Aumento de la canasta universitaria

Estudiar en la ciudad de Santa Fe cuesta un 24 % más que en 2010

Quien llega del interior a comenzar una carrera universitaria necesita 2.481 pesos. El año pasado ese monto era de 2.004 pesos.

 
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Prensa UNL - El Litoral

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De acuerdo a un relevamiento de costos realizado por el Observatorio Social de la Universidad Nacional del Litoral (UNL), la canasta universitaria subió un 23,8 % en un año. Es decir, en febrero de 2010 un estudiante tenía que invertir 2.004 pesos por mes y en febrero de este año ese monto asciende a 2.481 pesos.

A su vez, si se toma el costo de la canasta universitaria en 2004, el porcentaje de aumento es del 340 %, ya que el costo universitario por ese entonces era de 564 pesos.

El relevamiento incluyó como variables de medición el costo promedio de alquileres (más impuestos y expensas), comida, electricidad y gas, material de estudio, atención médica y transporte, entre otros gastos. Se tomó como base un estudiante que llega desde el interior de la provincia o de provincias vecinas y que tiene que radicarse en la ciudad.

El alquiler de departamentos sigue representando el gasto más importante de esta canasta. Este año el promedio de alquiler de un departamento de una habitación en lo que se denomina “entre bulevares”, más impuestos y expensas es de 1.033 pesos. Sin embargo, en este rubro se da un dato curioso, que es que bajó el costo con respecto al año anterior. En 2010 el promedio era de 1.050 pesos. Para obtener este número el observatorio relevó los precios de diez inmobiliarias de la ciudad. De todas maneras, muchos de los jóvenes que arriban a la ciudad capital, buscan compañeros de vivienda con los cuales compartir los gastos.

Comer, viajar y la salud

Otros de los rubros que más gastos genera a un estudiante es la comida. Según el trabajo, este año una persona tiene que sacar de su bolsillo 906 pesos por mes para comer más gastos de electricidad y gas. El relevamiento contempla cuatro comidas diarias (desayuno, almuerzo, merienda y cena más gas y electricidad) preparadas en casa y según menú semanal sugerido por un nutricionista. Este es uno de los rubros que más aumentó en el transcurso de un año, porque en 2010 el costo era de 580 pesos.

Otro de los gastos, que la mayoría de las veces se hace inevitable, es el transporte público. Por una parte el traslado que necesitan los alumnos para llegar desde su lugar de residencia hasta las facultades donde estudian. En febrero de 2010 el boleto de colectivos costaba 1,80 pesos; sin embargo, un mes después pasó a costar 2 pesos. Similar situación se produjo de febrero a marzo de 2011: pasó de 2 pesos a 2.30 pesos. A este gasto se le suman dos boletos interurbanos que el estudiante gasta para volver a su lugar de origen al menos una vez al mes. El consumo mensual de transporte entonces alcanzaría el monto de 147 pesos.

En materia de salud los estudiantes cuentan con planes especialmente ajustados a sus requerimientos. La UNL posee un convenio con la empresa Nueva Medicina que realiza descuentos en planes a jóvenes estudiantes de esta casa de estudios. Este año el monto de cobertura de salud es de 83 pesos.

Material de estudio

Los materiales de estudio también tienen impacto en la canasta universitaria. El costo de 500 fotocopias doble fax y sin anillar más algunos artículos de librería indispensables para el cursado suma 83 pesos. Otras de las necesidades que tienen los estudiantes es la limpieza e higiene, el acceso a Internet, y la recreación. Por un lado, el gasto de limpieza e higiene mensual calculado por el Observatorio en base a consultas realizadas a 50 estudiantes de esta casa es de 48 pesos. En recreación un joven puede gastar en promedio 102 pesos mensuales, mientras que en acceso a Internet en un ciber invierten 80 pesos.

La metodología

Este relevamiento periodístico de la canasta universitaria se viene realizando desde 2004, en una primera instancia, por el periódico El Paraninfo de la UNL. La metodología usada en primera instancia fue recurrir a un indicador simple de precios basados en una canasta de artículos ideal o promedio de un joven que llega desde una ciudad o pueblo del interior a estudiar a Santa Fe.

Para los años siguientes se tomaron las mismas variables y se compararon los precios de manera directa. El año pasado y este año el Observatorio Social de la UNL se encargó de realizar el trabajo.