Condenados a abandonar el
Desde la llegada de la marca del León a fines de 1999 y de las espigas en V en 2002, los constructores franceses se devoraron los títulos mundiales. Cinco sobre cinco disputados por las marcas (tres para Peugeot y dos para Citroen y tres en la categoría pilotos (dos para Marcus Gronholm y uno para Sébastien Loeb).
Al largar en el presente
Al contrario del año pasado, los adversarios del León no podrán esperar una falta de confiabilidad de este nuevo 307 CC, que sucede al glorioso 206. Más robusto, el 307 se verá beneficiado con algunas modificaciones debidas a un cambio de reglamentación que concierne a los autos de más de 4,20 metros.
Los patrones de los dos ""bandos", Corrado Provera (Peugeot) y Guy Fréquelin (Citro�n) muestran la misma determinación. Cada uno quiere ver a su escudería en el escalón más alto del podio en el último enfrentamiento.
Con Sébastien Loeb y Fran�ois Duval, quien reemplaza al español Carlos Sainz (se retiró), para Citroen, y Marcus Gronholm y Markko Martin por parte de Peugeot, los dos constructores franceses poseen equipos sólidos y brillantes, seguramente los más homogéneos de los equipos inscriptos.
Este duelo incluye el de dos fabricantes de neumáticos, Michelin con Citroen, y Pirelli, nuevo asociado de Peugeot.
Sin embargo, el enfrentamiento de las dos marcas de PSA no tiene que hacer olvidar a los otros competidores. Subaru (Petter Solberg y Stéphane Sarrazin), Ford (Toni Gardemeister y Roman Kresta), Mitsubishi (Gilles Panizzi y Harri Rovanpera) y Skoda (Armin Schwarz y Alexandre Bengué) no parecen disponer de las mismas bases, pero Peugeot y Citroen no se confían.
""Subaru es algo sólido. Mitsubishi y Skoda tienen con qué poner algo de suerte de su lado. En cuanto a Ford, tiene experiencia y un excelente auto", advierte Fréquelin.
Mucho más incierta es la batalla entre los pilotos. Si bien el título se disputó entre dos hombres en las dos temporadas pasadas, Solberg y Loeb, el regreso de la 307 debería permitirle a Gronholm mezclarse en la batalla y a Markko Martin apuntarse también.
""No hay que olvidarse de Fran�ois Duval", dijo el actual campeón Loeb. El francés sabe que la fiabilidad de la Xsara debería ayudar a su amigo belga a integrarse a la habitual ""banda de los cuatro".
Loeb reconoce que tanto Citroen como Peugeot privilegiará el título de constructores. Que su interés debe pasar a un segundo plano como ocurrió en Gran Bretaña, en el final de 2003. Todo lo contrario ocurre con Subaru y Solberg, su principal rival.
""Nuestro objetivo esta temporada será permitir que Petter (Solberg) sea campeón", afirma David Lapworth, director de Subaru. ""Si tenemos un acercamiento conservador en las dos primeras pruebas (Montecarlo y Suecia), donde las gomas y la estrategia desempeñan un papel primordial, apuntaremos a la victoria a partir de México, donde el Subaru Impreza WRC 2005 hará su aparición".
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