Estará ubicado en 9 de Julio 2852
El edificio de la primaria de la UNL será moderno y funcional
Imágenes digitales de cómo quedará el contrafrente de la escuela primaria de la Universidad Nacional del Litoral. Foto: Archivo
El proyecto fue aprobado esta semana por el Consejo Superior de la UNL. La propuesta establece la adaptación, mejora y crecimiento de la planta baja y los dos primeros pisos del edificio que actualmente es ocupado por la Obra Social de la UNL y las cocheras.
Prensa UNL - El Litoral
Con una inversión de $ 1.200.000 en obras, el Consejo Superior de la Universidad Nacional del Litoral (UNL) aprobó esta semana, la refuncionalización del edificio -que en la actualidad ocupa la Obra Social en 9 de Julio 2852- para albergar la estructura de la escuela primaria que hasta ahora funciona en un local alquilado por bulevar.
La escuela primaria de la UNL tendrá su propio edificio a partir de 2011, ya que las adaptaciones y mejores necesarias se harán dentro de los 3 meses que dura el receso académico.
El terreno en el que se emplazará la escuela tiene 1.500 metros cuadrados y contará, en una primera etapa de ejecución, con el desmantelamiento del edificio de la Obra Social y las cocheras. Así se tendrá la posibilidad de alcanzar 14 aulas con capacidad para 30 alumnos cada una, de generar espacios administrativos y de dirección estratégicamente ubicados, un salón de usos múltiples y servicios complementarios, patios unidos con las aulas por escaleras amplias y de buena circulación y halls.
El director de Obras y Servicios Centralizados de la UNL, Arq. Marcelo Saba, señaló que “la idea general del proyecto es, de alguna manera, poner en valor el edificio original que consideramos tiene valor patrimonial. Es un inmueble de 50 años de antigüedad con una fachada moderna; allí siempre funcionó la Obra Social de la UNL”.
El arquitecto destacó que ese local -hoy tasado en $ 3,5 millones- se construyó en su momento con el sistema de “planta libre”, esto es, con tabiquería movible y adaptable a las necesidades de espacio. “Para esa época, esto era algo muy novedoso, y esa característica nos permitió la posibilidad de trabajar muy cómodos en el diseño de un inmueble propio para la escuela primaria”.
Saba calificó que el nuevo edificio “será moderno y funcional”, y que en el proyecto primó el desarrollo de las 14 aulas que dan todas a la calle. “El sistema de halles con ascensor y escalera es una incorporación a la estructura existente. También tiene una pared completamente de vidrio sobre el contrafrente”.
El arquitecto destacó que los sanitarios están pensados para niños, niñas y docentes, y se construirá un baño para personas con capacidades diferentes en cada piso. “En la parte trasera nos encontramos con un galpón armado con cabreadas metálicas en muy buen estado, que lo vamos a refuncionalizar como salón de usos múltiples”, aportó.
El secundario
También se prevé una segunda etapa, que acompañará a la futura creación de la escuela secundaria de la UNL. Consiste en el desmantelamiento de la edificación que actualmente ocupa la imprenta para obtener una superficie libre de terreno y permitir la construcción de un bloque edilicio de funcionamiento independiente respecto al de la escuela primaria.
El edificio liberará la planta baja con el objetivo de generar una expansión semicubierta de uso común y resuelve, en dos niveles, 12 aulas con capacidad para 30 alumnos cada una, junto a aulas especiales, áreas administrativas y servicios de apoyo.
Apoyo
Tanto en su rol de consejera docente, como en el de madre de una alumna de la escuela, María Victoria Acosta fue la primera en tomar la palabra el jueves por la tarde, durante la sesión del Consejo Superior de la UNL, y apoyar decididamente la iniciativa. Pidió el apoyo de todo el órgano de gobierno y destacó la impronta que dejó y deja la escuela primaria en la ciudad de Santa Fe, a partir de su creación hace cinco años.
“La universidad apuesta a la educación”, manifestó Liliana Paiz y aseguró que también “da respuesta a todos estos padres que están en este recinto, porque muchas veces se dice que los padres de ahora no se comprometen en la educación de sus hijos. Y estos padres demuestran que no es así”.
El decano de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo, Miguel Irigoyen, dijo que con “este proyecto estamos buscando y encontrando una solución” y su par de Ciencias Jurídicas y Sociales, José Benvenuti, afirmó que con esta concreción “la Universidad ha demostrado que con más ganas que con dinero, ha avanzado notablemente. Y en estos 27 años de democracia la UNL ha cambiado radicalmente”.
Por último, Federico Eberhardt dijo que se siente parte de la UNL con sus más de 30 años de trabajo en la docencia y aseguró que a través de este proyecto muchos niños “desde muy pequeños ya se sienten parte de la universidad” y alentó a los padres “a que nos acompañen en esta tarea”.
