La gobernación santafesina prepara una contribución consensuada para salir de esta impasse en que se encuentra la relación del campo con el gobierno nacional. "Defendiendo a la provincia, se defiende al país", se sostiene desde la Casa Gris.
Teresa Pandolfo
"No queremos maldecir la oscuridad; queremos encender la luz", señaló uno de los hombres de mayor confianza de Hermes Binner al confirmar que el gobernador no concurrirá a la reunión de mañana en San Francisco, donde legisladores de las fuerzas políticas opositoras al kirhnerismo iban a mantener una reunión en la que fijarían posiciones en defensa de las atribuciones de las provincias.
"Estamos ante un federalismo invertido. Cuanto más se tributa, menos se recibe. No se ha cumplido la cláusula transitoria de la Constitución Nacional Reformada en 1994, que preveía la redacción de una nueva ley de Coparticipación Federal de Impuestos y ahora vemos un Tesoro nacional cada vez más rico y provincias cada vez más pobres. No es el federalismo que el país necesita", indicó el vocero.
Las expresiones del directo colaborador de Binner tuvieron lugar al término de una serie de reuniones que el mandatario mantuvo tanto con sectores rurales como de aquéllos de la industria, especialmente los vinculados con el campo (ver nota relacionada).
Pero en definitiva, ¿cuál es la posición del gobierno santafesino? El discurso gubernamental fue progresivo en intensidad, antes y durante el paro agropecuario. Primero, reclamó que las retenciones volvieran en parte en obras concretas a la provincia, "debemos ser solidarios también con los otros Estados con menos recursos", se aclara.
Luego propició la firma de un acta que suscribieron más de 140 presidentes de comunas e intendente y legisladores en la que solicitaban volver atrás con la resolución N° 125, que impuso las retenciones móviles al girasol y la soja y las aumentó al 44 %, pero que a su vez reclamó la apertura del diálogo entre el gobierno nacional y las entidades del campo. Posteriormente, Binner pidió que Santa Fe participe como provincia en la toma de decisiones relacionadas con la definición de la política agropecuaria.
Luego de esta posición pública del gobierno santafesino, no hubo contactos de la Casa Rosada con la gobernación ni con la cartera específica. La excepción fue la ministra de Desarrollo Social, Alicia Kirchner, que comunicó algunas medidas que beneficiarán al norte.
Planteo razonable y serio
"Estamos por un planteo razonable y serio", indicó el vocero. La idea es mantenerse distante de cualquier juego interno que pudiera estar dándose dentro del Partido Justicialista y, a su vez, redactar una propuesta técnica, superadora del conflicto y alejada del plano político. "Si el justicialismo no va a San Francisco como representante de la provincia, no habría una posición como Región Centro sino como oposición, y esto conduce a las resoluciones que se demandan", se consignó en la Casa Gris. Sin embargo, no se deja de compartir el planteo de otros gobernadores sobre una mejor distribución de la renta.
Pero, fundamentalmente, Binner quiere presentar al gobierno de la Nación y a la sociedad en su conjunto, "propiamente lo que es esta provincia de base agropecuaria y con una industria muy ligada al campo. Estamos hablando de una propuesta superadora", se dice en la Casa Gris, donde se están llevando adelante una serie de consultas especialmente en los niveles técnicos rurales e industriales y con especialistas.
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Aprovechar el momento que vive el mundo
El propio mandatario provincial se ha puesto al frente de las consultas e incluso de la definición de los distintos puntos que contendrá el planteo. "Para salir de este atolladero, no buscamos maldecir en la oscuridad sino que queremos encender una luz", precisó el vocero, quien respecto de los puntos a contener indicó que "pensamos en una Argentina viable que está desaprovechando el mejor momento en cuanto a que es productora de alimentos y debe potenciar sus ventajas comparativas. Europa está con problemas sanitarios y además, es demandante de carnes y granos igual que los países del Asia.
"Queremos la satisfacción del mercado interno y tenemos muy presente al consumidor argentino, pero hay excedentes tanto en carnes como en lácteos que podemos exportar, a los precios que se están pagando afuera. Por eso, nuestro propósito es un plan integral que, partiendo de la cadena de valor por producto, se ubique por encima de los sectores comprendidos y tome en cuenta el consumos interno. No es igual la situación de los pequeños y medianos productores de los pooles de siembra y esto también lo tomaremos en cuenta".
"La propuesta a más tardar debe estar concluida para la semana próxima", precisa el vocero.
El gobierno de Binner sostiene que Santa Fe debe "posicionarse, defendiéndose, y de esta forma -aclara- defiende al país". De allí la propuesta, que será una base de posible cumplimiento, y que será presentada al gobierno nacional, a otras provincias y a los sectores para que si están de acuerdo, sumen en torno de ella una masa crítica. La idea, entonces, es no quedarse en el terreno político para no generar más antagonismos, sino generar una contribución que represente a Santa Fe y en la que todos se encuentren comprendidos", se concluye sobre el tema.
Con los productores
Ayer, durante cinco horas, dirigentes de la Federación Agraria Argentina y de la Asociación Argentina de Productores de Siembra Directa (Aapresid) estuvieron en despachos de la gobernación, reunidos con Hermes Binner y los ministros de Gobierno y Reforma del Estado, Antonio Bonfatti, y de Economía, Ángel Sciara. También tomaron parte del encuentro el fiscal de Estado, Jorge Barraguirre; el secretario de Sistemas Agropecuario, Agroalimentario y Biocombustibles, Carlos Sartor, y la subsecretaria de Coordinación para el trabajo decente, Alicia Ciciliani.
El encuentro fue definido como eminentemente técnico por ambas partes. Aapresid estuvo representada por su presidente, Jorge Romagnoli, mientras que Federación Agraria llevó a Alejandro Krumm, Luis Contigiani y Fabián Tenaglia, quienes expusieron fundamentalmente acerca de costos de producción para distintos cultivos y sobre el significado y los alcances del sistema de retenciones móviles.
"El gobierno llamó porque está preocupado por la situación del sector y quiere conversar con los actores sobre el problema, posibles soluciones y medidas que tendrían que ser discutidas con la Nación. Santa Fe quiere ser un actor importante y quiere discutir políticas con sus productores, con otras provincias y con la Nación", dijo uno de los participantes por las entidades.
La reunión fue convocada el martes por la noche, se inició a las 10 y terminó cerca de las 15. Binner participó en gran parte y sólo salió para atender otras audiencias. Como saldo, quedaron las bases de un documento marco que el gobierno santafesino tendrá para discutir la problemática.
Tanto Federación Agraria como Aapresid consideraron que "no es conveniente demonizar a la soja".
Con la Fisfe
El gobernador y la Fisfe se vieron las caras por primera vez desde el inicio de la gestión socialista. Y, a juzgar por las distintas fuentes consultadas y los partes de información oficial que emitieron tanto el gobierno como la entidad industrial, todo fue color de rosa, luego de cuatro meses de gobierno, donde algunas declaraciones y proyectos prendieron las luces amarillas de la gremial industrial, que hasta ayer no había sido consultada por las distintas iniciativas del Ejecutivo.
Más de dos horas duró el encuentro. De un lado, Hermes Binner. Del otro, Carlos Capisano, Guillermo Moretti, Alberto Paduán, Carlos Bertone y Esteban Moine. Varios temas en el medio. El primero, el proyecto de creación de los comités de seguridad laboral, uno de los mensajes que el PE envió a la Legislatura y que fue cuestionado por casi todos los que no fueran funcionarios del gobierno.
"Le planteamos al gobernador que nosotros no estábamos en contra de los comités, pero rechazábamos el proyecto del Ejecutivo porque lo considerábamos inviable. Le pedimos entre 45 y 60 días de tiempo para discutir la iniciativa en una mesa de diálogo con los otros sectores. Nos dijo que sí", contó uno de los participantes del encuentro. Conclusión: el proyecto fue congelado en Diputados, donde hoy se le iba a dar una preferencia para ser tratado este mes.
Como segundo tema, se abordaron los cambios en la reglamentación de la Ley de Medio Ambiente y, sobre los cuales los industriales no habían sido consultados. "Le pedimos que se nos permitiera dialogar para poder expresar nuestra opinión respecto de los cambios en la reglamentación de la ley. Le explicamos que los primeros interesados en tener la mejor calidad ambiental y laboral somos nosotros, los empresarios, porque nos permite ser más competitivos, pero que había que contemplar algunas situaciones particulares, especialmente de las Pymes. El gobernador estuvo de acuerdo", explicó la misma fuente.
El tercer tema fue invitar al gobernador a participar en la 2º Conferencia Industrial de la Provincia de Santa Fe que se realizará el 3 de julio en la capital santafesina. "Nos dijo que va a estar presente. Además, le pedimos más participación de los funcionarios del Ministerio de la Producción en las preconferencias que se hacen en las cinco regiones de la provincia. Se comprometió a cumplir con nuestro pedido", explicó.
Asimismo, se abordaron otros aspectos que preocupan a los industriales, como el energético, las cadenas de valor, infraestructura y comercio exterior. "Estamos muy satisfechos. Fue una reunión muy positiva y Binner nos aseguró que, bajo su gestión, el diálogo será una política de Estado", resumió Carlos Capisano, presidente de Fisfe.