Sectores

Primer remezón de la crisis

En el último cuatrimestre de 2011, el desempeño industrial promedio cayó en picada, arrastrado por el sector automotor. Los primeros datos de enero no mejoran las perspectivas.

Félix Canale

[email protected]

Durante el mes de diciembre, la industria volvió a mostrar un acentuado retroceso de 1,8 por ciento con respecto a noviembre. Con esta cifra, el mes cerró con una exigua expansión de 0,7 %, la más baja desde la salida de la crisis de 2009.

La estadística, proveniente del Centro de Estudios de la Unión Industrial Argentina, indica que el crecimiento anual del sector manufacturero en 2011 promedió el 7,1 por ciento; 5,3 puntos porcentuales menos que en 2010.

La desaceleración de diciembre, con una tasa de crecimiento inferior con respecto al promedio del año, se explicó por la caída interanual del rubro automotor (-20,5 %) debido fundamentalmente a la menor demanda del mercado brasileño y una base de comparación muy alta, diciembre de 2011, que fue un mes récord de producción.

La tendencia declinante que se observa desde junio, abre un interrogante sobre lo que puede suceder en los meses venideros, teniendo en cuenta que el sector automotor es clave en el comportamiento industrial.

Las terminales volvieron a registrar en enero una disminución de 11,5 % interanual en la producción y de casi 38 por ciento en las exportaciones, de acuerdo a las cifras de Adefa. La contracción de las exportaciones es relevante, ya que la de la producción total de 2011 (828.771 unidades), el 61 % fue vendido en el exterior.

Los bloques

Ante la pérdida de fuerza del sector automotor, los bloques industriales que incidieron decisivamente en el parvo crecimiento de diciembre fueron el metalmecánico (13 %) y sustancias y productos químicos (8,4 %).

Pero al margen de estos buenos números, el resto de la industria promedió una discreta expansión de 1,4 %, con fuerte heterogeneidad, en donde se continúa observando la contracción del sector textil, caucho y plástico y un crecimiento moderado de alimentos y bebidas, con fuertes diferencias entre los subrubros que lo componen.

A diferencia de lo ocurrido en diciembre, y considerando el acumulado del año 2011, fue la industria automotriz (+15 %) la que lideró el crecimiento anual de 7,1 %, pero seguida muy de cerca por la metalmecánica (+11,3 %), y más atrás los minerales no metálicos (9,8 %), mientras sustancias y productos químicos crecieron un 4,8 % y alimentos y bebidas un 3,2 %.

Tendencias

De hecho, 2011 cerró con claras diferencias entre el primer y segundo semestre. En el primero, el crecimiento promedio fue de 9,3 % interanual, en tanto en el segundo ese promedio se ubicó en 5,3 por ciento. De acuerdo con estimaciones privadas el desempeño industrial de 2012 podría tener un crecimiento de entre 4 y 6 por ciento, más o menos en línea (encuesta de Bloomberg) con la expansión de la actividad económica prevista en alrededor 5 % para el año en curso.

Una segunda diferencia entre los semestres, es el cambio entre los sectores que lideran la expansión. En los primeros 6 meses, la estrella fue la industria automotriz con 27 % de incremento en su producción, seguida por minerales no metálicos (+11,6 %) y metalmecánica (+11,0%). En el segundo semestre, las actividades que lideraron el crecimiento fueron la metalmecánica (+11,5 %), minerales no metálicos (+8,2%) y sustancias y productos químicos (+7,5%). El sector automotor creció apenas 5,4 % en dicho período.

Es probable que en algún momento la industria automotriz recupere protagonismo, pero en tanto el sector metalmecánico parece estarse instalando como otro de los tractores fundamentales, sobre todo teniendo en cuenta su relación con los bienes de capital y las modificaciones legales previstas para este último rubro (ver recuadro).

Empleo

Para la UIA la heterogeneidad del crecimiento conlleva un rezago en la evolución del empleo industrial. Si bien en 2011, la elasticidad empleo-producto exhibió una mejora respecto de 2010, ésta se mantiene todavía por debajo de la observada entre los años 2003 y 2008.

Aquí vale consignar un informe de Sel Consultores, de acuerdo con el cual en 2008 con un crecimiento del PIB de 6,8 %, el incremento del empleo privado registrado fue de 6,4 %; en 2010, con un alza del PIB de 9,1 %, mientras que el número de asalariados privados registrados creció sólo 2,6 %. Esta retracción empieza a verse como estructural.

Afinando los números, la UIA informó que durante el cuarto trimestre de 2011 las horas trabajadas y los obreros industriales ocupados arrojaron una suba de 2,9 % en comparación con el mismo trimestre de 2010. Con este resultado, el acumulado del año exhibió un incremento de horas trabajadas y de obreros ocupados de 3,1 % y 2,6 % respectivamente.

Aun así, existe un rezago en la creación de empleo que la UIA atribuye, en parte, a las características del patrón de crecimiento actual, liderado por sectores intensivos en capital. Pero por otra parte aunque la UIA no lo especifique a que las Pymes no pueden asumir más compromisos salariales.

Desempeño industrial Diciembre 2011 2.pdf

Nuevo régimen para bienes de capital

De acuerdo con fuentes del Ministerio de Industria, el gobierno prevé establecer a partir del 30 de abril un arancel de 14 por ciento para la importación de bienes de capital, que hasta el momento estaban exentos de cargas fiscales.

En paralelo, se eliminaría el IVA reducido de 10,5 % para la importación de algunos de esos bienes y se aplicaría una tasa lineal de 21 por ciento.

El argumento oficial para aplicar estas modificaciones es que defienden la industria nacional de bienes de capital de la competencia desleal externa, en un momento de crisis internacional y sobreoferta de productos a precios de dumping.

La primera reacción de las empresas que importan bienes de capital es argumentar que las nuevas tasas encarecerán la adquisición de bienes, imprescindibles para que determinadas industrias mantengan sus actuales ritmos de producción.

Por su parte, desde el sector metalmecánico afirman que están en capacidad de incrementar la oferta de bienes de capital de origen nacional, máxime si se concreta la creación de un fondo de 2.700 millones de pesos para la promoción de ese rubro específico. Este fondo reemplazaría al actual régimen del bono fiscal del 14 % de la facturación, que se utiliza para la cancelación de impuestos nacionales.

La torta que está en juego es muy grande: en 2011, las importaciones de bienes de capital sumaron 14.521 millones de dólares y las de partes y accesorios para bienes de capital 14.367 millones, con un crecimiento, en ambos casos, de 25 % con respecto a 2010.

+ información

Documento de la UIA

http://blogs.ellitoral.com/empresariosyempresas/.