Nuevo reclamo a la empresa Aguas Santafesinas
El Pozo: los desbordes cloacales
son tan viejos como lo es el barrio
Quienes residen entre las manzanas 13 y 14 así como en las inmediaciones de la parada de la Línea 2 reclaman a Assa por los frecuentes desbordes cloacales que ocurren. Aseguran estar cansados de pedir soluciones definitivas.
De la Redacción de El Litoral
Los vecinos de barrio El Pozo están cansados de recurrir a los medios para referir un problema de larga data que se presenta incontables veces al año: los desbordes cloacales en diferentes sectores.
Ante la llamada de algunos vecinos, El Litoral recorrió esta mañana la jurisdicción y conversó con los más afectados, o sea con quienes esta vez deben aguantar los olores nauseabundos y los líquidos frente a sus domicilios. En la intersección de las manzanas 12 y 13, hay un importante derrame cloacal. Lo mismo que frente a la parada de colectivo de la Línea 2.
Cotidiano
Marta vive en la esquina de Giménez de Asúa y Alejandro Greca, donde se delimitan las manzanas 12 y 13. Como damnificada, se mostró sorprendida por la presencia del medio pero no por la postal frente a su casa. “Estoy tan acostumbrada a este olor y a ver la calle inundada de aguas servidas que sinceramente no es ninguna novedad. Es más, lo novedoso sería verla seca, sin la constante emanación de líquidos cloacales por la tapa de la cámara de registro”, dijo la mujer, solidarizándose con otros habitantes del barrio porque aclaró que “varios sectores están en la misma situación, o tal vez peor”.
Cabe señalar que tres semanas atrás, los propios vecinos optaron por cortar la circulación vehicular por Alejandro Greca a raíz de que el agua subía a la vereda cada vez que pasaba un auto.
Frente a la parada de la Línea 2 lo que se puede observar no difiere demasiado. También hay un desborde cloacal pero sobre la vereda de una casa. “Si no fuese por el olor que hay, cualquiera que pase por acá podría pensar que la dueña está baldeando la vereda. Pero no, son líquidos cloacales que no paran de fluir”, dijo un comerciante cercano al problema.
Consultados sobre la realización de reclamos en Assa, las personas consultadas por El Litoral dijeron que fueron muchos pero ninguno con el resultado esperado ya que los derrames siguen estando. “Nadie te da bolilla. Cuando llamás para reclamar te dan un número para conformarte y después no vienen. El problema cloacal en El Pozo es tan antiguo como el barrio y a ninguna autoridad de la empresa parece importarle. Seguramente, si fueran vecinos de este barrio y tendrían que padecer ellos mismos los olores nauseabundos harían algo”, finalizó Rolando.