Con una producción que proyectó diversas certezas, pero también incertidumbres, el Seleccionado Argentino venció a su par de Gales por 33 a 11, en el test-match que cerró la Ventana World Rugby de Julio, la que dejó un saldo de dos victorias y un empate.
Más allá que la victoria de Los Pumas resultó inobjetable, es imprescindible señalar las intermitencias reflejadas, básicamente por algunas marcadas imperfecciones en el juego, ante un adversario que -vale recordar- no contó con diez de sus titulares, afectados al Tour de los Lions por Sudáfrica.
En la etapa inicial, Argentina prevaleció claramente en materia de posesión y territorialidad, lo que lamentablemente no quedó convenientemente expresado en el 17 a 8 a favor del parcial. Básicamente, porque no lograron plasmar en puntos las situaciones factibles que dispusieron: varias veces, debido a imperfecciones propias y otras, por la capacidad defensiva galesa.
Durante esos cuarenta minutos, Argentina se dedicó a jugar solamente por el eje profundo: casi nunca salió del canal 1 ofensivo, lo que más allá que haya sido una decisión táctica impuesta, pareció conspirar con la nítida prevalencia en materia de disponibilidad que poseyó.
Tal como había ocurrido en el test precedente en Cardiff, los kicks tácticos fueron el punto más flojo en el andamiaje albiceleste, lo que obviamente propendió a entregar situaciones factibles para generar juego a un adversario muy capacitado en ese aspecto.
El segundo tiempo comenzó con una marcada recuperación de los Dragones Rojos, que en el tramo inicial evidenciaron un protagonismo que llevó a que las acciones se equilibraran. Frente a esto, Los Pumas enarbolaron su habitual capacidad defensiva, en un contexto donde los errores se multiplicaron de manera exponencial.
Más allá que las diferencias en el marcador se acotaron, los argentinos pudieron sostenerla y luego ampliarla, a partir de penales surgidos de acciones gestadas por las mismas vías que en la etapa anterior; mientras se repitieron una y otra vez los yerros conceptuales en los puntapiés tácticos.
Recién en los minutos finales, a través de una acción gestada por el pack de forwards, que fue indiscutiblemente el factor determinante de la supremacía argentina durante casi todo el desarrollo, llegó el try de Pablo Matera que permitió colocar cifras un tanto más acordes al contenido general del encuentro.
El párrafo final merece ser direccionado hacia la eximia tarea cumplida por el octavo Rodrigo Bruni, elegido merecidamente Man of the Match; como así también a la del rufinense Santiago Chocobares, quienes son merecedores de los principales elogios individuales del cotejo.
Está claro que la gira se cerró con resultados previsiblemente positivos y con una evolución en el juego, si se tiene en cuenta el arranque con aquel deslucido éxito ante Rumania, por 24 a 17 en Bucarest. De todos modos, pese a que son los primeros puntos de contactos del plantel, en busca de la imprescindible cohesión que se necesita, nadie debería durar que habrá que mejorar de manera notoria para asumir un compromiso de semejante envergadura como el Rugby Championship que se avecina.
Escenario: Principality Stadium de Cardiff.
Asistentes: Matthew Carley y Karl Dickson.
Gales: Gareth Thomas, Elliot Dee y Leon Brown; Ben Carter y Will Rowlands; Josh Turnbull, James Botham y Ross Moriarty; Tomos Williams y Jarrod Evans; Tom Rogers, Jonathan Davies ©, Nick Tompkins, Owen Lane y Hallam Amos.
Ingresaron: Sam Parry, Rhodri Jones, Dillon Lewis, Matthew Screech, Taine Basham, Kieran Hardy, Callum Sheedy y Uilisi Halaholo
Argentina: Nahuel Tetaz Chaparro, Julián Montoya (c) y Francisco Gómez Kodela; Marcos Kremer y Guido Petti; Pablo Matera, Facundo Isa y Rodrigo Bruni; Tomás Cubelli y Nicolás Sánchez; Matías Moroni, Jerónimo de la Fuente, Santiago Chocobares, Bautista Delguy y Santiago Carreras.
Ingresaron: Facundo Bosch, Facundo Gigena, Santiago Medrano, Tomás Lavanini, Matías Alemanno, Felipe Ezcurra, Domingo Miotti y Juan José Imhoff.
Primer tiempo: 7, try de Lane; 11, try de Moroni y goal de Sánchez; 25, penal de Sánchez; 28, try de Cubelli y goal de Sánchez; 31, penal de Evans.
Segundo tiempo: 11, penal de Evans; 16, 25 y 36, penales de Sánchez; 39, try de Matera y goal de Sánchez.