Por Carlos Retamal
Las víctimas estaban charlando luego de comer unos choripanes en la planta baja de un complejo Fonavi ubicado sobre calle Baigorria al 2400. Tras el ataque, los homicidas huyeron corriendo.
Por Carlos Retamal
Mayo arrancó con M de muerte. En la tarde de este sábado 1°, entre dos y tres personas llegaron caminando por calle Baigorria a la altura del 2400, entre Brasilia y Zenón Pereyra y atacaron a tiros a un trío que se encontraba charlando en el ingreso a una de las torres, luego de comer unos choripanes. Dos de ellos murieron prácticamente en el acto, mientras que el tercero fue derivado a un centro asistencial, donde quedó alojado en estado reservado.
Fuentes de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) señalaron que minutos después de las 15, se produjo una violenta balacera en la planta baja de una torre de viviendas del complejo conocido como Fonavi de calle Baigorria.
Los primeros en llegar al lugar fueron agentes del Comando Radioeléctrico y de la comisaría 30ª, ubicada a unos 300 metros, en otro sector del complejo de viviendas, tras recibir múltiples llamados pidiendo ayuda ya que se había producido un tiroteo.
Tras constatar que había 3 personas heridas, pidieron asistencia médica y en pocos minutos llegó al lugar una unidad sanitaria del Sies, que constató que dos de las personas habían muerto, producto de varias heridas en el tórax, abdomen y cráneo, y que una tercera persona presentaba una herida de arma de fuego en hombro y espalda, por lo que fue trasladado al hospital Alberdi para su atención.
Vecinos de la zona indicaron a personal policial que todo ocurrió en pocos minutos y que en principio no hubo discusión previa, ya que el trío que fue atacado estaba charlando tras comer unos choripanes en ese lugar.
Dicha versión fue corroborada por quien resultó herido, identificado como Juan Antonio M., de 45 años, quien es conocido en la zona porque desde hace muchos años pide monedas y ayuda en el semáforo que está ubicado en calle Baigorria y Casiano Casas, unos 200 metros al oeste de donde ocurrió el ataque.
Según indicó, poco antes de las 15 fue a comprar una gaseosa a un kiosco cercano y una persona que conoce del barrio, apodado Rulo, lo invitó a comer ‘un chori’ junto a un amigo en la planta baja del Fonavi.
Siempre según sus dichos, cuando estaban comiendo aparecieron dos personas caminando que se acercaron, sacaron armas de entre sus ropas y empezaron a disparar. Luego del ataque que duró escasos minutos, se dieron a la fuga corriendo hacia el interior del Fonavi.
Fuentes judiciales y policiales identificaron a las víctimas fatales como Cristian Marcelo Bogalino, de 23 años, que tenía domicilio en uno de los monoblocks ubicados sobre calle Baigorria 2473, que era conocido en el barrio como Rulo y en principio estaba bajo el régimen de prisión domiciliaria (tenía una tobillera de monitoreo activada) y César Navarro, de 36 años, domiciliado en Casiano Casas al 2800, que se hacía llamar Rambito.
El fiscal en turno de la Unidad de Homicidios Dolosos, Adrián Spelta, llegó al lugar y ordenó que se llevan adelante distintas pericias. En primer lugar pidió al gabinete criminalístico que tome muestras fotográficas, de planimetrías, rastros y que constate la existencia de cámaras de seguridad públicas y/o privadas que hayan captado la secuencia del ataque. En la esquina de Baigorria y Brasilia hay una estación de servicio, por lo que se espera que las cámaras hayan grabado el doble crimen.
También ordenó que se le realice dermotest y se secuestren las prendas que usaba el hombre que resultó herido.
En el lugar se recogieron 9 vainas servidas, 8 calibre 22 y una calibre 9 milímetros, que fueron enviadas a peritar.
Múltiples sospechas
Los pesquisas tienen varias hipótesis bajo investigación. La primera de ellas apunta a un crimen perpetrado por sicarios, por la violencia del ataque y que las balas estaban dirigidas a quienes resultaron muertos y que el motivo está relacionado con la venta de estupefacientes en la zona.
Otra versión indicaba que como uno de los fallecidos –Rambito Navarro– es hijo de Julio César Navarro, conocido como "Cara de goma", antiguo referente de la barra brava de Central que fue asesinado el 25 de mayo de 2016 en el barrio 7 de Septiembre, el crimen podría estar relacionado con la interna de la barra brava del Club Atlético Rosario Central.
Con estas dos muertes que “inauguran” el mes de mayo, ya son 80 los crímenes cometidos en lo que va del año en el departamento Rosario, lo que equivale a un asesinato cada 36 horas.