Fijaron fecha para el primer juicio por un doble homicidio sin cuerpos
A pesar de que los cadáveres no fueron encontrados, la fiscalía solicitará la pena de 25 años de prisión para Daniel Vasilovski por el asesinato de sus dos vecinos, en diciembre de 2017.
Archivo El Litoral Benito Sosa y Estela Ríos desaparecieron hace más de tres años. El único acusado de sus homicidios es su vecino, Daniel Vasilovski.
Luego de que la jueza de segunda instancia Martha Feijoó rechazara la apelación de la defensa, se fijó la fecha de inicio del juicio contra Daniel Eduardo Vasilovski. El baqueano está acusado por el homicidio de sus vecinos, Benito Sosa y Estela Ríos, quienes desaparecieron la mañana del 19 de diciembre de 2019, en Arroyo Leyes.
Una de las particularidades de la causa es que los cadáveres de las víctimas no fueron encontrados, y si bien existen precedentes a nivel nacional, será la primera vez que se juzgue un hecho de este tipo en la primera circunscripción judicial que tiene como sede a Santa Fe. El fiscal Omar De Pedro solicitará la pena de 25 años de prisión por los dos "homicidios" atribuidos a Vasilovski, mientras que el defensor público Javier Casco pretende la absolución.
El tribunal de juicio estará conformado por los Dres. José Luis García Troiano -presidente-, Octavio Silva y Sergio Carraro. Según la agenda fijada por la Oficina de Gestión Judicial, el debate comenzará el martes 9 de marzo por la mañana y se desarrollará a lo largo de 9 jornadas en las que 200 testigos prestarán declaración. Se estipula que el viernes 19 de marzo las partes realicen sus alegatos de clausura y el lunes siguiente el tribunal de lectura del veredicto.
Sin cuerpos
Uno de los cuestionamientos principales de la defensa se centra en que los cuerpos de Benito Sosa y Estela Ríos jamás aparecieron. Sobre esa base se apeló la resolución preliminar, pero la jueza de Cámara, Martha Feijoó, confirmó la resolución de primera instancia dictada por el juez Jorge Patrizi.
"Nuestro ordenamiento procesal no contiene ninguna regla que imponga al fiscal la obligación de hallar el cadáver de la víctima para poder formular acusación y así probar el homicidio", señaló Feijoó. "Tampoco existe una norma que imponga a los jueces el deber de sobreseer -o de absolver- ante la ausencia de cadáver en un homicidio".
La jueza también destacó que la ley exige "que las decisiones jurisdiccionales sean el resultado de la ponderación racional de las pruebas aportadas y producidas", y que no pudo sustentarse el planteo de la defensa a la hora de apelar porque sino "se llegaría al absurdo de consagrar la impunidad para quien, además de matar, logró hacer desaparecer el cuerpo de la víctima".
"Distintos juicios llevados a cabo en nuestro país demuestran que el que no se haya encontrado el cuerpo de la víctima no es obstáculo para que el fiscal formule acusación y se realice el juicio", consideró la Dra. Feijoó, y citó 11 precedentes nacionales en los que se llegó a una condena por homicidio en causas con estas características.
La causa
La mañana del 19 de diciembre de 2017 Benito Sosa, de 65 años, y Estela Ríos, de 52, salieron a pescar en su lancha y -a pesar de la intensa búsqueda desplegada por las autoridades- jamás fueron encontrados. Para la fiscalía, dado el estado de salud y las condiciones personales de ambos, "se puede afirmar con convicción suficiente que no se encuentran con vida y han sido ultimados".
Señalan a su vecino, Daniel Vasilovski, como el único asesino de la pareja, quien los habría atacado a la altura del Paraje "El Crespín" en zona de isla de Arroyo Leyes, donde residía. Según se detalla en la acusación, "allí les dio muerte en forma violenta a ambos, siendo arrojados luego al río, para hacerlos desaparecer, previo asegurarse que no pudieran ser hallados, aprovechando sus conocimientos como baqueano de la zona, sabiendo que la corriente y la fauna del lugar harían infructuosa la búsqueda".
En el rancho que habitaba Vasilovski encontraron pertenencias del matrimonio, como las cañas de pescar, el motor de la lancha de las víctimas, un tanque de combustible y una caja de pesca, entre otros elementos. A poco más de 100 metros hundida en el agua, estaba la lancha de Benito y Estela. Había sido "evidentemente hundida intencionalmente" ya que le faltaba el tapón de fondo. En la orilla, se encontró un sillón y almohadones que habrían estado en la embarcación, junto a un cartucho de escopeta.
Al día siguiente, bajo la excusa de que se iba a la ciudad de Córdoba, Vasilovski se dirigió a la terminal de colectivos. Fue aprehendido en un ómnibus camino a la provincia de Chaco. Actualmente permanece en prisión preventiva, a la espera del juicio.