Facundo Garcés, el "soldado heroico" de la defensa...
El pibe que cumplió el sueño de miles
Dice que no se cansa de ver la repetición de la final y que "voy a aprenderme ese partido de memoria". Se trajo hasta las medias que usó contra Racing y todavía no cae. "Me parece una cosa increíble", confiesa la gran sorpresa de la campaña del campeón.
Pablo Aguirre Facundo Garcés con el redoblante, en pleno festejo. Se le dio todo a un jugador que hizo su carrera en las inferiores, que recién el año pasado firmó su primer contrato y que se encontró con esta gloria que lo marcará para toda su vida.
La vida está llena de sorpresas, cuando menos te lo esperás, pasan las cosas que menos te imaginás. Es así, lo mejor de la vida no se planea, simplemente sucede. Quizás, Facundo Garcés habrá soñado con vivir algo bueno en el fútbol. Pero resulta muy difícil entender y aceptar que por la cabeza de este pibe que el año pasado no se sabía si iba a jugar o no en la primera de Colón, haya pasado alguna vez esta película de un final increíblemente feliz que vivió el 4 de junio, pero que empezó a madurar desde que faltando cinco minutos para empezar el primer partido con Central Córdoba, en aquella lluviosa noche de Santiago del Estero, se apostó definitivamente como titular y terminó siendo una pieza clave de la defensa, haciendo olvidar a jugadores de la talla de Goltz y Bianchi. O hasta del propio Delgado, el tercer ausente en la final ante Racing.
Habiendo sido figura indiscutida ante Independiente en la semifinal, Facundo confesó a El Litoral dos cosas: la primera, que se le aflojaron las piernas cuando miró el cartel electrónico que marcaba 43 minutos del segundo tiempo y ya el paso a la final estaba asegurado; la segunda, que cuando llegó de regreso a Santa Fe, y después de compartir un rato de alegría con su familia, se puso a ver de vuelta el partido, a las 3 de la mañana, prolongando una noche que en ese momento resultaba inolvidable, aunque luego la haya superado la de cuatro días más tarde.
Facundo Garcés se toca, se pellizca, se da cuenta que no es un sueño, que es algo real, tangible. Ya no es más el chiquilín que arrancó en El Quillá, ni tampoco el que fue superando etapas en Colón hasta que las fuerzas y las expectativas parecían desvanecerse porque no tenía signos claros para pensar que alguna vez iba a tener esa oportunidad que tanto buscó, la de jugar en la primera de Colón. "Estuve peleando un montón de tiempo y en el fondo sabía que algo bueno me tenía que tocar, que no podía dejar pasar el tren, pero jamás pensé que iba a ser esto, que es increíble", cuenta Facundo Garcés, este defensor lleno de fuerza, sacrificio y amor propio, que parecía impasable ante delanteros de jerarquía y trayectoria en esos momentos en que las "papas queman".
-¿Qué te decía Domínguez desde el momento que te puso?, ¿cuáles fueron los consejos que rescatás?
-Eduardo siempre habla conmigo, él fue quien me hizo debutar, me subió en su primer mandato, me decía que esté siempre bien de ánimo, nunca mirando hacia abajo, siempre tratando de mostrar grandeza. Por eso, en la final nos animábamos mutuamente con Gonzalo Piovi ante Chancalay y Copetti para ganar en lo anímico. Yo le gritaba a él cuando hacía algo bueno y él a mi. Y si cometíamos un error, nos alentábamos gritándonos, para que ellos nos escuchen.
-¿Te acordás de aquella noche en Santiago del Estero, el día del primer partido?
-Faltaban cinco minutos para empezar el partido y se lesiona Bruno... Hice tres piques, un poco de elongación y algo de movimiento en el vestuario mientras me ponía la camiseta y Eduardo daba las últimas indicaciones, y a la cancha... No tuve tiempo ni siquiera de calentar.
Pablo Aguirre El momento culminante: Garcés con la medalla del campeón. Su alegría más grande a los 21 años.
El momento culminante: Garcés con la medalla del campeón. Su alegría más grande a los 21 años.Foto: Pablo Aguirre
-Recién hablaste de Domínguez. ¿Y Goltz?
-Mi maestro afuera es Eduardo y adentro es Paolo... Me hablaba toda la semana, me protegía adentro de la cancha. Y me alentaba siempre, aún cuando hacía algunas cosas que no estaban del todo bien.
-Después de Independiente, llegaste a Santa Fe y lo primero que hiciste fue ver de vuelta el partido. ¿Y la final?
-¡No puedo dejar de verla!... Es un partido que me quiero aprender de memoria...
-¿A qué le tenías temor antes del partido?
-Al stress mental, que es fuerte. Pero los más grandes se encargaron de que los jóvenes tengamos la menor presión posible y estar cómodos adentro de la cancha. A veces es inevitable sentir cosas fuertes, porque hay mucho en juego. En la conferencia de prensa previa a la final, estaba muy tranquilo y eso que tenía al lado a Cvitanich y estaba lleno de gente. Yo no estoy acostumbrado a eso... Ah... ¡Y aclaro que a la copa no la toqué! (risas)... Era muy nuevo para mí por toda la gente que había...
-¿Y tu amigo Chancalay?
-¡Me tiró un caño en esa jugada que hizo en el primer tiempo, que entró, y después me salvó Mura!... Lo noté nervioso a "Chanca", me imagino que habrán pasado muchas cosas por su cabeza.
-Lindo lío hiciste ante las cámaras de Espn cuando terminó el partido...
(Risas) -Estábamos con Sandoval y la copa, me vinieron a buscar y me dijeron que vaya e hiciera quilombo... ¡Y fui a hacer quilombo!... Estaba el Bichi Fuertes, que me dio un beso, me felicitó y me dijo que estaba feliz por lo que habíamos logrado...
-¿De quién te acordaste cuando terminó el partido?
-De mi familia, primero y principal, porque en los momentos duros estando en Colón estuvieron al pie del cañón y no me dejaron caer. Hubo veces que en mi cabeza pasaban cosas y ellos me sostuvieron. Mis amigos también, siempre al lado mío y apoyándome. En el momento del pitazo final se me vino todo lo que tuve que pelear, yendo solo al predio a entrenar, cambiándome en la parte de atrás del auto cuando iba del colegio a los entrenamientos y todo lo que me tocó vivir... Y en El Quillá, donde jugué con mis amigos, fue el patio de mi casa y allí está mi primer gran amor...
Pablo Aguirre Facundo Garcés, en el vestuario sabalero en diálogo con el autor de la nota, luego del partido, en la transmisión en vivo que se emitió por Cable y Diario, el canal de youtube de El Litoral y sus redes sociales.
Facundo Garcés, en el vestuario sabalero en diálogo con el autor de la nota, luego del partido, en la transmisión en vivo que se emitió por Cable y Diario, el canal de youtube de El Litoral y sus redes sociales.Foto: Pablo Aguirre
-¿Cuáles fueron los técnicos que te moldearon, que te hicieron crecer?
(Piensa y se toma un instante) -Martín Minella fue clave para que pueda subir a reserva, y Pablo Bonaveri fue el que me ayudó mucho cuando estaba en el plantel y tenía que bajar a la reserva. A ellos les estaré siempre agradecido.
-Hablame un poco de los delanteros...
¡Uff...! Con Copetti lo disfruté, porque a mí me gusta que resistan el choque y el golpe. Cvitanich se tiraba al piso y eso resulta más complicado. Entonces, con Copetti iba con todo porque lo chocaba y se la bancaba. En cambio, Cvitanich sentía el toquecito en la espalda y se tiraba... Y después, Borré, cuando jugamos en el Monumental, que por otra parte te cuento que fue una experiencia tremenda... Y los delanteros de Talleres también, porque son muy buenos... Y también recuerdo a Di Santo, en el segundo partido que jugué, contra San Lorenzo. Ese flaco es muy bueno, chocar con él es tremendo.
-Muchos de tus compañeros dijeron que se sintieron campeones luego de Talleres...
-Para mí, el partido que jugó Talleres fue tremendo y pudimos resistir... Coincido con ellos.
-¿Qué te guardaste de la final?
-¡Todo!... Me traje hasta las medias del partido... Me saqué toda la ropa y la metí adentro de la valija... La camiseta que usé ni siquiera la lavé...
-Varias veces dijiste que tu ídolo es el Flaco Conti...
-Vos sabés que es increíble y se me pone la piel de gallina sólo de pensar en la cantidad de jugadores que pasaron por Colón, que han sido cracks y a los que la gente idolatró... ¡Y yo pude lograr lo que esos jugadores no consiguieron!... Es algo que todavía no me entra en la cabeza.
15 partidos
Jugó Garcés en la Copa de la Liga Profesional. Solamente faltó en el encuentro ante Aldosivi en Santa Fe, pues fue expulsado en el cotejo anterior ante Banfield.