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Se busca evitar el complejo procedimiento que actualmente significa requerir una licencia médica por parte del personal escolar. Habrá un 0-800 y se hará hincapié en la prevención de patologías propias del magisterio. El control funcionará con auditorías médicas por muestreo.
La ministra de Educación de la provincia, Elida Rasino, firmó este mediodía un convenio con el decano de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), Dr. Carlos Domingo Crisci, para implementar el nuevo sistema de salud laboral docente, que se espera esté en pleno funcionamiento el 1º de julio próximo.
Con esta reestructuración se eliminará el trámite que actualmente debe realizar el personal de las escuelas en las oficinas de Salud Laboral del Ministerio de Educación y de las delegaciones regionales, para conseguir el aval oficial al certificado de enfermedad expedido por su médico particular.
Ese paso -que implicaba largas colas de maestros enfermos- será anulado y reemplazado por un llamado que el docente deberá hacer a un número telefónico gratuito (del tipo 0-800) que se conectará con el nuevo Servicio de Prevención y Promoción de la Salud Docente. Del total de las licencias que se solicitan en el día por ese call center, el 10 % será visitado por un médico auditor, de manera de controlar el ausentismo a través de un muestreo.
La presentación del nuevo sistema fue encabezada por el gobernador Hermes Binner y se llevó a cabo alrededor de las 11 en el Salón Blanco de Casa de Gobierno. Estaban presentes, además, el rector de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), Prof. Darío Maiorana; los ministros de Economía, Angel Sciara, y de Salud, Miguel Angel Cappiello; legisladores, representantes de los gremios docentes, autoridades del Ministerio de Educación, y público general.
La propuesta implica el diseño e implementación de un nuevo sistema de intervención médica en casos de ausencias por enfermedad del personal escolar que fue encargado a un equipo de la Universidad Nacional de Rosario. A tal efecto, el gobernador Binner, firmó el 26 de mayo el decreto Nº 1337 que autoriza a la titular de la cartera educativa a celebrar el convenio con la UNR.
Tarea de la UNR
La Universidad Nacional de Rosario tendrá bajo su órbita el call center adonde deben llamar los docentes, así como la red de médicos adscriptos a la facultad que son alrededor de 47 profesionales distribuidos por toda la provincia.
"Las nuevas autoridades percibieron que el sistema de control de ausentismo laboral implementado durante décadas por el Ministerio de Educación estaba perimido. La facultad de Ciencias Médicas propuso su reemplazo por un programa centrado en la atención al docente, en la prevención y promoción de la salud", rescató Crisci, decano de Medicina.
"Se trata de un cambio de paradigma que pasa del control del ausentismo a la prevención de la enfermedad y rehabilitación del trabajador docente", subrayó, y destacó que está preparado el espacio físico y se ha entrenado a los médicos y al personal que atenderá los teléfonos.
Crisci aportó los antecedentes de trabajo de esa casa de estudios en la investigación sobre el área de salud laboral, entre ellos, un trabajo realizado con Unesco sobre condiciones de trabajo, salud y rendimiento docente en países de Latinoamérica, y la puesta en marcha en el 2000 de un programa de asistencia al trabajador ausente por enfermedad en la UNR.
El nuevo sistema de salud también consta de "un equipo interdiciplinario que va a trabajar especialmente en la promoción de la salud en algunos casos de inasistencias recurrentes", añadió la ministra Rasino. "Se hará un acompañamiento porque sabemos que los docentes son mujeres a cargo de hijos, y a veces a cargo de padres, y que en muchos casos hay componentes sociales que se cruzan. La idea es que ese equipo interdiciplinario pueda acompañar los procesos que se puedan detectar como crónicos para que el trabajador pueda recuperarse y retornar a su actividad", dijo.
Para la funcionaria, el cambio en salud laboral es un "hito" que evitará al docente enfermo "un peregrinaje y molestias no justificadas". La medida formó parte de los 13 puntos consensuados entre el gobierno y los gremios docentes en la mesa paritaria de principios de año.
"Simuladores"
Por su parte, el gobernador dijo que los posibles "simuladores" de dolencias deben ser tratados como "enfermos", porque "es un problema que se debe a la falta de satisfacción individual por el trabajo realizado".
Rasino aseguró no temer un crecimiento del índice de ausentismo ahora que el docente no tendrá que presentarse más ante las oficinas de Salud Laboral. "Es una reivindicación histórica y un reconocimiento al trabajador de la educación. El Estado tiene que tomar las medidas necesarias para que cualquiera que intente manejarse por fuera de la legalidad tenga su sanción o apercibimiento en el caso que corresponda".
Además, llevó tranquilidad a las actuales áreas de Salud de las regionales educativas en cuanto a su estabilidad laboral. "Parte va a ser reubicada en el Ministerio de Salud, algunos van a quedar para hacer las carpetas médicas y otros van a ser absorbidos por este nuevo sistema en convenio con la Universidad", dijo.
Libretas.
La ministra de Educación confirmó que desde el lunes están las libretas de calificaciones en las regionales de Educación para ser distribuidas a las escuelas, luego de una demora de 25 días. "Es habitual que haya un retraso en este primer cuatrimestre pero hubo tema adicional este año que es que tuvimos que adecuarlas al nuevo sistema de primaria y secundaria, y eso nos demoró un poco", explicó Elida Rasino.
Otro procedimiento
El maestro que debe faltar por enfermedad propia o de un familiar ya no tendrá que ir a las oficinas de Salud Laboral. Alcanzará con avisar a la escuela y llamar dentro de su turno a un número 0-800 donde se le dará un número de trámite. Cuando da su nombre, el operador ve en la pantalla los datos del docente, le pregunta qué le pasa, confirma el domicilio y le advierte que podrá ser visitado por un médico auditor. El sistema determina el muestreo de docentes a visitar domiciliariamente.
En ambos casos -sea que el docente vaya a su médico particular como que reciba la visita del auditor-, uno u otro deberá firmar un certificado nuevo que se llama Ausencia Médica (AM) que tiene datos del docente y de la patología. El docente o no docente tendrá 72 horas para informar nuevamente al sistema cuántos días le han dado y por qué enfermedad. El director informa sobre esa licencia a la Dirección Regional y se coteja con el sistema informático Sarh.
Siempre el que define la cantidad de días, en caso de controversia, es el médico del sistema de salud.