Cuando los animales sirven de terapia

con un notable grado de eficacia, se realiza en santo tomé una experiencia de zooterapia para la prevención y tratamiento de las personas discapacitadas.

TEXTO. REVISTA NOSOTROS. FOTOS. MAURICIO GARÍN.

En el club Alianza de Santo Tomé se lleva a cabo todos los sábados, de 11 a 12 del mediodía, una actividad denominada “zooterapia” o terapia con animales, una metodología diferente en la cual se utilizan, precisamente, a los animales en la prevención y tratamiento de las personas discapacitadas.

El grupo de trabajo está integrado por tres licenciadas de educación especial, una estudiante avanzada de kinesiología, además de un veterinario. Se trata de Silvia Díaz, que es la responsable y coordinadora del proyecto; Ivana Gon, Fernanda Chiapello y Luciana Guanca.

El objetivo es que el animal sirva de nexo entre el paciente y el terapeuta y de esta manera despertar el interés y realizar la actividad de manera más placentera. En este ámbito existen distintas modalidades: la equinoterapia (con caballos), la canoterapia (con perros) y también la terapia con animales pequeños, que son los de granja. Por el momento, se utilizan las últimas dos, aunque Silvia Díaz e Ivana Gon, en diálogo con Nosotros, afirmaron que en un futuro la idea es anexar la equinoterapia.

DESTINATARIOS

Quienes concurren son discapacitados mentales, físicos y sociales, comprendiendo en esta última categoría a quienes poseen dificultades de adaptación a grupos, problemas de agresividad, etcétera. “Nosotros recibimos chicos a partir de los 3 años, jóvenes y también adultos”

“La finalidad -explica- es que a través del juego y el contacto directo con el animal, la persona logre superar inhibiciones, valore experiencias propias y la de los otros, adquiera seguridad, responsabilidad, sociabilización, además de recrearse y rehabilitarse”, señalan.

En el caso de Silvia Díaz, comenta que “lo inicié en la escuela 2.032 de Santo Tomé. En ese momento recibimos la orientación de la Facultad de Ciencias Veterinarias y después hice la capacitación de zooterapia en Buenos Aires. Al obtenerse resultados positivos e importantes, resolvimos abrirlo a la sociedad y por eso estamos en el club Alianza desde hace algunos meses”.

En el caso de las actividades que se realizan en la escuela 2.032, Díaz destaca que “tuvimos la ayuda de la diputada Nidia Goncebat, que nos suministra fondos para los gastos ya que las actividades se hacen en la escuela, en el camping municipal y salidas a otras localidades, siempre dentro del mismo proyecto que, en en su momento, fue reconocido por la Cámara de Diputados de la provincia”.

LA SELECCIÓN

Faltaba el lugar físico y se abrieron las puertas del club Alianza para llevar a cabo la ampliación de las actividades. “Los perros tienen que estar adiestrados, se les toma una evaluación y se los selecciona. Se utiliza el test de Campbell, que tiene en cuenta la sensibilización y sociabilización del animal, que no necesariamente tiene que ser de raza. Pero esta evaluación es la que nos permite determinar si es apto o no para la terapia”.

Fue importante el apoyo de la Mutual Franck, sobre todo en lo que se refiere a la capacitación de Silvia Díaz en Buenos Aires.

Los perros, las personas con distintas discapacidades y las profesoras especialistas en este tipo de tratamientos que, aseguran, brinda excelentes resultados.