Linfomas. En la Argentina se detectan 1.800 nuevos casos por año, mientras que en el mundo padecen alguna variedad de cáncer de linfoma más de un millón de hombres y mujeres. Sin embargo, muchas personas desconocen que se trata de una enfermedad. fuente: Pro-Salud News.
+ por Revista Nosotros
El cáncer de linfoma es una enfermedad severa pero curable que afecta los ganglios del sistema linfático, que están distribuidos por todo el organismo e integran el sistema inmunológico; aquel conocido por ser el encargado de brindar protección frente a las posibles infecciones o agresiones externas.
Si bien esta puede parecer una definición general y fácil de comprender, de acuerdo con lo revelado por una encuesta de vía pública e informal realizada por la Asociación Civil sin fines de lucro Linfomas Argentina, en nuestro país existe en preocupante desconocimiento no sólo sobre las características generales de esta afección sino también sobre sus posibilidades de tratamiento y, fundamentalmente, sobre la importancia que tiene detectar los síntomas a tiempo para poder abordarla en forma precoz. Vale consignar que la detección se realiza mediante una biopsia.
"El cáncer de linfoma que se manifiesta con algunos síntomas como la fiebre y la pérdida de peso, se caracteriza por el agrandamiento de los ganglios que se encuentran, por ejemplo, en las axilas, el cuello, la ingle, el tórax o el abdomen. Partiendo de estos datos básicos, es importante estar atentos como para poder advertir la enfermedad a tiempo y realizar la consulta pertinente. Hay que tener en cuenta que se si trata precozmente, una persona que tiene linfoma puede vivir una vida plena, logrando períodos prolongados de remisión y realizando las actividades habituales", afirmó la doctora Virginia Prates, durante la presentación del Día Mundial de la Concientización sobre el Linfoma, que se conmemora el 15 de septiembre. El principal objetivo de la fecha es incentivar la difusión de información sobre una condición que afecta a más de un millón de personas en el mundo. En la Argentina se detectan 1.800 nuevos casos por año.
"Gracias al diagnóstico precoz y con los tratamientos disponibles actualmente, el linfoma se ha convertido en una enfermedad curable para la cual hay un mejor pronóstico. Muchos pacientes tuvimos la desdicha de llegar tarde a la consulta o deambular por diferentes consultorios hasta encontrar un médico que diera en la tecla", postuló Haydee Alicia González, presidente de Linfomas Argentina.
"Actualmente la concepción paternalista de la medicina, en la cual el profesional es quién debe ordenar, conducir y tomar las decisiones está cambiando. Hoy el paciente es protagonista, se informa, recurre a ayuda, decide. Siempre hay que luchar contra la sensación de soledad e insularidad", consignó el doctor Dardo Riveros, presidente de la Sociedad Argentina de Hematología y jefe del servicio de Hematología del CEMIC (Centro de Educación Médica e Investigaciones Clínicas Norberto Quirno).
En cuanto a los avances realizados en el tratamiento de esta afección, el especialista concluyó: "los logros han sido importantes, aunque todavía falta mucho por hacer. Las posibilidades de remisión son importantes pero siempre se puede mejorar".