DE LA UNL
Una mirada a la historia del Instituto de Cine
La mítica institución es recordada a través de registros fotográficos de los alumnos, que se exhiben en el Foro Cultural.
Fotos, programas y equipos de filmación forman parte de la exposición.
Foto: GENTILEZA UNL
DE LA REDACCIÓN DE EL LITORAL
Hasta el 17 de junio, el Museo y Archivo Histórico de la Secretaría de Cultura de la Universidad Nacional del Litoral invitan a recorrer la muestra de fotos, programas y equipos de filmación del Instituto de Cinematografía de la UNL. Se expone en la Sala Federico Aymá del Foro Cultural Universitario, 9 de Julio 2150.
El Instituto perteneció a la UNL desde su surgimiento en 1956, y cerró sus puertas en 1976. Las fotos reconstruyen históricamente esa institución con sus actores trabajando y sus discusiones en torno al cine, la política, la literatura.
Un poco de historia
Uno de los pilares que sostenían al Instituto de Cinematografía al interior de la UNL fue Ángela Romera Vera, junto al propio rector Gollán. Cuando se crea el Instituto, los fundadores buscaban “a través de él una nueva forma de comunicación con nuestro pueblo en su dimensión real. Ni regionalismo, ni pintoresquismo, ni arte de vanguardia. Todo lo que queremos es que los alumnos del Instituto aprendan a ver y a expresar lo visto en forma tal que los espectadores de sus trabajos tengan que mirar y compartir; si además realizan algo bello tanto mejor”, decía Vera.
También subyacía el deseo de que el Instituto de Cinematografía pueda ofrecer a la industria cinematográfica técnicos científicamente preparados para desempeñarse en las distintas etapas de la filmación y “entonces, habrá dejado de pertenecer al Instituto Social cuya finalidad no es hacer profesionales; pero si cada uno de esos futuros cineastas lleva fundido a su saber de oficio el necesario saber ético que le impida aplicar el primero a realizaciones que no estén al servicio de los valores particulares del pueblo argentino y generales del hombre, nuestra Universidad habrá dado un paso más en el cumplimiento de lo que entiende como su misión”, relataba Vera en el prólogo del libro “Fotodocumentales”, de 1956.
