A Al Scarface Capone le llegó su juicio final no después de muerto, sino en vida y en una corte federal de Chicago, que hoy hace tres cuartos de siglo lo condenó a una pena de cárcel de once años, que lo sacó de circulación.
Víctor Martin (EFE)
La sentencia de la Justicia Federal norteamericana marcó la pérdida del poder y el declive físico y mental de un gangster que había caracterizado a toda una época.
Sin embargo, su prestigio de villano y su "gancho" popular no desaparecieron con su muerte, el 25 de enero de 1947; recobrarían fuerza en décadas posteriores hasta convertirlo en poderoso reclamo para el cine, la TV, la música e incluso los videojuegos.>
"Fue un emperador. Levantó una poderosa empresa criminal como nunca se ha vuelto a ver después", declaró a EFE Marilyn Bardsley, fundadora y directora ejecutiva de Crime Library, una división del canal CourtTV, especializado en temas judiciales y delitos.>
Para esta estudiosa del hampa y sus famosos, Capone le debe una buena parte de su póstuma popularidad al éxito de Eliott Ness y sus Intocables en la televisión y en el cine, y a los numerosos filmes que se han ocupado del Chicago de comienzos del siglo XX, coincidiendo con la implantación de la "ley seca" en todo EE.UU.>
Desde su tumba en el cementerio de Monte Carmelo en Hillside, al oeste de Chicago, seguro que Capone celebra aún con una sonrisa tanta fama y reconocimiento, como la que disfrutó en sus mejores años, a la que los federales creyeron haber puesto fin con un sonado juicio y encarcelamiento posterior.>
Delitos menores
La suerte de Capone -Snorky, para los amigos- comenzó a cambiar en junio de 1931, cuando las evidencias acopiadas por el gobierno durante tres años de investigación permitieron acusarlo de 22 delitos por evadir más de 200.000 dólares en impuestos durante cinco años y de otras numerosas violaciones de la ley que prohibía la fabricación, distribución y venta de alcohol.
Capone negoció y pactó con el fiscal George Johnson, que se declararía culpable, y con ello esperaba recibir una sentencia mucho menor que los 34 años de cárcel que le podían caer.>
Sin embargo, ambas partes no contaron con la integridad del juez James Wilkerson, quien les dejó claro cuando se disponía a dictar sentencia que, si bien escucharía las recomendaciones del fiscal, no se sentía atado por ningún acuerdo y que era imposible para Capone regatear con un tribunal federal.>
Esa firme actitud hizo que el gangster retirase de inmediato su declaración de culpabilidad y que el juez convocase juicio para el 6 de octubre de ese mismo año.>
En la noche del 17 de octubre de 1931 y después de nueve horas de deliberaciones, el jurado comunicó al juez su veredicto y declaró culpable a Alphonse Gabriel Capone de cinco delitos relacionados con el no pago de impuestos sobre más de un millón de dólares, que se estimó había ganado entre 1924 y 1929.>
Un escalofrío debió recorrer los más de cien kilos de humanidad de Capone cuando escuchó, una semana después, que el juez Wilkerson lo sentenciaba a once años de cárcel y a pagar 80.000 dólares en multas y costes judiciales.>
El éxito del proceso se debió en gran medida a la astucia del magistrado quien, enterado de los sobornos y presiones a los miembros del jurado que realizaba "Scarface" y su banda, decidió en el último momento intercambiar todo el jurado con el elegido para otro juicio, lo que evitó un veredicto amañado.>
Su encarcelamiento, primero en una prisión federal de Atlanta (Georgia) y después en Alcatraz, aceleró su pérdida de poder en el ámbito del crimen organizado y el deterioro de su salud, como consecuencia también de una sífilis contraída de joven.>
Quien fuera declarado "enemigo público número 1" por las autoridades de Chicago tras la Matanza del Día de San Valentin, en 1929, no cumpliría, no obstante, en su integridad la condena -por buen comportamiento-, y moriría en la cama en su residencia de Palm Island (Florida) con 48 años de edad.>
"Nadie, incluido John Gotti (Mister Teflon), ha sido capaz de acercarse a la fama de Capone", según Bardsley, quien resaltó que el jefe mafioso de quien mañana se cumple setenta y cinco años de su retirada de la circulación fue malvado, brutal y representa una era, un tanto idealizada, como la de la prohibición y del poder de las bandas organizadas.>
