El cantante lanzó este lunes su última producción, pensada como “una íntima conversación con Dios, narrada en 11 tracks”, pero como actual en su sonido y en su forma. También tiene previsto para el 12 de junio un streaming mundial junto a su familia, a emitirse desde República Dominicana. De todo esto habló con los medios latinoamericanos, y El Litoral fue parte de esta presentación.
Gentileza Prensa Montaner ¿Cómo era posible que yo le hiciera canciones de amor a los seres humanos y no hiciera un álbum lleno de amor para quien creó a todos los seres humanos? , explica Montaner.
Tras más de 40 años de trayectoria, Ricardo Montaner decidió dejar ver su lado más interno y espiritual en “Fe”, un álbum que considera “una íntima conversación con Dios, narrada en 11 tracks”, pero con los colores del presente, aportados por sus hijos Mau y Ricky y su yerno Camilo, que participaron de la composición; también por la participación de como: Darío Moscatelli, Richi López, Julio Reyes Copello, Yasmil Marrufo y Jon The Producer (Jon Leone). El primer adelanto de este disco fue “Amén” donde cantó al lado de su familia, que hoy cuenta con más de 154 millones de reproducciones en YouTube. Posteriormente salió “Dios así lo quiso”, con la colaboración del prestigiado artista Juan Luis Guerra y cuenta con más de 21 millones de reproducciones.
Desde Nueva York, la ciudad elegida para la presentación del nuevo material (en un alto de las grabaciones de “La Voz Argentina” en Buenos Aires), el artista nacido en Valentín Alsina y criado en Maracaibo atendió a la prensa latinoamericana (incluyendo a El Litoral) para hablar de esta apuesta espiritual, y también del primer concierto que dará al lado de su familia: “Los Montaner Live” se emitirá vía streaming para todo el mundo desde el Anfiteatro Altos de Chavón de República Dominicana, y unirá a Ricardo con Mau, Ricky, Evaluna y Camilo, cantando los éxitos de cada uno.
Amor elevado
Sobre las motivaciones que lo llevaron a este trabajo, Montaner contó: “Hemos vivido una mañana con muchas emociones personales: gente que amo mucho que ha estado cerca de mí en todo este proceso de producción del álbum, los comentarios de por fin haberlo escuchado ya ha salido del horno, a las 12 con un segundo de la noche. Le decía mi esposa que es un momento, un día muy especial hay como muchas emociones. En lo personal siento que este es un álbum que le debía no solamente a Dios sino también a tanta gente que durante los últimos 28 años me ha dicho: ‘¿Para cuándo un álbum con contenido espiritual?’. Siento que se lo debía a un sinfín de gente que no me lo reclamaba sino que lo estaba esperando; por un lado me lo debía mí también, porque a lo largo de toda mi carrera no había hecho el espacio que merecía a quién es el hacedor no solamente de mi carrera sino de mí mismo, y de todo lo que yo amo, y todo lo que todo lo que veo, observo, siento. ¿Cómo era posible que yo le hiciera canciones de amor a los seres humanos y no hiciera un álbum lleno de amor para quien creó a todos los seres humanos? De alguna manera estoy revirtiendo o entregando de regreso a Dios tantas cosas maravillosas que me ha dado”.
Y agregó: “Cinco minutos antes de salir aquí a la conferencia de prensa me han sorprendido mis hijos Camilo y Evaluna, que se vinieron para Nueva York a sorprenderme, a pasar conmigo este día de lanzamiento, entonces estoy que estoy a punto de que se me salgan las lágrimas; cinco minutos antes de empezar la rueda de prensa se me tiraron encima cuando me estaba poniendo los zapatos. Estoy muy feliz de compartir con los míos; con mi esposa, que no se quiso perder este rato aquí en Nueva York para lanzar el álbum y se vino conmigo el fin de semana. Vengo desde Buenos Aires, donde estoy haciendo ‘La Voz Argentina’, grabando prácticamente a diario, y me dado un salto hasta Nueva York; a esta ciudad donde se supone que pasan tantas cosas. Como era un álbum para Dios pues quería estar en el centro de tantas cosas que suceden y desde aquí lanzarlo”.
Nuevas formas
Entre las particularidades del trabajo, el venezolano-argentino destacó su costado visual, en el que participó su esposa Marlene: “Éste es un álbum que tiene 11 tracks, y por primera vez en toda mi carrera todos tienen visuales. Nunca lo había hecho y me da mucha alegría; no son videoclips propiamente dichos, pero se acercan mucho: hay paisajes extraordinarios. Con esto intento que la gente que está acostumbrada a escuchar música viendo video también esté complacida y pueda poner en sus playlists los videos de éste de este álbum. Van a encontrar cosas muy extrañas, en el sentido de que en alguna que otra canción ni siquiera aparezco en el video. Espero brindarle a la gente la posibilidad de este mientras pone el video pueda meditar, puedan orar, puedan sentirse muy en contacto con el creador”.
También destacó una participación particular de su hija: “Hay un track muy especial, una versión de ‘La gloria de Dios’ que la hice con la Filarmónica de Praga; es un arreglo hermosísimo y la invitada es Evaluna: ella es la única que canta. Es como una sorpresa, porque la gente se va a sorprender mucho al encontrar en un álbum de un cantante una canción en donde el cantante no canta. este Me pareció algo muy pintoresco, también es una canción que conoce todo el mundo; me pareció una cosa muy bonita hacer una versión en la que yo no apareciera y que Evaluna hiciera con su voz lo que considerara que le podía gustar a Dios”.
Y aportó: “Lo demás es que vayan descubriendo una por una mis canciones, desde lo más profundo de mi intimidad. Canciones que escribí al lado de Camilo, Mau, Ricky, mi amigo Yasmil Marrufo, Richi López, Jon (Leone), los hermanos (Jonathan y David) Julca, Luigi (Castillo): hay tanta gente ahí que no me quiero olvidar. Estoy muy feliz y muy contento de compartirlo con todos ustedes”.
Camino de fe
-¿Siempre fuiste un hombre de fe o tuviste algún hecho puntual en tu vida que te haya hecho creer con tanta firmeza?
-Desde muy chiquito me gustaba ir con mi guitarra a instituciones en donde había niños con capacidades especiales: sentía que Dios me hacía que fuera a esos lugares. Mis amigos preferían irse a jugar béisbol o fútbol, y yo me iba en las tardes con mi guitarra a un lugar allá en Maracaibo que se llamaba Azupane, que era la asociación de padres con niños que tenían síndrome de Down. Cada vez que iba para allá para allá jugaba con ellos y me rompían la guitarra, las cuerdas, pero era muy divertido; sentía que Dios me ponía a hacer como una labor ahí. Por otro lado había tenido la costumbre de muy chiquito de ir con mi mamá a la iglesia y había algo que me sensibilizaba cada vez que entraba; no presentía que iba a ser de alguna manera un hijo tan directo de Dios.
Fue como que una especie de evolución: poco a poco fue evolucionando dentro de mí el interés por averiguar un poco más, hasta que un día me di cuenta que no tenía nada que averiguar: que la fe algo así como cerrar los ojos y dejarte llevar, porque sabes que vas en confianza. Y tuve un momento muy especial viendo un niño enfermo en el Uruguay, una tarde que fui a cantar en el Estadio Centenario. Ese momento fue tal vez el que tocó mi corazón: a partir de ahí llegando a Venezuela me quise acercar más y le pedí a Marlene que me ayudara a ver cómo se hacía para poder entregarle el corazón a Jesús. Mi hijo Mau va a cumplir 28 años: hace 28 años que le entregué mi corazón a Jesús.
Nueva generación
-¿Cómo te sentís compartiendo tanto la fe como el trabajo con tus hijos?
-Es muy divertido, y me obligan a estar todo el tiempo en ejercicio, constantemente actualizado: si van a hablar de la última canción de Bad Bunny yo tengo que oírla primero para que no me vengan a enseñar a mí (risas). Me gusta mucho escuchar la música que ellos escuchan; soy un fan de todo lo que hace la nueva generación de artistas. Me he influenciado con sonidos de tal manera que lo van haber establecido en este álbum, igual que mi álbum anterior: el aire que tienen los arreglos tienen mucho que ver, y creo que el estar actualizado se lo debo en gran parte a ellos.
-Tienen mucha influencia tus hijos, todo ese grupo grande que has conformado.
-No solamente mis hijos, sino los amigos que mis hijos han traído a la casa: hoy lo los principales productores de los últimos álbumes que hice son todos los amiguitos de mis hijos. Me asocié con gente nueva, con una calidad humana maravillosa, pero que al mismo tiempo están actualizados de lo que está sucediendo hoy en día a nivel musical en todo el planeta.
Nosotros los artistas no podemos quedarnos quietos: creo que la única manera de que la gente en el tiempo continúe apoyándote o continúe estando cerca del artista es actualizándote y no quedarte atrás. Creo que ha dado un extraordinario resultado, que la gente lo ha asimilado. Porque también están los defensores de lo anterior, la gente que dice que no hay como los tiempos pasados; pero yo pienso que tanto en la vida como en la música lo mejor viene apenas, y hay que estar abierto. Siempre y cuando no le faltes el respeto a tu esencia principal, que son las canciones de amor.
Químicas
-¿Que sentimientos fluyeron en este disco?
-No solamente sentimientos. Nunca jamás me había pasado que yo escribiera una canción a capella; normalmente recurro a la guitarra o me junto con alguien y sacamos y escribimos una canción. Me ha ocurrido en varias oportunidades de este álbum que he escrito una canción directamente en conexión con Dios: en el momento de mi oración de la mañana, cuando estoy caminando por la orilla de la playa, o inclusive yendo hacia el estudio manejando, sin saber qué iba a grabar cuando llegara. Ir manejando y una melodía me venía a la cabeza y empecé a darle vuelta.
Grabé un mensaje de voz en un semáforo y le dije a mi arreglista que me estaba esperando en el estudio: “Ve desarrollando esto con el piano”; cuando llegué al estudio él ya tenía una vuelta hecha de lo que yo le había tarareado. De ahí salieron cosas así de espontáneas: hay una canción que cierra el álbum que se llama “Alabanza”, que recuerdo que la escribí parado en la orilla del mar orando una mañana: me puse a cantar eso a capella: y me empezó a fluir, y se convirtió en el track de cierre del álbum: así actúa Dios.
-¿Cómo surgió la colaboración con Juan Luis Guerra?
-“Dios así lo quiso” es una canción que empezó a nacer sola, en el sentido de que no la había imaginado con Juan Luis. Al principio la canción no tenía tanto Caribe en lo que a su arreglo se refiere: era más “baladosa” y no la había pensado para hacer un dúo. Cuando estábamos en el estudio y Yasmil le empezó a meter algunas cosas que la acercaban a la cumbia y a la bachata, el tema empezó a tener un aire diferente.
Cuando lo terminamos, que ya lo oímos mezclado, todos me empezaron a decir la tienes que hacer con Juan Luis, no puede ser que él no esté en esta canción, la gente te lo va a agradecer. Yo que soy un entregado al desparpajo agarré y le escribí a Juan Luis; le mandé la canción y le dije: ‘Mira, siento que este es el tema que nos puede juntar por primera vez, y me encantaría que vinieras a cantar conmigo para mi nuevo álbum que está dedicado a Cristo”: Juan Luis no me hizo esperar para nada, me respondió en el mismo momento: me dijo que por supuesto que sí y aquí está el resultado: creo que quedó hermosa la canción.
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-Van a presentarse en República Dominicana, en Altos de Chavón.
-Por primera vez nos presentamos “Los Montaner”, el 12 de junio. Lo que más me llama la atención y me gusta es que es la primera vez que nos reunimos en un escenario todos. Cada quien va a cantar sus canciones preferidas, las que a la gente le gustan; pero también vamos a tener momentos donde uno va a cantar con el otro: Camilo alguna canción mía y yo una suya o de Mau y Ricky, ellos una mía. Cantaré con Eva, ella con sus hermanos y su marido. Estoy seguro que la gente lo quiere ver.
Es un show de streaming, va a haber presencia limitada de público. Será global: lo puedes ver desde Israel, desde China, desde España. La venta de los accesos ha sido muy veloz y muy buena, así que espero tener a todo el mundo viéndonos cantar.