Entre Provincia y Nación

Avances en las gestiones para recuperar el Correo

En los próximos días, el edificio pasaría a manos del gobierno provincial. La UNL ya presentó el proyecto para su refuncionalización. Se instalarían oficinas de Vivienda, API, Cultura del municipio, Audiovisual de la Universidad y un Museo del Correo.

Venido a menos. El correo tiene problemas de corrosión en el frente y hay humedad, filtraciones y grietas en el interior del edificio.

De la Redacción de El Litoral

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Luego de más de 20 años de abandono, las gestiones para recuperar el emblemático edificio del Correo Argentino (sobre 27 de Febrero) ingresan en su etapa final. Varias fuentes confirmaron a El Litoral que en los próximos días se firmaría el convenio por el que la Nación cedería el inmueble a la Provincia.

Recientemente, el gobernador Antonio Bonfatti aseguró ante un grupo de periodistas que están avanzadas las correspondientes gestiones con la Nación. Lo mismo sostuvo el intendente José Corral esta mañana por Radio LT 10. Una vez concluidas las negociaciones, se iniciaría la recuperación del edificio.

La Facultad de Arquitectura de la Universidad Nacional del Litoral (UNL) realizó, a pedido de la gestión municipal anterior, un informe sobre el estado de la construcción y un proyecto para su refuncionalización (ver “Un edificio abandonado y deteriorado”).

¿Qué uso se le dará al inmueble? En declaraciones radiales, el intendente Corral adelantó que la Provincia lo utilizaría para el Ministerio Público fiscal, para el API y para trasladar las casillas de la Dirección de Vivienda que están al sur de Casa de Gobierno. El municipio trasladaría la gestión cultural a las áreas que dan a calle Rivadavia.

“Tenemos pensado transformarlo en un nuevo frente, respetando su valor patrimonial y su estilo. Este espacio le permitiría al área de Cultura trasladarse a un lugar mejor, ya que el actual es inadecuado porque es un edificio de muchos años”, explicó Corral, esta mañana. “Es probable, además, que la Universidad tenga la posibilidad de usar algunas dependencias para el desarrollo de su área audiovisual”, agregó el intendente.

Además, la Federación de Obreros y Empleados de Correos y Telecomunicaciones (Foecyt) propuso armar un Museo del Correo en la ciudad.

Un edificio abandonado y deteriorado

El 29 de marzo de 2010, El Litoral publicó una nota sobre el estado del edificio: “Prácticamente vacío, sumido en el abandono y con serias patologías edilicias”.

Un minucioso informe de especialistas de la Facultad de Arquitectura de la UNL testimonia sus principales falencias, en su interior y en la fachada. La humedad por filtraciones, las grietas y la oxidación de las aberturas ocasionaron daños a la noble estructura.

“El edificio se encuentra en un avanzado estado de deterioro, sobre todo en las envolventes externas”, reza el informe que la UNL preparó para el municipio. De todos modos, reconoce como potencialidad “el hecho de que no existan alteraciones importantes y se conserve un alto grado de originalidad”.

“En el edificio, hay dos elementos que han sufrido procesos de oxidación y corrosión: las carpinterías de chapa plegada que constituyen la totalidad de las aberturas y las chapas acanaladas utilizadas como cerramiento en el basamento de las aberturas de la fachada este”, dice el informe.

Las veredas no escapan al estado de deterioro generalizado: el relevamiento señala que presentan numerosas lesiones, como faltantes, agrietamientos, hundimientos, roturas, parches de reposición y suciedad.

En el interior, la humedad en cielorrasos y paredes se reproduce prácticamente en todos los pisos y tiene origen en la filtración de agua, proveniente de cañerías de servicios sanitarios o calderas. Esto generó desprendimientos de las terminaciones de yeso y revoques, y se oxidaron marcos y chapas.

En algunos sectores, se observan grietas y fisuras. Los pisos también sufrieron el paso del tiempo. Hay piezas gastadas, rotas o agrietadas y muchas faltantes.

Finalmente, el informe revela el estado deplorable de los sanitarios y recomienda cambiar azulejos de revestimiento, mosaicos de pisos y artefactos.

A simple vista. La humedad y las filtraciones oxidaron las chapas del frente que conforman las aberturas. Foto: Archivo El Litoral.

Un paradigma de la arquitectura funcionalista

El edificio de Correos y Telecomunicaciones de Santa Fe fue diseñado por los arquitectos José María Spencer y Walter Finkbeiner e inaugurado el 25 de mayo de 1959. Fue una construcción moderna para la época. “Su excepcionalidad se funda en la cuidada adopción de preceptos funcionalistas, con claras citas a la arquitectura corbuseriana, manifiestas en su partido arquitectónico, planta libre, aventanamientos corridos, parasoles, marquesinas y decoración mural”, escribieron en El Litoral las arquitectas María Laura Bertuzzi y Cecilia Parera.