Policía y su novia

Con el ladrón en el ascensor

Un policía de la provincia de Mendoza y su novia resultaron con heridas en la cabeza tras ser atacados para robarles por una pareja de delincuentes cuando ingresaban al ascensor de un edificio del barrio de Balvanera, informaron fuentes policiales.

Mientras escapaban tras robarles dinero y las pertenencias a las víctimas, los delincuentes dispararon al menos dos balazos que impactaron en el frente del edificio.

El hecho sucedió cerca de la medianoche en un edificio de la calle Catamarca 530, cuando un policía mendocino de 37 años, que se hallaba de vacaciones junto a su novia de 42, fue sorprendido por dos delincuentes, un hombre y una mujer, que lo abordaron dentro del ascensor.

Los investigadores creen que los delincuentes ingresaron al edificio detrás de la pareja, antes de que la puerta de entrada se terminara de cerrar.

Cuando el policía y su novia dicen que van al cuarto piso, los delincuentes, que estaban muy bien vestidos y hasta ese momento tenían buenos modales, sacaron sus armas y dijeron que se trataba de un robo.

Inmediatamente, según las fuentes, los asaltantes golpearon en la cabeza al policía de nombre Miguel y a su novia Viviana, al tiempo que les decían que les entregaran dinero y todos sus objetos de valor.

Según la policía, todo duró unos minutos y la pareja de delincuentes, al no poder concretar el robo, se fue del edificio dejando al policía y la mujer con heridas cortantes en la cabeza.

Ambos heridos fueron derivados por el Same, al Hospital Ramos Mejía, con sendos cortes en el cuero cabelludo.

Viviana, la mujer asaltada explicó a los periodistas que los “agarraron en el ascensor, nos amenazaron con un arma, nos agredieron a culatazos, pero como empezamos a gritar, se fueron”.

La mujer también agregó que los delincuentes dispararon al menos un tiro que pegó en la puerta de entrada del edificio.

“Eran un hombre y una mujer, de entre 30 y 40 años, mientras él nos apuntaba con un revólver, la mujer nos golpeó en la cabeza”, dijo.

Además, explicó: “La verdad es que no sospechábamos nada cuando entraron, estaban muy bien vestidos, eran muy elegantes, hablaban bien, y no parecían violentos”.

Fuentes del caso indicaron que el policía asaltado presta servicio en la provincia de Mendoza, y que vino a Capital Federal a pasar unas cortas vacaciones.

Investiga el hecho personal de la comisaría 8 y la Fiscalía Número 2 a cargo de Eduardo Cubría.