Respuestas que no deben demorarse

Distintas voces coinciden en que desde hace dos años el pedido de ayuda alimentaria se ha incrementado en todo el país, e indicadores internos y externos confirman que la necesidad de recurrir al auxilio de subsidios o asistencia es primordial para un amplio sector social empobrecido, sobre todo el que habita los grandes conglomerados urbanos y el norte provincial, que también es el más castigado por la prolongada sequía.

San Martín: aquí, ahora

Sé que por estos días me recordaréis como el Padre de la Patria, y he querido estar presente entre mis compatriotas. Loado sea Dios y su Ssma. Madre, venerada por nuestros ejércitos bajo la advocación de Virgen de las Mercedes, Generala del Ejército Argentino, y de Ntra. Sra. del Carmen, Patrona y Generala del Ejército de los Andes, quienes me concedieron gracia tan singular. Os agradezco los homenajes que me estáis tributando. Nunca olvidéis a vuestros próceres y tratad de imitar sus virtudes -que seguramente las tuvieron-; pero dejad de lado sus debilidades y defectos que sin duda padecieron porque fueron hombres... Estando en el exilio, y luego de haberlo meditado mucho, llegué a la conclusión de que la espada sola -me llamaron el Santo de la Espada- no basta para hacer felices y seguros a los pueblos, sino que debe reinar en ellos una alta moral religiosa y cívica; deben ser probos, sanos de mente y de alma, estudiosos, solidarios, honestos, trabajadores abnegados, cristianos no sólo de palabra, sino de hechos; devotos del Señor y de su madre la Virgen, la que me acompañó en todas mis campañas militares, en mi vida privada y pública, y siempre que recurrí a Ella, como aquella vez cuando, estando en Cádiz en 1808, el pueblo asesinó al Gral. Solano y se propuso asesinarme también a mí -su edecán-, yo me escabullí entre el gentío y me guarecí en un nicho público dedicado a Ntra. Señora. Ella me salvó, porque pasó un sacerdote y desarmó a mis perseguidores diciéndoles: “Lejos de vosotros querer dañar a quien se ha cobijado al patrocinio de la Madre de Dios”.

Al margen de la crónica

El corazón en las rodillas

—¿Cómo estás? -preguntó Enrique Santos Discépolo. —Bien -le respondió Aníbal Troilo, con la cabeza hacia abajo y la papada que rebasaba el cuello de su camisa. —¿Qué vas a hacer?-...

La vuelta al mundo

La Unasur, Chávez y el imperialismo

Lula imaginó la Unasur como el punto de partida de un real y efectivo acuerdo de los países de la región. Es probable que sus buenas intenciones hayan sido compartidas por otros mandatarios, porque en definitiva nadie está en desacuerdo con la acción tendiente a que las naciones se pongan de acuerdo para colaborar y ayudarse mutuamente.