El buen desempeño que mostró la economía en el segundo semestre de 2020 pierde fuerza y la actividad comenzaría a retomar el estancamiento propio de los últimos años.
Así lo reseña el informe mensual del Centro de Estudios y Servicios de la Bolsa de Comercio de Santa Fe.
El buen desempeño que mostró la economía en el segundo semestre de 2020 pierde fuerza y la actividad comenzaría a retomar el estancamiento propio de los últimos años.
La actividad económica provincial durante el primer mes de 2021, registró en Santa Fe una nueva contracción mensual, presentado una tasa del -0,1%. Con este resultado se vuelve a observar una silueta de estancamiento, que relativiza la recuperación entre mayo y noviembre de 2020.
Así lo expuso el informe habitual del Centro de Estudios de la Bolsa de Comercio de Santa Fe, que elabora el Índice Compuesto Coincidente de Actividad Económica de la provincia de Santa Fe. Indica que siete sub-indicadores presentaron variaciones mensuales positivas, uno se mantuvo sin cambios, y el resto se contrajo.
La molienda de oleaginosas comenzó el año recuperando parte de la caída registrada durante 2020, con incrementos del 3,5 y 3,0%, mensual e interanual respectivamente. Para la producción láctea las tasas fueron de 0,1 y 6,6%.
Por el contrario, la faena de ganado bovino y porcino registró caídas del 1,8% con respecto a diciembre de 2020, y del -16,7% en relación a enero de dicho año. En este marco, el consumo de hidrocarburos para la agroindustria y el transporte obtuvo una tasa mensual del 1,2% pero disminuyó en la comparación interanual (-8,3%).
El patentamiento de vehículos nuevos también registró una caída del 7,1% con respecto a diciembre del año pasado, aunque se mantiene en terreno positivo en la comparación interanual (49,4%).
Por su parte, el consumo de cemento señaló un comportamiento similar, en tanto las tasas fueron de -1,3 y 38,5%, respectivamente. Para las ventas de maquinaria agrícola, se observa una caída mensual del 1,2%, y un incremento interanual de 37,4%.
El consumo de energía industrial continúa en niveles bajos. En lo que respecta a la energía eléctrica la variación mensual del indicador fue nula con una caída en términos interanual del 8,0%; mientras que el consumo de gas, presenta cambios del 2,1% y -0,4%, respectivamente.
Por último, en enero de 2021 la disponibilidad de recursos tributarios por parte del estado provincial, en términos reales, presentó incrementos del 0,4 y 12,9%, mensual e interanual, respectivamente.
Trabajo y consumo
La demanda laboral comenzó el año con una tasa mensual positiva (3,3%), pero se mantiene en terreno negativo en la comparación interanual (-14,5%). En sintonía, los puestos de trabajo registrados (altas netas) mejoraron levemente contra diciembre de 2020 (0,3%), aunque la variación interanual se ubicó en -0,6%. Respecto a las remuneraciones reales, el poder adquisitivo del conjunto de los trabajadores formales sigue perdiendo frente a la inflación, comenzando el año con una caída mensual del 0,9%, e interanual del -4,4%. En cuanto a las ventas en supermercados(grandes superficies), la serie comenzó el año con una baja mensual del 0,5%, y un leve incremento interanual del 0,3%.
“En enero de 2021 el ritmo de variación interanual del ICASFe alcanzó al 2,3%. Sin embargo, el resultado sigue apoyándose en una cuestión estadística, dado que la base de comparación, enero de 2020, se ubica en un nivel históricamente bajo”, señala el informe.
“En términos de difusión se observa cierta recuperación en indicadores relativos a la agroindustria, pero como contracara, registran caídas variables relacionadas con la inversión en bienes durables; un tema clave a la hora de pensar en un crecimiento sólido de largo plazo”.
En relación al mercado laboral, el CES advierte que “las altas netas mejoraron en los últimos meses, pero esto no alcanza para compensar la contracción interanual del indicador y, menos aún, a reencaminar el proceso de pauperización laboral que ha tomado fuerza junto a la pandemia.
“Asimismo, el poder adquisitivo de los asalariados registrados se mantiene en terreno negativo, situación que se refleja en la falta de recuperación del consumo”.
Señala por último que “en línea con el escenario de estanflación de mediano plazo, los resultados coyunturales obtenidos suman incertidumbre a la recuperación que se visualizó a partir de mayo de 2020”.