Avance en la lucha contra la gripe A

El mapa genético del virus:

la ciencia da una esperanza

Científicos del Malbrán lograron decodificar el genoma del virus influenza que circuló en la Argentina y esta región continental. Un especialista explica los alcances de esta secuenciación, que permitiría conocer el grado de mutación del virus. Y diseñar una vacuna antiviral efectiva.

De la redacción de El Litoral

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Según trascendió días atrás, un grupo de científicos del Instituto Malbrán de Buenos Aires lograron secuenciar y decodificar el genoma (mapa genético) del virus de influenza (H1N1) que circula en nuestro país y que transmite la gripe A. Las primeras conclusiones obtenidas indicaron que no existen diferencias sustantivas entre este virus y el que surgió en México y Estados Unidos. La decodificación ha significado un avance en cuanto se ha logrado observar y anticiparse al grado de mutación viral, y proyectar el diseño de una vacuna antiviral que sea realmente efectiva para contrarrestar la pandemia.

“Es muy importante a nivel zonal saber qué cepa es la que está prevaleciendo ahora regionalmente, tanto en lo que es Argentina como Brasil, para ver cómo evoluciona la pandemia. La secuenciación del genoma del virus implica un avance significativo, pues permitiría realizar un diseño vacunal efectivo”, explicó a El Litoral Sergio Lejona, jefe del laboratorio de Biología Molecular del Centro de Especialidades Médico Ambulatorias (Cemar), de la ciudad de Rosario.

Esta “lectura” de la composición genética “permitirá evaluar la resistencia a los distintos mecanismos químicos, como el oseltamivir o tamiflú, que son los medicamentos que se están utilizando actualmente. Existen variaciones en el genoma que en algunos casos confieren resistencia a estos medicamentos. Entonces (la decodificación genética) servirá para evaluar esa resistencia (del virus)”, precisó el especialista.

Mutaciones

Un virus siempre puede ir cambiando y, frente a estos cambios, el sistema inmunológico humano no responde. De allí la importancia de conocer la composición genética de la influenza, “de anticiparse a la prevalencia y al grado de mutabilidad. La secuenciación también es muy importante para ver cómo va variando el virus. Como la influenza tiene una tasa de mutación genética muy alta, se tiene que ir viendo cómo va evolucionando, si esos cambios se van manifestando, y si generan inhabilidades de los anticuerpos vacunales”, explicó el especialista del Cemar.

Se sabe que, año a año, hay pequeños cambios virales (por factores estacionales, climáticos, etcétera), modificaciones en el genoma que hacen que los anticuerpos vacunales del año anterior muchas veces no reconozcan los nuevos virus. “Por eso -precisó Lejona- es tan importante hacer un seguimiento genético de la influenza. Hay que conocer el genoma, pues no se sabe de qué manera va a evolucionar en el tiempo. He allí la importancia de esta secuenciación genética que se obtuvo en el Malbrán”.

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El trabajo científico ha permitido decodificar el genoma del virus de la influenza que ha circulado en la Argentina. Este desciframiento permitiría observar las mutaciones y realizar un diseño vacunal.

Foto: Néstor Juncos

Producción de vacunas

“Todos los tests diagnósticos se pudieron construir gracias a que, en su momento, el Centro de Enfermedades de los Estados Unidos decodificó el virus de la influenza, e hizo un diseño diagnóstico para poder identificarlo -indicó Lejona-. La ciencia da esta posibilidad: es muy importante saber cómo va evolucionando (el virus) y esa información nos la proporcionan la decodificación y la secuenciación genética. Y, para nuestro país, haber descifrado el genoma del virus tiene gran trascendencia, pues se puede reflejar en una producción de vacunas efectivas a nivel regional”, concluyó.

Temor por rebrote viral en México

El temor en México de que se acelere la propagación del virus de la influenza a partir del lunes -tras el regreso de los turistas mexicanos que hayan vacacionado en el sureste del país, zona donde el virus se manifestó en forma intensa- ha obligado al gobierno azteca a implementar el “alerta máxima” y definir un plan de acción. La región sureste -particularmente sobre todo Chiapas y Yucatán- resiente el mayor golpe del rebrote del virus H1N1, debido al relajamiento de las medidas preventivas entre la población, que ignoró los llamados del sector salud a mantener la protección. Por eso, el gobierno ha definido una serie de estrategias para enfrentar la inminencia de una nueva oleada del virus.

Así, se adquirirán 3 millones de dosis de la vacuna -que estará disponible en México a más tardar en diciembre-, y se analiza la posibilidad de reactivar los filtros de detección de padecimientos respiratorios en las escuelas durante el próximo regreso a clases, publica hoy El Universal.

El subsecretario de Salud, Gabriel O’Shea Cuevas, dijo que el gobierno estatal tiene 3 mil tratamientos disponibles para curar la influenza A, además de camas suficientes en 35 hospitales y mil centros de salud en todo el territorio. No obstante los esfuerzos y previsiones gubernamentales, crece el temor público por un rebrote viral.