El valor internacional de la soja ya se ubica por encima de los U$ S 565 la tonelada, pero el productor argentino apenas recibe un 38% del precio de cotización en Chicago, por las retenciones y la brecha cambiaria.
El productor argentino recibe apenas un 38 % de lo que cotizan los granos el principal mercado agrícola del mundo.
El valor internacional de la soja ya se ubica por encima de los U$ S 565 la tonelada, pero el productor argentino apenas recibe un 38% del precio de cotización en Chicago, por las retenciones y la brecha cambiaria.
El poroto de soja volvió a subir con fuerza durante la última semana en el mercado internacional, y alcanzó el nivel más alto en casi ocho años.
La cotización de la oleaginosa no encuentra techo ante la sostenida demanda de China y la decisión de los fondos de inversión de volcarse a los commodities.
El presidente de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap), Horacio Salaverri, advirtió que el productor argentino "aún con el incremento de la soja en Chicago, no se beneficia más que con el 38% del precio, por las retenciones y la diferencia entre los dólares".
En diálogo con NA, Salaverri, quien además es contador, explicó que "en cambio, el productor uruguayo recibe el 95% analizando la región, y el brasileño el 99,14%".
"La diferencia está hecha por las retenciones que paga el argentino y la brecha entre un dólar oficial y el libre", precisó y enseguida advirtió: "Se trata de una reducción muy importante que quita competitividad al productor agropecuario".
"En términos del país esto produce un incremento en el ingreso de divisas que ayuda a estabilizar la macroeconomía, por eso siempre es importante el incremento de los valores de los productos que Argentina exporta al mundo, básicamente commodities agrícolas", indicó.
Por su parte, el presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Jorge Chemes, lamentó la "diferencia muy alta entre lo que se exporta y cobra".
En diálogo con Noticias Argentinas, advirtió que se suman "los altos costos de fletes y la ineficacia de los puertos".
Cuando el 20 de abril el precio de la soja en la Bolsa de Chicago superó los U$ S540 por tonelada, en un grupo de WhatsApp de productores y analistas del mercado dijeron "récord mundial".
Sin embargo, no se referían al precio, que todavía no es récord porque no superó los US$ 650 alcanzados en 2012, sino por otro motivo: el magro 38% que recibe el productor argentino de ese valor en Chicago, traducidos a pesos, cuando se lo considera con el contado con liqui (CCL).
Ese 38% es justamente debido a las retenciones que hay sobre el grano, del 33%, según lo fijado el año pasado por el Gobierno nacional, además del efecto de la brecha de precios del dólar que distorsiona la actividad.
La soja para entrega en mayo en Rosario quedó en U$ S340 por tonelada, valor que oscila en la plaza argentina.