EFE
El líder de un partido español de ultraderecha, un abogado que asesora a los empresarios del mundo de la prostitución en España, propuso abrir un macroburdel en Buenos Aires, en el que se seleccionaría a prostitutas de lujo que viajarían periódicamente para trabajar en prostíbulos españoles.
Así se asegura en el libro "Los amos de la prostitución en España", escrito por Joan Cantarero, que durante cuatro años fue responsable de prensa de la Asociación Nacional de Empresarios de Locales de Alterne (Anela) de España.>
El libro (Ediciones B) revela un informe, elaborado por un abogado que asesora a Anela, en el que se proponía invertir dos millones de euros (2,6 millones de dólares) en la construcción de un gran burdel en la capital argentina donde seleccionar a las "señoritas" más adecuadas para que viajaran cada tres meses a España.>
Esta propuesta, que Anela descartó, preveía que las mujeres ejercerían durante nueve meses en Argentina y otros tres en España, de manera rotatoria, de modo que nunca caducase el visado y las deudas pendientes se recuperasen nuevamente en el país de origen.>
Son numerosas
La iniciativa, elaborada por un abogado de la asesoría jurídica de Anela y dirigente de un partido ultraderechista español, destacaba que "las señoritas argentinas que se dedican a esta actividad son numerosísimas, con lo que un club de elite, tipo plaza, podría seleccionar fácilmente a las más indicadas".
"Estas señoritas, con el dinero que ganen en el club, pueden viajar con facilidad a España como turistas (3 meses cada 6) sin necesidad de visado y alojarse en hoteles de España", según el informe.>
El libro asegura que diez empresarios acordaron constituir una sociedad para crear este burdel en Argentina, aunque, según Cantarero, la patronal Anela descartó finalmente participar en esta operación por razones que no se especifican.>
El libro de Cantarero ofrece otros datos significativos, como que cada prostituta gana en España una media de 123 euros (160 dólares) al día, de los que, inicialmente, unos 89 euros (115 dólares) son para los empresarios de alterne, algunos de ellos vinculados con sectores de la ultraderecha, que las traen y mantienen.>
Cantarero ofrece detalles sobre cómo funciona esta patronal de la prostitución, que agrupa a un centenar de los 2.900 burdeles que funcionan en España, y sobre sus conexiones y actividades conjuntas con sectores de la ultraderecha española.>
En una entrevista con EFE, el autor explica que en España trabajan actualmente unas 400.000 mujeres en el negocio de la prostitución, un sector que mueve unos 18.000 millones de euros (23.400 millones de dólares) anuales, la mayoría en dinero negro.>
El libro desgrana con detalle los beneficios económicos que reporta la prostitución a los empresarios de los llamados locales de alterne.>
"La mayoría de los amos de burdeles de este país siguen recurriendo a la importación masiva de prostitutas desde varios países sudamericanos para llenar sus locales; han seguido aplicándoles deudas indecentes, y también siguen moviendo mucho dinero que se emplea en financiar grupos racistas y violentos que se mueven por este mundo con absoluta impunidad", denuncia Cantarero.>
El autor asegura que cada mujer traída a un local de alterne en España debe pagar al empresario una media de 8.400 euros (10.920 dólares) por su estancia de tres meses, el máximo permitido con visado de turista.>
Por eso, cada operación policial, "cada expulsión supone una sangría para el dueño del local, la clientela se espanta, las mujeres dejan de pagar, se genera miedo entre las compañeras, baja el ritmo de trabajo y la situación se vuelve insostenible para el empresario y su banda", explica el periodista.>
Cantarero también asegura que la patronal Anela, pese a reclamar una regularización de esta actividad, "nunca ha mostrado interés y en seis años no ha presentado ninguna propuesta de legislación".>
"Si se regulara la prostitución, la mayoría de locales desaparecerían porque viven gracias al dinero negro y si tuvieran que pagar impuestos tendría el mismo efecto que la ley seca. Se acabarían las mafias", sentencia Cantarero.>
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