Este viernes hubo retención de tareas por tres horas. Es la tercera medida similar que se concreta esta semana. Las demandas ya fueron elevadas a las autoridades pero advierten que no hubo respuesta.
Mauricio Garín Por tercera vez esta semana se dispuso hacer una medida de fuerza en el Centro de Salud de Las Lomas
El equipo del Centro de Atención Primaria en Salud Las Lomas realizó este viernes, de 10 a 13, una nueva medida de fuerza con retención de tareas. Los planteos en el efector, ubicado al noroeste de la ciudad, incluyen falta de personal, precarización laboral, condiciones de trabajo y atención, y respuestas inmediatas a la comunidad. Esa comunidad, cabe aclararlo, proviene de Las Lomas y también de barrios aledaños.
"Los problemas comienzan afuera y llegan hasta el interior del edificio", advierten Juan Felli, odontólogo y coordinador del Centro de Salud, y Candelaria Sánchez, trabajadora Social. Es que por Boneo, adonde da la puerta de entrada, y el Primer Pasaje (ahí nomás, a metros del ingreso), las huellas de las últimas lluvias estaban bien visibles: pozos, charcos y barro dificultaban el tránsito desde y hacia el interior de los barrios.
Adentro también hay problemas visibles: el mismo baño se utiliza para el personal y para pacientes que requieren atención. Es que el sanitario destinado a médicos y enfermeros está fuera de servicio "desde hace meses".
Mauricio Garín Parte del equipo de salud que atiende en el centro sanitario de Las Lomas
Parte del equipo de salud que atiende en el centro sanitario de Las LomasFoto: Mauricio Garín
Con respecto al personal, el planteo es por "precarización laboral de médicos, de la trabajadora social y de la traductora qom". Este último tema tiene una particular complejidad: "Tenemos una comunidad qom muy grande dividida entre Santo Domingo y Las Lomas, y la traductora no tiene estabilidad laboral sino que se le ofreció encuadrarse con un monotributo". Sin embargo, "acá la gente de esa comunidad no habla el castellano, nuestros médicos no entienden qué les están diciendo y los pacientes tampoco comprenden qué medicamentos deben tomar", ejemplificó Felli.
Mauricio Garín Una postal del barrio donde se prevé realizar una importante intervención urbana y social.
Una postal del barrio donde se prevé realizar una importante intervención urbana y social.Foto: Mauricio Garín
La demanda de la comunidad qom es importante, no solo por los barrios en los que se ubica dentro de la ciudad, sino también porque hay una población que viene desde otros puntos del país -Chaco, por ejemplo- y recibe atención sanitaria en esta ciudad. De ahí la importancia de contar con esta figura de mediadora cultural.
Más planteos
En cuanto a Felli y Sánchez, "estamos con reemplazos de más de 5 años; en mi caso como coordinador desde marzo del año pasado", y un mal escalafonamiento en el caso de la trabajadora Social.
Son trece las personas que se desempeñan en el centro de salud, que funciona de 7 a 13. Entre ellas, Fernanda Espinosa, Nicolás Miranda (ambos enfermeros), y la médica Patricia Mendoza quienes se sumaron al diálogo con este diario.
La preocupación también es por la atención que se brinda a la comunidad: "No podemos garantizar agua potable en el centro de salud ni baños ni que la gente que venga acá tenga una atención óptima". En el staff médico falta por estos días la pediatra "que está de licencia y tiene un reemplazo; como no puede haber reemplazo de reemplazo, nos quedamos sin esa especialidad". Salvo para niños y niñas de 0 a 6 meses a quienes se garantiza atención luego de redistribuir tareas entre el resto de las profesionales.
"No le podemos dar la espalda a la comunidad", afirman los profesionales. Y la búsqueda de otro centro de salud tampoco resulta tarea fácil para quienes viven en el interior de los barrios: son unas 15 cuadras hasta Blas Parera y unas 25 para llegar al Mira y López.
"Hasta acá llegamos", resumieron los profesionales que decidieron visibilizar su reclamo y para ello contaron con el acompañamiento de referentes de Siprus.
Si se atiende a niños y niñas de 0 a 6 meses que es una población altamente vulnerable por un compromiso de las médicas que quedaban. "No le podemos dar la espalda a la comunidad".
pero con las dificultades para salir del barrio y acceder al transporte público, el acceso a otros centros de salud más alejados se complica. Desde Blas Parera son unas 15 cuadras, al Hospital Mira y López, unas 25.