UNA ANTOLOGÍA DESDE EL SIGLO XIX HASTA HOY
Artistas que definen la plástica local
Sergio Sergi. "En esas xilografías de una técnica prodigiosa, el artista despelgó un elenco de situaciones en las que es posible intuir su obsesión con la vida burguesa, con las multitudes y con la muerte".. 

En Rosario, se realizó una megamuestra sobre el arte santafesino que curó Guillermo Fantoni. A continuación, el recorrido que elige el autor, fundamentos y descripciones atesoradas en un libro.

Imago espacio de arte de la ciudad de Rosario fue sede de una megamuestra de arte exclusivamente santafesino que se llamó "Instantáneas sobre el arte de la ciudad de Santa Fe", curada por Guillermo Fantoni. Diversas expresiones que cuentan la historia de la plástica en la ciudad, con Sor Josefa Díaz y Clucellas como punto de partida (1870), fueron expuestas. Allí se pudieron ver obras de Sergio Sergi, Planas Casas, Fernández Navarro, Matías Molinas, López Claro, Supisiche, Fertonani, Espino, entre muchos que definieron y definen la plástica local.

Los protagonistas y sus familiares esperaban que la obra llegue a Imago de Santa Fe, pero no pudo ser, las mismas fueron ya devueltas. Sin embargo, un catálogo-libro (300 ejemplares) -destinando a artistas y familiares- muestra, para los que no pudieron estar, las obras presentadas y revela la investigación del licenciado en Historia que la concretó.

Fantoni agrupó los artistas en modalidades estéticas compartidas o atravesados por ciertas problemáticas históricas, a partir de lo cual pudo esbozar los recorridos del arte de la ciudad de Santa Fe, desde el siglo XIX hasta los tiempos recientes. "Se trata de una antología de creadores, que agrupados de esta forma permite recorrer los momentos y situaciones que fueron puntuando esa rica e intensa historia plástica", sostuvo.

ESTÉTICAS COMPARTIDAS

"Protagonizadas por uno o más artistas, son una suerte de pequeñas escenas organizadas a partir de temas o problemáticas estéticas y culturales, sociales y políticas y cuyo despliegue va puntuando el recorrido de la plástica santafesina", explica el especialista que define, en el libro-catálogo, los distintos grupos de artistas.

La primera escena se llama "Delicias hogareñas" donde Fantoni escribe sobre Sor Josefa Díaz y Clucellas que era recordada como una monja movediza y hacendosa a la que nunca se le caían los pinceles de las manos. Dice que son conocidas sus versiones de los santos y reyes de Israel, de los Cristos y Dolorosas, entre los que se destacan una Purísima y un San José con el Niño. También sus naturalezas muertas, en las que disponía de las frutas cultivadas en el jardín de su casa, algunas veces en la forma de cuidados adornos con los árboles y la vegetación de fondo. También se había explayado en la pintura de retratos.

A Ludovico Paganini y Juan Sol los reunió en "Sensaciones luminosas": Paganini tiene el mérito de una fuerte consecuencia con sus ideas y una práctica que ejerció con verdadera convicción, más allá de las transformaciones que suscitaban los primeros movimientos del siglo XX. Después de 1940, realizó algunas de sus obras más conocidas y significativas como "Contraste" o "La casa de la Virreina". El curador destaca las viviendas pobres que avanzan sobre los edificios públicos o la sobria fachada colonial cargada de historia que quizás hayan despertado en él la misma pasión que sentía por los efectos de luz y de atmósfera o las reverberaciones del agua en la villa de San José del Rincón.

Y sostiene que Juan Sol es uno de los más fieles adherentes a estas estéticas de la sensación. Sus cuadros no sólo reparan en el sugestivo manto vegetal de la llanura santafesina sino en el pintoresquismo de sus viejas poblaciones y en los rincones con vestigios del mundo colonial.

Sobre Agustín Zapata Gollán señala que desarrolló una pintura de contornos intimistas, pero más allá de estos ensayos iniciales en los que se puede advertir el gusto por la historia y las vivencias populares, fue en el grabado en madera donde afloró lo más significativo de su obra: fue a instancia de Sergio Sergi que hizo las primeras obras de una de sus más importantes series de grabados e impulsado por él las envió a una exposición internacional. Esas estampas y las que le continuaron a lo largo de varios años como parte de una singular serie del mar, tienen como protagonistas a la sirena y el marinero que se encantan mutuamente.

En la década del '50 el arte se confrontaba nuevamente con la realidad entablando una renovada tensión entre mundo objetivo y subjetivismo artístico que se manifestó de diferentes maneras: desde las obras de Estrada Bello que mostraban la aspereza de sus modelos y su pertenencia a la tierra hasta el extremo de una realidad trascendida en las pinturas idealizadas y purificadas de Mario Gargatagli; también desde los netos volúmenes de José Domenichini hasta las estilizadas figuras de Raúl Schurjin, que prácticamente cierran el ciclo de estas representaciones en los albores de los cincuenta... Todos revisitan los géneros de larga data en la historia del arte, en consonancia con una recuperación de las grandes tradiciones figurativas de Occidente, que cada uno procesa en diferentes claves de estilo.

"La calma y la tormenta" titula el párrafo para César Fernández Navarro y Matías Molinas. Habla de marcas del poscubismo de Lhote en Fernández Navarro: esa combinación de lo real y lo mental, la naturaleza y la geometría... Conocedor de los "ismos" pero también de las nuevas formas de figuración que revisaban el pasado de Occidente, realizó obras en las que apelaba no sólo a estos nuevos registros formales sino a las temáticas que florecieron en los años de entreguerra, una de ellas la representación de la mujer asociada a la naturaleza generosa.

Ellos no sólo se referirían a los ciclos de la vida y la naturaleza; serían también, si miramos el contexto, un posible llamado de atención sobre el mundo que se ha precipitado en la barbarie.

En "Refugios", se detiene en los desnudos de Fernández Navarro y Raúl Schurjin. En sus obras (verano), más que mostrar una exaltación del cuerpo, celebra la comunión con una vegetación serena y envolvente.

Por su parte, Schurjin había optado por un lenguaje idealizado y preciso que recordaba a los realistas mágicos alemanes.

Sergi aparece más adelante en "Enfoques ultraprecisos" que habla de sus retratos. Para un creador que había hecho de la figura humana el objeto privilegiado de sus escenas, y más allá de las distorsiones expresivas a las que la sometiera, la constante realización de retratos era para Sergi una manifestación más de la misma preocupación: el hombre, las sociedades humanas... El realismo exacerbado que domina los incisivos retratos de sus amigos y de curiosos personajes, como el doctor Leoni, puede pensarse, entonces, como una instantánea en estado de vigilia antes de sumergirse en las oscuras pesadillas de la tinta.

César López Claro, que había efectuado experimentos estéticos con el cubismo, ensayado el clasicismo picassiano en impactantes maternidades y realizado algunos autorretratos de acuerdo con los nuevos realismos, estaba preparado para una nueva aventura: y puso el acento en el medio social y su contenido.

Fernando Espino, Oscar Elías Gigena, Carlos La Cava, Artemio Alisio y Domingo Sahda están agrupados en "Perspectivas americanas": la obra de Espino nos pone en la pista de los objetos arqueológicos y etnográficos que le interesaban y recoletaba, cuyos rasgos participan de un modo u otro, en la refinada alquimia de sus pinturas... La obra desarrollada entre mediados de los cincuenta y mediados de los sesenta por creadores como Elías Gigena, La Cava y Sahda participan de esta cualidad arcaica y misteriosa, de un tipo de construcción que hace del "planismo" su rasgo más saliente, junto a un registro cromático que, como sostiene el último de los artistas, es "el color de la tierra del Litoral". Alisio desde que tuvo su primer contacto con la arcilla, manifestó su interés por lo que llamaba las corrientes primitivas, abarcando con esa designación no sólo las manifestaciones precolombinas sino también las populares.

En el marco de El Galpón (emprendimiento de los años '70 que contenía lo nuevo, lo no consagrado) se sucedía la construcción de un tipo de productos que, como los realizados por ceramistas como Juan Vergel o Lazzarini, estaban en un delgado límite entre la plástica autónoma y el objeto cotidiano. Esta comunión con el ámbito popular es una de las singularidades santafesinas también visible en Kiwi Rodríguez y Hermenegildo Lucero, realizadores de insólitas piezas de barro fronterizas e inclasificables dentro de las categorías y tendencias principales del arte.

En Artemio Alisio, Eduardo Elgotas, Andrés Dorigo, Abel Monasterolo, Nydia Andino está "la persistencia de la pintura como un hecho cultural tan significativo como los tópicos ribereños", señala Fantoni en Habitantes del Bañado/la inundación.

Próxima al lirismo del paisaje de Alisio está la visión dramática de Elgotas. Sus pinturas abstractas realizadas hace varios años exhiben los recursos del renacimiento de los estilos expresionistas e informales que florecieron durante los ochenta... En la obra de Dorigo, desde sus primeras cerámicas hasta sus últimos pinturas, el río aparece de algún modo y con éste, una extraña fauna y flora entre la que emerge una diminuta y flexible femenina: la nadadora... Nydia puede coronar con flores la cabeza de las mujeres cuando aborda los mitos del mundo clásico, pero una corona de flores azules puede ser también una ofrenda reparadora para los que soportan la furia de las aguas.

Los animales rodados de Abel hablan de la fauna autóctona de la región litoraleña.

Por último eligió a los artistas Marcos López, Raúl Cottone, Leo Scheffer, Ponchi, Carlos del Rey, Inés Francia, Nico Sara y Diana Marchetti: "Pintura y fotografía, con sus expansiones y mutuas contaminaciones, son, sin lugar a dudas, los medios a los que apela este conjunto de artistas. Una nueva pictoricidad recorre sus obras, que oscilan entre el universo íntimo y los paisajes cotidianos, la mirada crítica y la interpelación al mundo que los rodea. La mediación tecnológica y la realización artesanal constituyen también los polos de una tensión en la que se dirime su proyecto creador".

ANA LAURA FERTONANI