Privacidad en las redes sociales

Cualquier persona del mundo está a sólo un clic de otra. Más de doscientas páginas dedicadas a establecer contactos son muestra de ello: Facebook, Hi5, My Space, Tuenti o Linkedin. Sin embargo, esta fácil comunicación pone al descubierto problemas de privacidad o, incluso, de suplantación de identidad.

TEXTOS. ÁNGEL VILAR. FOTOS. EFE REPORTAJES.

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Casos de suplantación de personalidad proliferan al amparo de la falta de protección de la identidad en las redes sociales.

 

Las redes sociales se han popularizado en poco tiempo; sirven para conocer gente así como reencontrarse con viejos amigos con los que habían perdido el contacto. La combinación de servicios como Youtube.com con los perfiles de usuario que incorporan imágenes, videos y sonidos, hacen que sean auténticas colecciones de información, álbumes de fotos personales e incluso de diarios íntimos.

Ícaro Moyano Díaz, director de comunicación de Tuenti, una de las redes sociales de más éxito entre la juventud, comenta que la edad media de los usuarios de su red social “ronda los 23 años y 10 meses. A lo largo del último año hemos visto una mayor incorporación de usuarios más mayores que nuestra media”.

MÁS CONTROL

El problema viene cuando la gente puede acceder a contenidos que no desean que sean vistos más que por amigos cercanos. Aquí surge el primero de los problemas de privacidad de las redes sociales. En los perfiles se almacenan detalles personales, números de teléfono, fechas de nacimiento, etc., que pueden ser utilizados por delincuentes.

“El spam es uno de los principales métodos de distribución empleados para conseguir contraseñas. A través de mensajes que se envían de forma masiva, como facturas o notificaciones de servicios de mensajería falsas, se engaña a los usuarios para que abran documentos adjuntos supuestamente auténticos y, de esta forma, ejecuten archivos que ponen en peligro sus sistemas”, afirma Pedro Gorbe, director de sistemas de AXPE Consulting.

Después de varias cartas abiertas al fundador de Facebook, Mark Zuckerberg finalmente escuchó las demandas. Su red social, creada hace seis años y que ha alcanzado los quinientos millones de usuarios, ha sido blanco de críticas en los últimos meses por sus confusas políticas de privacidad y por problemas técnicos que expusieron los datos privados de los usuarios.

Para Pedro Gorbe, de Axpe Consulting, empresa especializada en Seguridad, “con el auge de las redes sociales, los peligros más destacados de esta falta de confidencialidad se multiplican; la posibilidad de cruzar datos para desvelar una situación personal o profesional, desvirtualizar la imagen personal o empresarial perjudican el derecho al honor, es una violación a la reputación de una persona o entidad”.

Desde diciembre de 2009 se están llevando a cabo nuevas medidas de seguridad y el 26 de mayo pasado se anunciaron otras más que, además, hacen más fácil al usuario el control de contenidos. Así, el cliente empieza a tener más poder sobre qué y quién ve los contenidos que sube (o suben por él) a esta red.

A pesar de ello, si un amigo se conecta a una aplicación o sitio web externos, éstos podrán recabar automáticamente información como nombre, fotografía de perfil, sexo, ID de usuario y aquella información que el usuario comparta con “todos”, aunque no la lista de amigos. Por otro lado, aplicaciones como Facewho permiten ver la lista de amigos incluso sin que el usuario esté conectado.

Otras redes sociales son MySpace o Twitter, esta última menos centrada en compartir contenidos como fotos y agrupaciones y más enfocada a compartir lo que uno hace, leer noticias o enterarse de cotilleos, de ahí que Twitter esté teniendo mucho éxito entre los famosos, que comentan su vida privada directamente con sus seguidores al margen de revistas sensacionalistas. Además, es una de las pocas redes sociales que verifica la identidad de las celebridades.

Hay algunos casos, como el de Tuenti, que son especiales: su privacidad se encuentra en uno de los estándares más altos, hasta el punto de que sólo se puede entrar en la red a través de invitación de uno de sus usuarios. Para su director de comunicación, Ícaro Moyano, esta es una medida de seguridad y privacidad de cara al usuario. “Es fundamental mantener las estructuras de privacidad en el punto más garantista para nuestra comunidad. Además, no indexamos contenidos personales en buscadores”. Una práctica que si lleva a cabo Facebook.

El director de comunicación de Tuenti admite que se producen una seis mil incidencias diarias que pueden ir desde que alguien no quiera impedir la publicación de una foto suya hasta la suplantación de identidad de un perfil. “Mantener el hilo directo con los usuarios ante cualquier reporte es fundamental para garantizar la mejor calidad del servicio. Los movimientos del resto de redes sociales simplificando sus modelos de privacidad demuestran que nosotros teníamos razón. Por eso lo hicimos hace años”, asegura.

Moyano advierte de la gran cantidad de información que se gestiona. “Al día se suben 2,4 millones de fotos, se visualizan unos 6 millones de vídeo y se intercambian unos 110 millones de mensajes”.

BÚSQUEDA DE EMPLEO

En cuanto a las empresas, ojear perfiles de Facebook o Linkedin para el reclutamiento de candidatos empieza a ser una práctica habitual. Su interés se centra en conocer el perfil psicológico del candidato y verificar en la medida de lo posible su currículum. “Según estudios realizados por portales de empleo, más de un 35% de las empresas estudiadas han rechazado algún perfil inscrito a sus ofertas de trabajo tras ver sus fotos en Facebook o MySpace”, comenta el experto Pedro Gorbe.

“En Axpe Consulting, si un candidato tiene un perfil en una red social con aspectos negativos, puede resultarle contraproducente de cara a su contratación; las grandes empresas exigimos un gran nivel de seriedad”, explica Gorbe.

Por otro lado el derecho a la privacidad es un bien jurídico y estas empresas sólo ven aquel contenido público que el usuario comparte, además hay que tener en cuenta otros fenómenos más peligrosos como la suplantación de identidad por parte de delincuentes.

“Los propios usuarios debemos ser conscientes de la información que compartimos ya que la falta de medidas de seguridad oportunas puede ser la causa del uso indebido de dichos datos por parte de terceros”, incide el experto de Axpe.

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Mark Zuckerberg, creador de Facebook, apostaba por menor privacidad pero cedió a las peticiones de los usuarios.

USO RESPONSABLE

En el mercado negro se pueden comprar datos personales de perfiles de Facebook o MySpace, por poco más de un euro; por seis se puede adquirir un listado con treinta mil direcciones de correo electrónico para enviar Spam, mientras que adquirir datos bancarios de un cliente cuesta unos 44 euros. “En el perfil de las redes sociales siempre es preferible un avatar y no una imagen real. Jamás se deben subir a la Red fotografías de las que más tarde nos podamos arrepentir” asegura Manuel Alcalde, jefe del Grupo de Delitos Tecnológicos de la Jefatura Superior de Policía de Madrid (España), aunque añade que las redes sociales no son peligrosas de por si; “todo depende del uso que hagamos de ellas. Cualquiera puede copiar una foto de nuestro perfil y colocarla después con nuestro nombre en una página de contactos”.

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celebridades de toda índole han sucumbido a la “twitermanía”.

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Pedro Gorbe, director de sistemas de Axpe Consulting y experto en seguridad.