Fútbol y política

La Argentina tiene graves problemas por resolver: redistribución de la riqueza, inseguridad, emergencias sanitarias, falta de políticas económicas a largo plazo, crisis energética. Éstos son apenas algunos de los inconvenientes en un país que parece estancado en enfrentamientos estériles que terminan diluyendo cualquier posibilidad histórica de desarrollo.

Argentina: un país de migrantes

Argentina, un país configurado por la inmigración masiva desde Europa a mediados del siglo XIX, ahora hace frente a nuevas realidades migratorias: el incremento de la emigración a Europa y la llegada de inmigrantes de países vecinos.

Al margen de la crónica

Venerables ancianos

En “Las tres edades del hombre”, Tiziano plasma en óleo las épocas de la vida. Dos jóvenes enamorados concentran, sobre la izquierda de la tela, la atención del cuadro; en la derecha, tres niños juegan-...

“Sin pan y sin trabajo”

Ordenando unas fichas de trabajo mientras el ruido desacompasado de la pantalla del televisor actuaba de telón de fondo, cayó en mis manos una reproducción de esa magnífica pintura al óleo que atesora el Museo Nacional de Bellas Artes titulada “Sin pan y sin trabajo”, obra del maestro argentino Ernesto de la Cárcova. Este óleo documenta, con la proverbial excelencia del autor, el drama argentino sempiterno que el título preanuncia, prohijado o soslayado por la atémpora inopia política y social argentina a lo largo de décadas. En la pintura susodicha, la mujer, la esposa y madre, envilecida por el hambre y el desamparo intenta proteger a su macilento bebé, en tanto que el padre, el hombre de la casa, aprieta con rabia impotente las herramientas de su trabajo y muerde su impotencia mientras atisba a través de los sucios vidrios del cubículo que oficia de habitación el despuntar de otro día sin esperanzas, tan amargo como tantos otros. Mientras recorría con la mirada las imágenes, desde la pantalla del televisor comenzaba a retumbar el sobado discurso pregonado por algún aspirante a prócer, léase aprovechado político, heredero del Viejo Vizcacha que “La República Argentina puede producir alimentos para 500 millones de personas”. Pasmado, escuchaba la engolada voz del egregio sujeto que, obviamente, al pontificar hablaba hacia el infinito, no fuera cosa que alguien inopinadamente lo interpelara con un: ¿y por qué no lo hacen? Al momento me pregunté: ¿cómo es posible vocear tamaño despropósito cuando es cosa sabida que en el país productor de alimentos, miles de personas sobreviven escarbando la basura para malvivir? ¿Cuál es la catadura moral de quienes usufructúan todos los privilegios del poder mientras juegan al osito distraído sin sentir remordimiento alguno? Las palabras, los discursos son aire que el viento se lleva y así seguimos. La pobreza, la miseria no son argumentos discursivos para calmar conciencias culposas. Son la madre de todas las desgracias, y no hay coraje cívico para enfrentarla y resolverla. Al fin de cuentas hablar, a destajo, es menos comprometido que hacer.

El Cabildo abierto del 14 de agosto de 1806

Las efemérides escolares ilustran con sus pinceles algunas fechas. No está mal que así lo hagan. El Billiken fue un excelente divulgador de fechas y batallas. El emprendimiento editorial estaba orientado a niños de seis a doce años. Fue eficaz y necesario y no es responsabilidad de sus editores que, luego, personas de treinta o cuarenta años siguieran pensando la historia con los parámetros de esa publicación.

Contrapunto con Natalio Botana

“Hay que evitar el recambio del gobierno por la crisis”

Natalio Botana nos recibe en su casa. Es una reunión amena. Además de ser uno de los politólogos más reconocidos de la Argentina, es un exquisito interlocutor, un hombre capaz de compatibilizar los rigores del conocimiento con el matiz sugestivo de la anécdota y el tono medido del humor, todo ello en un clima de cordialidad y afecto administrado con el talento y la maestría de un señor.