifónico Provincial de Santa Fe para 2020 quedaron truncos por la pandemia. Pero sus integrantes, guiados por el director Mariano Moruja, generaron piezas audiovisuales que combinaron las voces con imágenes creadas especialmente. Un repaso por el camino recorrido y las perspectivas para volver a la presencialidad.
Archivo El Litoral / Provincia de Santa Fe Durante 2020, buscamos realizar un aporte para que la gente que va normalmente a nuestros conciertos pueda sentir que el coro está y sigue vigente , señaló Mariano Moruja. Mientras, evalúan día a día posibilidades y espacios para poder retomar la presencialidad con protocolos.
El Coro Polifónico Provincial de Santa Fe cerró el 2019 de la mejor manera: fue reconocido como una de las cien personalidades y agrupaciones destacadas de la música clásica de la década. Su director, Mariano Moruja, también resultó galardonado por su labor. Esto permitió abrir amplias expectativas para 2020. Pero la pandemia rompió todos los esquemas y obligó a rehacer por completo el plan de trabajo. “Teníamos una programación fuerte. No sólo por el repertorio que iba a dirigir yo, sino por quienes eran los invitados y el tipo de conciertos que pensábamos. En lo personal, tenía un entusiasmo particular. Empezamos con el primer concierto y en marzo llegó la interrupción por la pandemia”, relató Moruja en una extensa charla telefónica, donde repasó junto a este medio lo hecho durante el último año.
“Cada tipo de organismo musical se la fue arreglando para subsistir, pero de una manera casi desnaturalizada, no reuniéndose en el mismo ámbito a ensayar”, explicó. En el caso de los coros, la cosa fue más compleja aún. “Se viene estudiando desde el año pasado qué es lo que ocurre con el aire cuando se emite la voz. En Europa y Estados Unidos hubo experiencias tristes, donde se contagió mucha gente en coros. Por lo tanto, estábamos completamente impedidos para hacer actividades presenciales y todavía hoy estamos complicados. De todos modos, hay grupos, y nosotros también lo vamos a hacer, que van a empezar a hacer algunas pruebas, con medidas de seguridad estrictas. Pero nuestro coro completo no puede caber en ningún lado, porque tomar dos metros de distancia entre los integrantes es imposible”, añadió.
Otro formato de trabajo
La imposibilidad de realizar conciertos y ensayos presenciales, obligó a coreutas, directores y coordinadores a agudizar el ingenio para poder continuar el trabajo en la distancia, a través de grabaciones caseras que luego eran editadas para generar videos destinados a redes sociales. “Al principio, traté de defender que esa no era la actividad nuestra, que no tenía mayor sentido. Lo que yo no quería era reemplazar la idea del concierto. Muchos de los coros lo que hicieron fue grabar la cara del que canta en una ventanita, para después sumarla a otras como un múltiple Zoom. Hicimos eso una vez, pero me dí cuenta que lo que tenía más sentido era generar un nuevo lenguaje en el cual no hiciera falta la cara del que canta, que representa justo lo que no queríamos hacer, es decir el reemplazo del concierto” explicó Moruja.
De modo que lo que se hizo fue generar una nueva metodología. Los cantantes cantaron y se grabaron, efectivamente, en sus casas pensando en un video. Pero el trabajo visual fue encargado a un especialista. “La idea era que lo visual no fuera la cara de los cantantes, sino algo generado por un artista. Lo que pensé fue que, si lo que vamos a hacer son videos, tenemos que hacer videos de calidad, con gente adecuada y con ideas adecuadas, para que los videos sean interesantes”, expresó Moruja.
En los distintos trabajos diagramados desde entonces (que están disponibles en las redes sociales del Coro Polifónico) se abordó la canción “Aurora”, dedicada a la bandera argentina y también trabajos de diversos artistas, con la incorporación de paisajes y personas. “Cada video tuvo una idea, hasta incluso uno se hizo con animación. Buscamos la manera de hacer un aporte para que la gente que va normalmente a nuestros conciertos tenga algo para sentir que el coro sigue, que el coro está, que sigue vigente y que estamos pensando en mantener la calidad”, remarcó Moruja.
Perspectivas
Todavía no está claramente definido cómo será el 2021 del Coro Polifónico Provincial. “Estamos día a día midiendo, calculando la situación y las posibles líneas de acción”, indicó el director. En principio, deberán encontrar un espacio que les permita trabajar al aire libre y manteniendo la correspondiente distancia social.
“Es complicado cuando se trata del mundo profesional. Una cosa es adherir vocacionalmente a algo, lo cual tiene cierta informalidad y otra cosa es cuando, profesionalmente hay que abordar con responsabilidad el tema de la salud. No queremos que ninguno de nosotros tome riesgos, ese es el punto número uno. Por ahora, si bien la esperanza de todos está en la vacuna, lo que estamos haciendo es armar distintos tipos de planes de contingencia. Así como te digo que el coro es un grupo profesional y en ese sentido está atado a determinados condicionamientos en su seguridad, también te digo que está altamente imbuido de amorosidad en el sentido de la vocación”, cerró Moruja.