Festejo en Los Hornos por el centenario de la institución

Escuela Cullen: 100 años y todo un barrio de fiesta

El establecimiento del nivel primario conmemoró su 100º aniversario en un conmovedor acto. Asistieron autoridades educativas y municipales, además de un gran número de vecinos. Emotivos testimonios de ex alumnos.

De la redacción de El Litoral

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Estaba lindo el solcito de la mañana en la esquina de Urquiza y Gorostiaga. Como si el cielo diera su bendición al acontecimiento. Todos se hicieron presentes al acto: alumnos, actuales y ex docentes, directivos, egresados, autoridades educativas y municipales. Y el barrio, ese populoso distrito del centro de la ciudad donde los abuelos salen a sus veredas por las tardes a esperar el diario, y los jóvenes se reúnen en las plazas para burlar al tedio con pequeñas picardías. La escuela Nº 26 Patricio Cullen festejaba ayer sus 100 años de vida (la fecha fundacional fue el domingo pasado) entre la alegría de la evocación y el realismo mágico de lo cotidiano.

“Miren que los estará mirando el señor intendente”, deslizó despacito una maestra a los alumnos, para que se quedaran bien formados. La banda de música Padre Manuel Ostertag comenzó a ejecutar las primeras notas del Himno Nacional. Los abanderados hicieron su entrada y los aplausos taparon la estridencia de trombones, trompetas y platillos. Un locutor apuesto, trajeado él, daba las primeras glosas con agradecimientos y mensajes de salutación.

La escuela Cullen nació el 3 de mayo de 1909, en calle Simón de Iriondo al 5900 (hoy Facundo Zuviría) sobre terrenos prestados por la familia de Benedeto Marzengo. En marzo de 1962 se inauguró el edificio actual de Urquiza al 6000. Y desde el año pasado toda la comunidad educativa viene organizando los festejos por el centenario: en octubre se realizaron caminatas por el barrio para “volantear” el evento, hubo murgas y demás actividades artísticas. A partir de ahora se llevarán adelante distintos eventos conmemorativos hasta el 10 de octubre, fecha que marcará la culminación de las celebraciones con la cena de gala. Allí, ex alumnos y ex docentes, cooperadores y muchas otras personas vinculadas con la institución rendirán tributo a la escuela mediante el ritual del reencuentro, el recuerdo emocionado y la anécdota.

“La rica historia de nuestra escuela es fruto del trabajo tenaz de docentes, cooperadores, club de madres y muchos otros colaboradores que apoyaron siempre a la institución, pese a todos los problemas, para hacer de ella un lugar agradable y confortable que cobije y contenga a los niños. Porque la escuela es hoy el único lugar donde se los incluye y se los trata como personas pensantes y de bien”, enfatizó la directora de la escuela, Zunilda Oliva.

Palabra de ex alumno

Ángel Cuenca, egresado del establecimiento hace 50 años, quiso expresar sus sentidas palabras: “La escuela es este edificio remozado y también aquel otro antiguo y deteriorado, pues el mismo amor que en la actualidad reciben los alumnos lo recibíamos nosotros hace medio siglo. Hoy veo una escuela cálida, hermosa y acogedora, como una mamá que nos espera con la merienda. Pero a la verdadera institución educativa la hicieron, la hacen y la seguirán haciendo sus docentes”, destacó. Para esas alturas, a más de uno se le había piantado un lagrimón.

Mario Barletta siguió en los discursos. Destacó la obra política e institucional del ex gobernador Patricio Cullen, a mediados del siglo XIX. “Fue uno de los dirigentes que sentó las bases para la construcción de una provincia mejor, junto con don Nicasio Oroño. Ambos tuvieron la capacidad para advertir lo que la nuestra sociedad necesitaba, y proyectar un futuro”, honró.

Ya todo concluía en la esquina de la escuela. En su cierre el intendente despachó alguna que otra promesa de computadoras para los chicos, y una división de alumnos entonó una canción especialmente preparada para la ocasión. El locutor trajeado comenzó a formalizar la finalización del acto. Las autoridades se levantaban de sus asientos, los chicos comenzaban a moverse. Pero el barrio no se iba, se quedaba un rato más. Son esos sentidos de pertenencia, que le dicen.

Toda la comunidad educativa de la escuela Cullen vivió una jornada muy especial ayer, durante el acto conmemorativo de los 100 años de vida de la institución.

Foto: Néstor Gallegos

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EL DATO

El personaje

Patricio Cullen nació en Santa Fe en 1826 y tuvo una trágica muerte en inmediaciones de Cayastá en 1877. En su corta vida tuvo una intensa actividad política. Gobernador de la provincia a partir de 1862, sucedió en el cargo a su tío Domingo Crespo y fue sucedido por su cuñado Nicasio Oroño. Durante su gobierno autorizó el retorno a Santa Fe de la Compañía de Jesús, que había sido expulsada un siglo antes. En 1877, participó en una revolución contra el electo Simón Iriondo. Derrotadas sus huestes en el combate de Los Cachos, en su huida fue alcanzado y muerto.