La misma broma de siempre: "Si te ofrecen a Messi libre, tiene que ser antes de las nueve de la noche, José". Esa frase es porque no cambió en nada su rutina: se acuesta temprano, apaga el celular a las 21 y lo prende 5.45/6 cuando arranca cada día.
Primero cambió el curso de la historia de Colón y luego del fútbol de Santa Fe con esta primera estrella en AFA. Los secretos de un "Gringo" porfiado que destruyó cualquier malaria.
La misma broma de siempre: "Si te ofrecen a Messi libre, tiene que ser antes de las nueve de la noche, José". Esa frase es porque no cambió en nada su rutina: se acuesta temprano, apaga el celular a las 21 y lo prende 5.45/6 cuando arranca cada día.
En lo personal, me impactó más la charla en enero en sus oficinas que la del predio con la Copa al lado de tercer testigo entre el presidente de Colón y El Litoral. Confieso algo: entre nota y nota (casi siempre pasan un par de años), no tengo contacto con Vignatti en el día a día. Cuando necesito algo o él necesita algo lo hacemos a través de un familiar. Lo que está claro es que, el paso del tiempo, acomodó todo: no se enojará tanto con las críticas ni se alegrará en extremo con los elogios. Su frase es: "el periodista más... de los que son...".
Con 30 años de idas, vueltas, notas, alegrías, enojos, etc. lo que más me sigue llamando la atención de José Néstor Vignatti es la tremenda calma que el "Gringo", "Flaco" o "Fideo" tiene en medio de la peor de las tormentas. El mundo puede caerse a pedazos, como pasó hace poco, sin embargo al tipo nada lo mueve. Nada lo asusta. Nada lo achica. Nada lo condiciona. Ahora me doy cuenta que me quedó pendiente una pregunta: ¿Le tenés miedo a algo José?
En principio, la respuesta será "a nada". Y, después, cuando piense agregará "a que no le pase nada a mis seres queridos, a mi familia".
Esa fortaleza de líder que tiene Vignatti es admirable, no ahora que es el primer presidente campeón del fútbol de Santa Fe, sino en los momentos de espinas.
"Yo había ido a la cancha, solo, a un partido con Olimpo y se venían los tiempos electorales. Yo le había prometido a mi familia alejarme de Colón y lo estaba cumpliendo. Perdemos con Olimpo ese día y en el estacionamiento me rodean tres o cuatro tipos. Me insultan con todos los colores y quedo al límite de la agresión física. Me decían de todo: viejo choro, devolvé la plata que te llevaste y esas cosas. En ese mismo momento, cuando ellos me amenazaron, decidí volver a Colón. Pienso que en la vida siempre hay que comprometerse. Primero, pensaba: "¡Si esta es la opción en Colón, qué mal que estamos!". Y después, decía para adentro: "Tantos años en el club para esto...". Así, textual, se generó su última vuelta. La vuelta triunfal y gloriosa de José Néstor Vignatti a Colón.
En un cuadrito improvisado, con el edicto de remate de El Litoral enmarcado, guarda el recorte del año 1992 cuando a Colón le remataban la cancha."Juntamos la plata y salvamos la quiebra, era antes de las elecciones. Nos juntamos en Tribunales, pusimos el dinero y recuerdo que Ítalo Giménez me dijo: "Vignatti si usted me gana, me devuelve la plata". Nos matamos de risa adelante del juez".
Lo otro que tiene guardado en la memoria es la cifra exacta en pesos con la cual levantó el Salvataje, hace algunos años. "En dólares, un poco más de 16 millones", recuerda.
Después de la Final Única de la Copa Sudamericana todo pareció derrumbarse: el equipo en descenso, la pandemia, las cartas-documento viralizadas con reclamos millonarios, la estampida de socios, la caída de sponsors y la sensación de vacío total.
Si Julio Humberto Grondona tenía como frase de vida "TODO PASA" en su histórico anillo de calle Viamonte, la de José Néstor Vignatti debiera ser "NO PASA NADA", porque así responde en la peor de las tempestades. ¡Y eso que en Colón pasó varias de las fuleras!.
En la hora larga de entrevista con el Vignatti campeón no hará nombres propios, salvo con dos asteriscos a modo de excepción: Deolindo Vignatti y José García. El primero, su cuñado, fue quien lo trajo de Videla a Santa Fe por primera vez para ir a la cancha a ver a Colón en los años '80 en un 2-2 con Estudiantes de La Plata. El segundo fue quien lo metió de lleno en la vida política del club, en los inicios de los '90. lo que dio nacimiento al recordado "Fondo Rojinegro".
Y al toque dirá: "Hubo mucha gente que le hizo mucho bien a Colón". Hay una señal que resume lo que es Vignatti: desde que Pitana marca el final en San Juan (viernes pasada las 21) hasta la nota exclusiva con El Litoral en predio (sábado a las 13), el presidente de Colón no tenía ninguna foto con la Copa. ¿Quién más que José merecía la foto con el trofeo de Colón Campeón?. Y ahí llegará el testimonio de quienes lo conocen: "José no le da bolilla a esas cosas". Mucho menos a las redes sociales, claro está. Toda una postal de cómo se lleva con el éxito. O lo que piensa de los días felices este Vignatti especialista en tormentas con ese "no pasa nada".
En la entrevista de enero, ya con 75 años cumplidos, se comparó con Biden por la edad. Y dijo que Colón era más grande que los Estados Unidos. En el inicio de la pandemia, popularizó la frase de "cuota hamburguesa", recordando que Colón era el único club del fútbol argentino que cobraba 500 pesos. Y ahora, con el trofeo en la mano y a pedido de El Litoral, les habló a los cientos de miles de hinchas y socios que tiene Colón: "Esta Copa no es mía, es de todos ustedes".
"Me da pena que la gente no pueda festejar como todos hubiéramos soñado el primer título de la historia de Colón", dispara. Y al toque, agrega: "Hay que cuidarse, quedarse, a mí el Covid me llevó una hermana, perdí a mi hermana por esta enfermedad... no es joda", reflexiona.
Besa la copa, la toca, posa varias veces a pedido del fotógrafo de El Litoral. Está feliz. Al otro día de ser campeón, el dirigente más determinante del fútbol de Santa Fe, el mismo que cambió el curso para siempre de la historia de Colón, volverá a su lugar de siempre. "Vuelve el pobre a su pobreza, vuelve el rico a su riqueza y el señor cura a sus misas...", en la noche de San Juan. Se apagará el celular de Vignatti a las nueve de la noche y sonará el despertador antes de las 6 de la mañana.
En pandemia, sin público en las tribunas, Colón dio la esperada vuelta olímpica en San Juan sin su gente. Pero quedó claro que el "Jugador Número 12" estaba en el Bicentenario. A la diferencia en la historia de Colón y del fútbol de Santa Fe la marcó un tal José Néstor Vignatti.