La cifra ronda los 32 millones de pesos

La Nación debe seis meses de aporte a comedores escolares

Firme reclamo de la Federación de Cooperadoras Escolares al gobierno nacional.

De la Redacción de El Litoral

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El gobierno nacional, a través del Ministerio de Desarrollo Social, adeuda 6 meses de aportes correspondientes al Plan Refuerzo Nutricional, que es un suplemento monetario destinado a los almuerzos y copas de leche que se ofrecen en los comedores escolares de gestión oficial. La deuda alcanza los 32 millones de pesos y fue denunciada esta mañana por la Federación de Asociaciones Cooperadoras Escolares del Departamento La Capital.

“Queremos realizar este reclamo público porque en todo lo que va del año no se ha percibido ningún tipo de aporte por parte de la Nación”, planteó Juan Villafañe, presidente de la Federación de Cooperadoras durante la conferencia de prensa realizada en Hipólito Yrigoyen al 2400, sede de la entidad.

A pesar de reclamar por el envío de estos fondos en marzo pasado, mediante una nota, la entidad no recibió respuesta de cuando serán remitidos. “Creemos que esta situación va en desmedro de la calidad del servicio y atenta a un bien tutelado como el acceso a una alimentación digna de la población escolar, además de generar deudas de las escuelas con sus proveedores”, aseguró Villafañe.

El Ministerio de Desarrollo Social envía a las provincias un “refuerzo” de $ 0,75 por cada ración de comedor y de $ 0,24 por copa de leche, que se suma a las partidas provinciales ($ 2,35 y $ 0,80, respectivamente). Cabe destacar que en Santa Fe los comedores escolares distribuyen 183.048 almuerzos y 429.197 copas de leche.

Si se tiene en cuenta un promedio mensual de 22 días hábiles y los 6 meses de atraso, se calcula esa deuda en, aproximadamente, 32 millones de pesos, según el cálculo de los cooperadores.

Las partidas que el Ministerio de Desarrollo Social envía a las provincias para reforzar la dieta escolar históricamente presenta atrasos. “Siempre se demora 2 ó 3 meses y luego manda las partidas correspondiente a dos meses juntos. Pero es poco habitual que el retraso alcance al medio año”, consideró.

Explicó que “esta situación complica mucho a las escuelas porque las partidas para comedor ya de por sí son insuficientes. Hace unos meses habíamos planteado a la Nación la necesidad de ajustar el mecanismo para recibir los fondos a tiempo”.

¿Trasfondo político?

Consultado sobre las causas de esta demora, el cooperador resaltó que la Nación y la provincia firman acuerdos anuales para la transferencia de estos fondos que se depositan en las cuentas bancarias de las escuelas. “Según lo que pudimos recabar, el Ministerio de Educación de la provincia remitió en tiempo y forma los requisitos para la suscripción del convenio respectivo con el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación. Sabemos también que ese convenio no se firmó, pero desconocemos la justificación”, resaltó Villafañe.

A su lado, otro miembro de la Federación de Cooperadora infirió que podría haber un trasfondo político en todo esto. “¿Cómo puede ser que haya provincias que sí están recibiendo el refuerzo en tiempo y forma? A pocos kilómetros, Entre Ríos recibe estos aportes, mientras Santa Fe sigue esperando”, lanzó.

Problemas

El déficit genera problemas a las escuelas que además de educar cumplen con la función social de alimentar a sus alumnos. “Sin ese refuerzo nutricional se nos hace muy difícil mantener el servicio tal cual lo estipula el manual operativo de comedores. Con el aporte de la provincia no alcanza, por lo que este atraso en las partidas nacionales nos obliga a endeudarnos para dar de comer a los chicos”, dijo la cooperadora de una escuela especial de Recreo.

“Encima, la tarjeta de débito que se implementó hace poco, nos complica la tarea porque no todos los proveedores tienen posnet para poder cobrarse, así que debemos comprarles a los que sí tienen esa máquina y que nos cobran más caro”, explicó.

Otra mujer, que representa a las escuela Nº 264 de nuestra ciudad, comentó que allí los alumnos se alimentan con dieta seca. “Ahí no hay escape, porque no podemos variar el menú de acuerdo a la mayor o menor disponibilidad de dinero”, planteó.