Según Iaraf, sólo se utiliza 7% del fondo presupuestado
Bajo uso de un beneficio para sectores vulnerables
Son escasos los reintegros hasta 15% sobre compras de alimentos por parte de jubilados y beneficiarios de AUH y AUE. Es porque los destinatarios usan el dinero en efectivo, sin destino verificable, o con otros destinos.
Por usar efectivo en lugar de medios electrónicos o dinero plástico, el “régimen de reintegros a sectores vulnerados”, entre en el período marzo-agosto de 2020, “indicaba que se había utilizado solamente alrededor de un 7% del presupuesto destinado al mismo”. Es el último dato oficial disponible.
El plan prevé un reintegro del 15% del monto total de todas las compras de alimentos realizadas en comercios (incluso kioscos) inscriptos en Afip, por parte de jubilados y pensionados que cobren el haber mínimo o beneficiarios de la AUH y de la asignación por embarazo.
Los pagos deben hacerse con la tarjeta de débito o mediante transferencias electrónicas (Código QR) asociados a la cuenta oficial de la jubilación o el beneficio social. Si el haber o el subsidio se utiliza con otro destino o medio de pago, el beneficio no se verifica.
Recuerda el informe que el gobierno nacional a través de la AFIP y el Ministerio de Economía, decidió extender hasta el 31/12/2021 el programa previsto en la Ley de Solidaridad Social y Reactivación Productiva sancionada en diciembre de 2019.
“Hasta el 30/06/21 el mecanismo contempló una suma de hasta $ 700 mensuales por beneficiario ($ 1.400 para aquellas personas que perciban 2 o más AUH y AUE). En lo que resta del año 2021, dichos montos se actualizarán a $ 1.200 y $ 2.400 en el caso de 2 o más asignaciones”.
Calcula que “en caso de ser aprovechado íntegramente, el monto máximo mensual disponible representará el 5,2% del haber jubilatorio mínimo vigente desde junio. En el caso de las AUH y AUE vigentes desde el mismo mes, equivale a un 26,6% de la asignación”.
Mejor que devolver el IVA
Luego de la discusión política que generó la restitución del IVA a productos básicos -el plan del gobierno de Mauricio Macri- Iaraf defiende el criterio del plan vigente, a pesar de sus propios datos de baja utilización.
“El régimen vigente -dice- constituye una alternativa más recomendable que la devolución de parte o todo el IVA (u otro impuesto). Se considera preferible la implementación de una versión segmentada del mecanismo de devolución, que mejora el esfuerzo fiscal en beneficio de los sectores que ameritan la ayuda.
El instituto que dirige Nadin Argañaraz plantea además el “incentivo para la bancarización o inclusión financiera de los sectores poblacionales que reciben el beneficio, en tanto fomentan el uso de mecanismos de pago alternativos al efectivo y, en consecuencia, se constituye en un instrumento que fomenta la formalización de las transacciones”.
Sin embargo, ante la evidencia del bajo uso del presupuesto asignado y del potencial del plan, señala que “sí resulta necesario un esfuerzo estatal para asegurar que el vendedor disponga de los medios que le permitan receptar los medios de pago promovidos (algo que es factible) y disminuir su reticencia a aceptarlos, para lo que contribuirá decisivamente el comportamiento del consumidor tendiente a asegurarse la apropiación del beneficio”.
$ 8,4 mil millones por mes
Según revela el Instituto Argentino de Análisis Fiscal en base a los últimos datos oficiales disponibles, el universo actual de beneficiarios está estimado en unos 7 millones de personas. “El programa tiene un costo potencial mensual máximo de alrededor de $ 8.400 millones en el segundo semestre del año”, señala el análisis.
Extensión
Iaraf sugiere que, en caso de que se alcance un grado de éxito del programa en el objetivo de aumentar la formalización de las transacciones, podría dar lugar a plantear su ampliación gradual, incluyendo por ejemplo a personal de casas particulares, beneficiarios del plan progresar, a los empleados en relación de dependencia, sujetos del régimen simplificado para pequeños contribuyentes y trabajadores autónomos.
“Si bien la incorporación de los sujetos mencionados implicaría una gran cantidad de beneficiarios del programa, se podría diseñar una segmentación conforme a su nivel de ingresos. Se considera apropiada la ampliación con limitación en base al monto de ingresos”.