Falsa Alarma
Amenaza de bomba
Foto: Néstor gallegos. 

Esta mañana, un avión de Aerolíneas Argentinas que salió desde Buenos Aires con destino a Salta debió realizar un imprevisto aterrizaje en el Aeropuerto de Sauce Viejo y evacuar a los 127 pasajeros que venían en su interior, después de recibir una amenaza de bomba. La policía de seguridad aeroportuaria realizó una minuciosa revisación de la nave y no encontró ningún tipo de explosivo. Por último, los pasajeros coincidieron en que el episodio está relacionado con los conflictos internos que tiene la empresa.

De la Redacción de El Litoral

A las 7 de la mañana, desde Aeroparque, partió con retraso un avión de la empresa Aerolíneas Argentinas con destino a la provincia de Salta. Pero para el asombro de muchos pasajeros, aquel viaje, que prometía no ser demasiado largo, se vería interrumpido en nuestra ciudad por una amenaza de bomba y los obligaría a aterrizar en el aeropuerto de Sauce Viejo.

"El avión despegó bien. En Aeroparque nos avisaron que había un paro pero el vuelo salió igual, creímos que habíamos tenido suerte pero a la altura de Santa Fe observamos que empezó a pegar la vuelta y aterrizó. Una vez que estuvimos en tierra firme nos avisaron que se trataba de una amenaza de bomba", manifestó Matías, uno de los 127 pasajeros que viajaban en el avión.

"Cuando salimos desde Buenos Aires tuvimos una demora de 20 minutos porque había un paro del personal de mantenimiento de la empresa. Salimos igual y, cuando aterrizamos acá y nos avisaron de la amenaza, nos hicieron bajar a todos. Mientras tanto, nosotros fuimos los más perjudicados y estamos esperando que nos den una respuesta", expuso Marcela agregando que "esto en realidad tuvo que ver con los problemas internos que existen en la empresa".

Según informó Daniel Baca, jefe mayor del aeropuerto de Sauce Viejo, una vez que se produjo el aterrizaje, policías de seguridad aeroportuaria comenzaron los procedimientos acordes al plan de contingencia que deben realizar cuando ocurre un hecho de estas características.

"En la zona de Paraná la aeronave se declaró con una amenaza de bomba y decide aterrizar en el aeropuerto de Sauce Viejo. Tal es así que cuando tuvimos conocimiento del caso, activamos el plan de emergencia y empezamos a hacer las verificaciones que correspondían", manifestó Baca.

"De los peritajes realizados, se determinó que no había ningún explosivo así que, una vez que terminen los procedimientos de rutina, la aeronave quedará a cargo de la empresa y retomará el vuelo. En definitiva, como no detectamos ningún artefacto explosivo, descartamos la posibilidad de una bomba", agregó.

Los más perjudicados

Ante el hecho, muchas de las personas que viajaban a Salta, y por considerar que el día ya estaba perdido, tenían en mente regresar a su ciudad ya que el "conflicto iba a continuar y se les iba a complicar el regreso". De cualquier manera, la decisión estaría en manos de la empresa, desde la cual hasta ese momento no les habían dado ninguna respuesta.

"Tengo que regresar sí o sí hoy a Buenos Aires. Si no volvemos a capital, me tomo un colectivo", manifestó Sergio.

"El día ya está perdido así que... una vez que llegue a Salta me vuelvo porque tengo un vuelo a las 14", expresó Roberto.

Por último, todos los pasajeros del avión coinciden en que resultaron ser los más perjudicados del hecho debido a que se trató de una falsa alarma de bomba producto a las internas que se viven dentro de la empresa.

"Todos bajamos de forma normal, no hubo corridas ni nada por el estilo. Eso te da la pauta de que todos nos imaginamos que el hecho pasaba por el paro que nos anunciaron en Aeroparque y por las cuestiones internas que hay en Aerolíneas. Lo de la bomba, en realidad era todo mentira", finalizó una pasajera.

"Sospechoso"

El jefe de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), Marcelo Saín, relacionó la amenaza de bomba que obligó al piloto de un avión a aterrizar de emergencia en Santa Fe con la huelga que mantienen empleados aeronáuticos.

"Lo sospechoso es que cada vez que hay un pico de conflicto sindical parece que Ben Laden está dando vueltas en la Argentina y esto es una soberana irresponsabilidad", dijo Saín, el funcionario designado por el gobierno cuando se creó la PSA.

Saín se abstuvo de "hacer imputaciones personales" pero no dudó en vincular la nueva amenaza de bomba con la huelga.

El funcionario adelantó que ni bien "pueda constatar un vínculo (entre amenazas y conflicto sindical) me voy a presentar como denunciante penal".

"Soy funcionario y no soy tonto", respondió para sostener su punto de vista de lo ocurrido.

Rememoró que en el último paro del 7 y 8 de este mes, durante un conflicto similar "hubo 21 amenazas de bombas".

Saín sostuvo que quienes hicieron las llamadas durante el conflicto anterior "utilizaban una jerga técnica propia de la actividad aeroportuaria".

Eso, dijo Saín, "nos hace pensar que la protesta sindical tiene un uso abusivo e irresponsable y después se golpean el pecho como defensores de la actividad aeroportuaria y aeronáutica".

Si bien oficialmente se informó de una sola una amenaza, un pasajero dijo al canal TN que en un avión que se dirigía a Mendoza hicieron bajar de la nave al pasaje aduciendo que había habido otra advertencia sobre existencia de un artefacto explosivo.

Según el pasajero, dijo que en la tripulación "todos rían como si estuvieran convencidos de que no había ningún riesgo y que estaba armado para frenar los vuelos".