Apuntes de política provincial

Hombres en conflicto

 

Teresa Pandolfo

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Con virulencia y descalificación por parte del Frente Progresista Cívico y Social hacia Carlos Reutemann se largó la campaña electoral. Inicialmente, podría decirse que era esperable. Antes de la definición de las listas de candidatos, Carlos Reutemann aventajaba por entre 13 y 15 puntos al senador Rubén Giustiniani, y ambos compiten para renovar sus bancas en el Senado de la Nación.

Los números que aportaban las encuestas, por cierto muy prematuras, llevó de lleno al gobernador Hermes Binner a involucrarse en la campaña electoral, y lo hizo con expresiones muy duras hacia el contrincante mayor que tiene la coalición progresista. Una bancada en la Cámara de Diputados le solicitó al mandatario mesura y el bloque de Senadores del PJ reaccionó llevando al recinto el debate, en el que mezcló lo institucional -el freno que Diputados coloca a sus proyectos- con los dichos de Binner. Esta confusión no debería repetirse. En la ópera de voces y actuaciones a la que se asistió esta semana hubo un hecho que esta periodista -ya como ciudadana- consideró como salido de madre: que Luis Juez, candidato cordobés a diputado por Córdoba, con el motivo de sacarse una foto con Hermes Binner, ocupó el espacio de la Casa Gris para burlarse con sus chistes de Reutemann y de otros dirigentes justicialistas. Las ocurrencias fueron festejadas por las máximas autoridades del socialismo frente a la prensa.

El ámbito institucional de la Casa de Gobierno no fue el más adecuado para que un foráneo provoque burlas de quien ha sido dos veces gobernador de la provincia y senador nacional por el distrito. Distinto hubiera sido que las chanzas se dijeran en una sede partidaria socialista o radical.

Resultó una falta de consideración para quienes equivocados o no, según cada óptica, votaron en su momento al Partido Justicialista. No puede decirse que Binner y sus colaboradores hayan sido sorprendidos por las jugarretas intencionales de Juez, porque cuando el gobierno no quiere informar sobre algo no lo hace y tampoco da acceso a los fotógrados. Hay reuniones que mantienen en silencio y el enterarse de qué se trata, demanda toda una tarea de espionaje.

La Casa Gris está para otros aconteceres aunque no sean propiamente de gobierno. En ella, por ejemplo, fueron velados en enero de 2000 los restos del ex gobernador radical Aldo Tessio, padre de la vicegobernadora Griselda Tessio. El deceso ocurrió durante el último mandato de Reutemann. Pareció normal que esto sucediera porque había fallecido uno de los hombres públicos más importantes de la provincia. En tanto, otro mandatario justicialista, el Ing. Jorge Obeid, en 1997, le rindió el último homenaje que el ex gobernador radical tuvo en vida, y para esa ocasión fue invitado y concurrió el doctor Raúl Alfonsín.

Se recuerdan estos hechos para marcar una diferencia, que exime de otros comentarios y evita caer en las descalificaciones de personas que nada resuelven el grave panorama económico y laboral que atraviesa la provincia. Cabe aclarar que en la jornada con Luis Juez no estuvo presente la Dra. Griselda Tessio. Al parecer, todo indica que los santafesinos asistiremos a una campaña electoral de fuerte tono, que aportará un grado más de agresividad a la vida cotidiana, ya saturada por hechos de incertidumbre en planos como la seguridad, la economía y el trabajo.

En las últimas horas, al tiempo que los tres principales frentes electorales completaban sus nóminas, se visualizaba que en la provincia, el enfrentamiento mayor se iba a dar entre Santa Fe Federal y el Frente Progresista, en tanto que la primera expresión, liderada por el reutemanismo iba a diferenciar su mensaje respecto del Frente para la Victoria. Sin caer en una confrontación que lleve a confundir “distintas visiones” (como dicen desde este sector) con actitudes “gorilas”, se marcarán los disensos respecto a políticas de producción y federalismo fiscal.

En términos políticos, cabe señalar que esta elección reedita la alianza entre reutemanistas con obeidistas, estos últimos también con intereses directos en el 2011, al punto que Jorge Obeid participará activamente en apoyo de la nómina de diputados.

La lista de Santa Fe Federal presentan una distribución geográfica de los cargos y mayoritariamente un perfil profesional. El obeidismo colocó al abogado Juan Carlos Forconi, conocedor de la trama social de la ciudad y una persona bien considerada. A los nombres señalados siete días atrás: Daniel Germano (Rosario), Celia Arena (San Justo) y Carlos Carranza (San Lorenzo), se agregaron los de Andrés Oscar Medina, ingeniero civil de Reconquista, no afiliado al PJ, con desempeño en la Universidad Tecnológica. Por el sur-sur, incluye a Noemí Azcona, médica nefróloga con actuación en Venado Tuerto, donde ha desempeñado funciones en la municipalidad y el hospital regional.

El Frente Progresista también presenta una muy buena lista con predominio de figuras de Rosario y del sur en los cinco primeros lugares: Jorge Alvarez, Alicia Ciciliani, Carlos Comi, Carlos Favario, Silvia Aubsburger y en el sexto lugar, Edgardo Martino, de San Cristóbal. Es también una nómina que conjuga experiencia de gobierno y perfiles profesionales. En tiempos recientes, Ciciliani ha tenido una actuación muy activa como secretaria de Trabajo de la provincia.

Agustín Rossi, por el Frente para la Victoria, buscará su reelección y quienes lo acompañan como candidatos a senadores y diputados guardan una adhesión ideológica con Néstor Kirchner. La oferta de candidatos exhibe un interesante arco ideológico y figuras con solventes trayectorias, dos datos que permitirían llevar adelante una campaña no agresiva y sí constructiva para el discernimiento del elector, quien debe encontrar en este tiempo, una expresión política que plasme sus sueños y le aporte un marco de previsibilidad para el desenvolvimiento de sus actividades.