Luego del exitoso debut y tras haberse presentado en diversos escenarios del interior del país, regresa a Santa Fe el musical que escribe, dirige y en el que actúa Darío "Chino" Volpato, en el cual participan ocho cantantes y bailarines santafesinos.
Se trata de un musical con hondo compromiso social, imagen interactiva, sincro, bailarines, cantantes, efectos especiales y la dosis justa de humor.
Como sostuvo antes del estreno el mismo Volpato, "Emperador" es un resumen de los resultados de las políticas sociales que, a lo largo de la historia del mundo, fueron marcando los destinos de la gente y la lucha solitaria de "gladiadores" que representan los deseos de libertad, igualdad y justicia.
La conquista de América, el racismo, el monetarismo, la pobreza , el hambre y la cruda realidad de este siglo son algunos de los temas que se reflejan en el montaje musical.
"Chino" Volpato se multiplica dando vida a distintos personajes, desarrolla diálogos riquísimos en contenido y técnica, y canta canciones de su autoría y del santafesino Juan Baena, su director musical, co-compositor y arreglador, que ilustran los distintos momentos que se viven en escena, acompañado por las muy bien logradas coreografías de Juliana Ulla, otra santafesina.
El elenco está integrado por los cantantes y bailarines Griselda Ferrero, Gustavo Lauto, Gustavo Sierra, María José Gargatagli, Matías Miranda, Leo Rivero, Lucía Gimenez y Natalia Echavarría.
La cita es este sábado 16, a las 21, en el Centro Cultural Provincial, y las entradas anticipadas ya están en venta en el local de Credifé, 25 de Mayo 2610 en el horario de 9 a 12.30 y de 15 a 20, hasta el sábado por la mañana, mientras que la boletería se trasladará al teatro a partir de las 15.30.
La proyección de una película en una pantalla gigante y el sonido cuadrafónico son los principales condimentos de un espectáculo pensado desde la ciudad para el país. La apuesta del "Chino" en su carácter de autor, director y protagonista es fuerte; también es su mayor desafío. "Quería hacer un show diferente, un musical distinto, y dejar ver esas facetas que en Midachi nunca se vieron", dijo Volpato en los días previos al estreno de su obra.
Tras su estreno en Santa Fe y bajo el título "Cuando el destino es la libertad", El Litoral sostuvo que "el espectador se encuentra con una obra de tesis que aborda la condición humana, los excesos del poder, la obsesión por la libertad absoluta, la provocación de la tiranía, la mentira, la felicidad y hasta la concepción del mundo. Un texto en apariencia complejo, centrado en la figura de ese triste emperador enfermizo, desaforado y sanguinario, como todos los que mal usan el poder.
"Dividido en varias secuencias bien diferenciadas, éste es un espectáculo del exceso y el abuso y, más allá de las referencias concretas a diversas épocas históricas y sus representantes más abominables -Hitler, Mussolini o Videla, por citar sólo a algunos de los varios que aparecen-, es un texto que mantiene un claro discurso, sin ambigüedades".