la BAUTIZAron “QUERANDÍ”
Flamante playa nudista en Villa Gesell
Fue creada por la Asociación para el Nudismo Naturista Argentino. La desnudez es optativa.
DE LA REDACCIÓN DE EL LITORAL
Acaba de inaugurarse la primera playa nudista de Villa Gesell, una novedad que despertó gran expectativa entre los vecinos de la zona y que, desde la misma apertura, atrajo la curiosidad de los numerosos turistas que cada verano eligen las costas geselinas para su descanso anual.
La playa, que días pasados fue disfrutada por una veintena de fanáticos de la naturaleza que se zambulleron como llegaron al mundo, fue bautizada Querandí, como el histórico faro que se alza en las vecindades. Está ubicada a la altura del kilómetro 429 de la ruta 11, a unos 20 kilómetros al sur del centro de Villa Gesell.
Responsables de la creación de la playa son los directivos de Apanna (Asociación para el Nudismo Naturista Argentino), quienes subrayan la diferencia que existe entre el llamado nudismo naturista y el nudismo a secas. Este último se agota en la actitud de quitarse la ropa, y muchas veces tiene connotaciones exhibicionistas y hasta obscenas.
Antes de dar vía libre a la instalación del nuevo reducto, las autoridades municipales realizaron una encuesta entre los pobladores, quienes apoyaron la iniciativa, en un 70 por ciento.
El intendente de Villa Gesell, Jorge Rodríguez Erneta, explicó las razones que impulsaron a las autoridades a dar el consentimiento: “En principio, creemos que la gente tiene derecho a prácticas que no estén reñidas con la moral, ni con la ley. Y este tipo de espacios, correctamente controlados, están aceptados en todo el mundo. Además, permanentemente estamos buscando nuevos atractivos para nuestros balnearios y una playa de estas características interesará al turismo extranjero, lo cual significa más trabajo para los pobladores del partido”.
CÓDIGO DE ÉTICA
Los directivos de Apanna aclaran que “el nudismo naturista es una forma de vida en armonía con la naturaleza, caracterizada por la práctica del nudismo comunitario, con la intención de alentar el respeto hacia uno mismo, respeto por los otros y por el medio ambiente”, según la definición de la Federación Naturista Internacional.
Asimismo, está regido por un estricto código de ética que establece, antes que nada, la conveniencia de no mirar abiertamente a una persona que está desnuda aunque, como reconoce la doctora Florencia Brenner, secretaria de Apanna, “los llamados ‘mirones’ (los que miran con descaro y en forma evidente) son un mal endémico en todos los lugares públicos, en todo el mundo donde el nudismo es minoría, y especialmente en días feriados y en temporada alta. Se contrarrestan con personas que recorren las playas asesorando a la gente para que su conducta se adecue a los códigos de ética. Tampoco son reglas que puedan imponerse, puesto que mirar no está prohibido por ley”.
Brenner agrega que existe “una versión aún más grave y enfermiza (de esta manera de mirar), que es la denominada ‘voyeurismo’, considerada como una patología al igual que el exhibicionismo. En las playas naturistas estas personas son expulsadas, previo aviso de que esa conducta no está permitida”.
También está prohibido tomar fotografías sin consentimiento y mucho menos publicarlas; tener actitudes abiertamente provocativas desde el punto de vista sexual (exhibicionismo); la presencia de menores y todo tipo de postura discriminatoria, cualquiera sea la causa.
Queda claro que en la playa “naturista” de Villa Gesell, el nudismo no será obligatorio sino optativo, y convivirán personas desnudas con gente en ropa de baño o completamente vestida.
Además, ya están avanzados los trabajos para cercar la playa, que contará con carteles identificatorios que adviertan a la gente que en ese lugar se encontrarán con personas desnudas. En atención a que la playa está ubicada en un lugar desierto, se han instalado baños químicos, mientras que un guardián y dos guardavidas se encargarán de velar por la seguridad de los veraneantes, en la playa y en el agua.
Sobre estos principios, Villa Gesell se incorporará a la no muy extensa lista de refugios nudistas del extremo sur del continente, junto a la Playa Chihuaha, en Punta del Este y Playa Luna, en Chile. Brasil es donde más se ha difundido esta práctica.
Antes de esta concreción, las autoridades municipales realizaron una encuesta entre los pobladores.
Foto:Gentileza María de Vedia Comunicación
