Datos del Icasfe
Se afianza la recuperación económica
Centro de Estudios y Servicios BCSF
El Índice Compuesto de Actividad de la Provincia de Santa Fe (Icasfe) constituye un indicador de periodicidad mensual que se utiliza para conocer la evolución global de la economía provincial. Por lo tanto, permite determinar las fechas en que se inician y finalizan las recesiones y expansiones de nuestra provincia, monitoreando los principales sectores de su economía.
De acuerdo con los resultados obtenidos en las últimas mediciones correspondientes al mes de febrero de 2010 el Icasfe se ubicó en 140,0, presentando una variación de 0,5% con respecto al mes de enero.
Esta medición confirma la senda de crecimiento que viene marcando el indicador desde septiembre de 2009. El incremento acumulado para el primer bimestre del año fue de 0,9%.
Hace 16 meses que la tasa de variación interanual del Icasfe se mantiene negativa; sin embargo desde agosto de 2009 cambian de sentido acercándose a la línea del 0% a partir de la cual pasaría a mostrar tasas positivas. El valor correspondiente a febrero de 2010 es de -0,6%.
El indicador es elaborado por la Fundación de la Bolsa de Comercio de Santa Fe que preside Eduardo González Kees, y cuyo director ejecutivo es Gustavo Vittori. El director del Centro de Estudios y Servicios es Fabio Arredondo, y su coordinadora María Lucrecia de Jorge. Pedro Cohan y Carolina Sagua completan el equipo de investigadores.
Maquinaria y autos
Entre los sectores colaboraron con la reactivación en estos últimos meses. En primer lugar se destacó el desempeño de la actividad industrial a nivel general, y en particular la producción de maquinaria agrícola y la automotriz.
El comportamiento de la primera variable está correlacionado con el nivel de precios internacionales de commodities, principalmente de soja y sus subproductos.
Por otro lado, en el sector automotor se observaron incrementos tanto en los indicadores de producción como de ventas. La producción de automotores en territorio de la provincia de Santa Fe se incrementó un 72,2% entre todo 2009 y los primeros dos meses de 2010.
Por su parte, la venta de dichos vehículos se incrementó un 33,5% en igual período.
Esta fase recesiva se caracteriza por una disminución de ahorros e incrementos en el consumo minorista (observado en las ventas en supermercados) y en la adquisición de bienes durables (observado en el incremento de patentamiento de vehículos nuevos).
Esto se diferencia del contexto de los primeros meses de recesión, principios de 2008, cuando se retrasaban gastos e inversión y se incrementaban los ahorros. El principal componente que explica este comportamiento es la inflación que, para los primeros dos meses de 2010 acumuló un incremento en el nivel general del 6% y en alimentos del 11%.
Sin embargo, la característica común de estos dos períodos es la incertidumbre que afecta el desarrollo de las decisiones de inversión y producción.
