Terroristas estarían
planeando otros atentados
| |
El FBI investiga una nota con instrucciones operativas que correspondería a uno de los secuestradores. Según el ministro británico Peter Hain, Ben Laden prepara nuevos ataques "de fuerte impacto en el mundo". Cuatro de los suicidas se habrían entrenado en Londres.
Washington. - Las autoridades estadounidenses analizan un documento que creen fue escrito por uno de los secuestradores que estrellaron los aviones contra lugares simbólicos de Washington y Nueva York el 11 de setiembre, para tratar de saber si se preparaban nuevos atentados. Mientras tanto, el ministro británico para Europa, Peter Hain, dijo que el fundamentalista islámico Osama Ben Laden está preparando un nuevo atentado. "Entiendo que prepara ataques terroristas de alto impacto para las próximas semanas", dijo en una entrevista a la BBS.
El documento que habrían escrito en árabe los secuestradores de los aviones, mezcla exhortaciones espirituales con una lista operativa para los secuestros suicidas, según el Post, que transcribe la traducción de algunos puntos de la nota. "Todos odian la muerte, temen la muerte. Pero sólo aquéllos, los creyentes que saben que hay vida después de la muerte y la recompensa de la vida después de la muerte, serán los que buscarán la muerte", afirma el documento.
Agentes del FBI encontraron el documento en el equipaje perteneciente a un hombre identificado como Mohamed Atta, sospechoso de ser uno de los principales organizadores de los secuestros.
El escrito recomienda "recordar la batalla del profeta contra los infieles, cuando construía el Estado islámico" y más adelante pide: "Controle todas sus pertenencias, su bolso, sus ropas, cuchillos, sus documentos, su pasaporte, todos sus papeles; asegúrese de que nadie lo siga".
Bajo el título "La última noche", el manuscrito de cinco páginas recuerda a los lectores que "en esta noche enfrentarán muchos desafíos. Debéis encararlos y comprenderlo totalmente... Obedeced a Dios, a su mensajero, y no luchéis entre vosotros, porque esto os debilita, permaneced firmes. Dios está con quienes se mantienen firmes", añade el texto.
El manuscrito contiene breves instrucciones con tono de oraciones, como la que sigue al subtítulo "Al entrar al avión": "Oh Dios, abre todas las puertas para mí. Oh Dios, que responde a las plegarias y las preguntas de quienes te preguntan, te pido tu ayuda. Te pido tu misericordia. Te pido que ilumines mi camino. Te pido que levantes el peso que me agobia".
Según los investigadores Atta, de 33 años, pasó la noche del 10 al 11 de septiembre con Abdulaziz Alomari en un hotel de Portland. El 11 de setiembre viajaron en avión de Portland al aeropuerto Logan, de Boston, donde hicieron conexión con el vuelo 11 de American Airlines.
Por razones desconocidas el equipaje de Atta no fue cargado en el vuelo 11. El FBI encontró una copia de un documento casi idéntico entre los restos del vuelo 93 de United Airlines que se estrelló en una zona rural de Pensilvania.
En tanto, en Manila, la prensa local afirmó que Mohamed Atta podría haber tomado lecciones de pilotaje en Filipinas en 1999. Dos empleados de un complejo en el aeródromo Clark, al norte de Manila, dijeron que reconocieron a Atta como la persona que permaneció en el complejo y tomó lecciones para volar aviones ultralivianos en 1999, señala el diario the Manila Standard.
La policía federal hizo públicas fotos de 19 hombres sospechosos de haber dirigido los ataques suicida contra el World Trade Center y el Pentágono. Las autoridades esperan que su publicación ayude a hacer avanzar la investigación.
El FBI sigue más de 200.000 pistas en lo que se ha convertido en la mayor investigación en la historia de Estados Unidos, buscando saber primordialmente si se planeaban más ataques.
El ministro de Gran Bretaña para Asuntos Europeos, Peter Hain, aseguró que "existen pruebas de que (Osama Ben Laden) prepara estos atentados de fuerte impacto en el mundo y tenemos que actuar de tal manera que no pueda atacar de nuevo", agregó, sin precisar cual podrían ser los objetivos del atentado. "Tenemos que ubicarlo, tenemos que detenerlo", pidió el secretario de Estado.
Las autoridades estadounidenses investigan principalmente un posible complot para usar productos químicos peligrosos en ataques terroristas y han arrestado a 18 personas acusadas de obtener en forma fraudulenta permisos para transportar materiales peligrosos.
El FBI realiza un operativo a nivel nacional para controlar dos millones y medio de choferes que tienen permiso para transportar materiales peligrosos, mientras que la policía controla a los conductores de camiones para verificar sus documentos.
Por otra parte, en Londres se conoció que un piloto argelino arrestado la semana pasada en Gran Bretaña fue instructor de vuelo de cuatro de los secuestradores, de acuerdo a lo consignado por la fiscalía británica.
Lotfi Raissi, de 27 años, compareció el viernes a una audiencia de extradición en un tribunal de Londres y negó cualquier participación en los atentados, pero permanece detenido.
El hombre fue arrestado el viernes en Berkshire, al oeste de Londres, bajo las leyes antiterroristas de Gran Bretaña y quedó bajo arresto por una petición de Estados Unidos.
Un segundo hombre, de unos 40 años, permanece detenido pero aún no se le han formulado cargos. Otras dos personas fueron liberadas sin acusaciones.
Diarios británicos indicaron que los arrestos se produjeron después de que las autoridades recibieron información del FBI, que identificó a los sospechosos tras examinar las listas de llamadas telefónicas de los secuestradores.
Mientras tanto, la cadena de televisión ABC difundió hoy una entrevista con un desertor de Al-Qaeda (La Base) en la que reveló que uno de los 19 hombres que perpetraron los atentados del pasado 11 de setiembre era miembro de esta organización, dirigida por Ben Laden.
El desertor, a quien sólo se le identificó con el nombre de "Max", indicó que recibió entrenamiento durante seis meses en Afganistán para convertirse en espía para Ben Laden. Cuando se le mostraron las fotografías de los 19 piratas aéreos, dijo que conocía a uno de ellos, un hombre a quienes las autoridades federales han identificado como Mayed Moqed. Sí, estuvo en mi clase. Reconozco su cara. Es de Arabia Saudí y tiene entre 25 y 30 años", dijo.
Según el FBI, Moqed fue uno de los 5 secuestradores del vuelo 77 de la aerolínea American Airlines que fue estrellado contra el Pentágono. (AFP-EFE-Ansa).
Washington. - El Pentágono otorgó a los generales estadounidenses el derecho a derribar de emergencia aviones civiles secuestrados por aeropiratas, pero garantizó que se adoptaron todas las precauciones para evitar errores fatales.
Las reglas fueron modificadas tras los atentados del 11 de setiembre, señaló a la prensa Donald Rumsfeld, secretario de Defensa estadounidense. De ahora en más, el derecho a derribar aviones civiles no es más privativo del presidente.
El mandatario estadounidense, George W. Bush, delegó su autoridad para los casos de extrema emergencia y por si no se lo puede consultar a tiempo, explicó Rumsfeld. Históricamente, las reglas en esta materia apuntaban antes que nada a proteger a los militares y a las instalaciones que ellos protegen, añadió.
"Hay momentos en los que la situación es suficientemente urgente para que la autoridad sea provisoriamente delegada por debajo del comandante en jefe regional militar", subrayó Rumsfeld.
Luego de los atentados del 11 de setiembre en los que no se pudo intervenir a tiempo para impedir que los aeropiratas utilizaran los aviones secuestrados como misiles, aviones caza patrullaron la costa este estadounidense entre Nueva York y Washington. El Pentágono señaló que también se puso en alerta a aviones de 26 bases de todo el país, que estuvieron listos para despegar en 15 minutos.
Sin embargo, los aviones comerciales no corren el riesgo de una destrucción intempestiva, aseguró el general. "No tengan la impresión de que nuestros pilotos tenderán a mantener el dedo en el disparador".
Rumsfeld explicó que, antes que nada, se verifican todos los procedimientos posibles "para disuadir un avión de ingresar a una zona prohibida": comunicaciones por radio con el piloto, señales manuales o vuelos del caza delante del aparato sospechoso.
Por otro lado, el aeropuerto nacional Ronald Reagan de Washington -el único que se mantiene cerrado más de dos semanas después de los atentados-, será "definitivamente abierto" la próxima semana, anunció hoy el secretario de Transporte, Norman Mineta.
"Espero que el martes o miércoles tomaremos la decisión", dijo el funcionario, quien admitió que "el servicio secreto está muy preocupado sobre los rutas de vuelo al aeropuerto", incluyendo su proximidad con la Casa Blanca.
La estación aérea, que la cual pasan unos 16 millones de pasajeros cada año, se ha mantenido sin operar debido a las medidas de seguridad tomadas desde el 11 de setiembre. De los 420 aeropuertos más grandes cerrados tras los ataques, el Ronald Reagan es el único que se mantiene sin actividad, dejando sin trabajo a unas 10.000 personas. (EFE-Reuters).