Digitalización bancaria
Digitalización bancaria
UN ARGENTINO
"Soy un argentino harto de soportar maltrato. Quiero saber cuándo los bancos van a volver a trabajar en forma normal. ¿Cuándo vamos a dejar de ser los usuarios maltratados, intentando que nos atiendan por teléfono? Es una vergüenza. El gremio de los bancarios tiene que estar trabajando en forma normal. Hay un montón de actividades que son mucho más riesgosas que los bancarios y están trabajando hace rato. Por ejemplo cajeros de supermercados. Es una vergüenza. Nos están llevando obligadamente a la digitalización de todas las operaciones bancarias y para mucha gente eso es un engorro. Hay quienes no tienen computadora, celular, tampoco la habilidad para utilizar esos mecanismos. ¡¡Por favor, qué es esto!! No hay quién le saque de una duda a alguien. Ni siquiera por teléfono. ¡¡A los funcionarios que están calentando sillones, hagan algo!! por el bien de la gente. Estamos todos cansados, ¡¡hartos!!".
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Cuarentena selectiva
UN LECTOR
"Ahora que se desató una persecución mediática, creo que justificada, a las personas que no hicieron la cuarentena al entrar al país y diseminaron la variante Delta, vuelvo a preguntar y espero que alguien, algún responsable conteste: ¿dónde hizo la cuarentena el equipo de fútbol de la selección argentina al volver de Brasil? En ningún lado. Entonces, que alguien se haga responsable de ese desatino. Messi volvió y tuvo contacto con medio Rosario y después se fue de vacaciones a Miami. Pregunto: ¿dónde está la cuarentena? El técnico estaba dando conferencias de prensa en los canales de TV, teniendo contacto con locutores, con toda la gente. Realmente, este país es una vergüenza y los giles estamos cansados. Así que espero que alguien nos aclare. Quizás hay una legislación especial para los futbolistas y tal vez no lo sabemos. ¡Pero alguien tiene que hacerse responsable y poner la cara!".
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Llegan cartas
Recuerdos de la ciudad
ROBERTO MARTÍNEZ
Quiero agradecerle al diario por permitirme compartir mis recuerdos. Asimismo mi reconocimiento a "Una asidua lectora", quien a su vez me agradece lo que yo conté, diciéndome que se le llenaron los ojos de lágrimas memorando aquellos tiempos. Sobre todo de la orquesta de la Típica Florida, y habla de un cantante con quien a sus 16 años tuvo un hermoso romance. Estoy casi seguro de que se trataba de Donaldo González. Un gran cantante. También lo recuerdo con Juan Carlos Copes, bailarín, en su ballet. Viajaron por todo el mundo y luego se radicó en un país de Centroamérica y nunca más supe de él.
Hoy quiero tocar el tema del boxeo de Santa Fe. En la Feria Rural, donde ahora hay un supermercado, todos los viernes había encuentros de boxeo. En ese entonces, tenía un gran amigo, nada menos que Ramón Pereyú. Un gran señor que se radicó en Isla Maciel y nunca más supe de él. También estaba Eugenio Fretes, que vivía en calle Primera Junta y se entrenaba en calle Mendoza al 4100, bajo la dirección de Cherrito; y también nombro a los boxeadores Eugenio Baez, Roberto Agrafogo, Hugo Biyerán, Roberto Cheta, El Chino Pita (rosarino), Juan Carlos Juncos; y el más extraordinario de Santa Fe, el Gringo Bonetti, lustrabotas en el Mercado Central, en Mendoza y San Jerónimo; después llegó a empleado municipal hasta que se jubiló. Luego fallece en su vivienda en Río de Janeiro 4500.
Los gimnasios de entrenamiento Pinasco, en bulevar y Saavedra; el Hugo Vinella, frente al parque Garay, en Presidente Perón y Suipacha.
Poco después de ser campeón del mundo Pascual Pérez, ganando en el estadio Kuaraten de Tokio peleó en Santa Fe contra Urrieta Sosa. Ganó en el tercer round. Solamente era para presentarse. Yo tenía 15 años y estuve abrazado con el campeón. Muy buena persona.
Al que le decíamos el inglés, Américo Bonetti, el extraordinario boxeador de Santa Fe, lo único que sabía hacer era tirar golpes, pero había que aguantarlo. También conocí en Buenos Aires, desde mis 15 años en adelante, a la Pantera Saldaño (tucumano), en sus grandes peleas con Adelca Chazú. También a Elvecio Gil, a Luis Federico Thompson, a los grandes de aquel momento.
Estuve abrazado con José María Gatica, quien me contó que no le gustaba que le dijeran "el Mono". Poco después muere en un accidente vial. Muy buena persona y extraordinario boxeador. También recuerdo a ese gran mendocino, fue el tercer campeón mundial que tuvimos, Hugo Corro.
Muchas gracias por este espacio, por poder compartir estos recuerdos.