Se exponen en el Museo Municipal de Artes Visuales

Fotomontajes surrealistas de Grete Stern

La colección completa “Los sueños” de la fotógrafa alemana se inaugurará el viernes 13, a las 20.30, en el Museo Municipal de Artes Visuales. El investigador Luis Priamo, curador de la muestra, ofrecerá una visita guiada el sábado 14 en el marco de “La noche de los museos”. Organizan la Municipalidad, UNL y Litoral Agrupación Psicoanalítica de Santa Fe.

La nota

“Los sueños de autorreproche”. Idilio Nº 119 27/2/1951

De la redacción de El Litoral

El Museo Municipal de Artes Visuales Sor Josefa Díaz y Clucellas consagrará sus salas al idilio surrealista de los fotomontajes de Grete Stern. Titulada “Sueños. Fotomontajes de Grete Stern. Serie Completa. Edición de la obra impresa en la Revista Idilio (1948-1951)”, la exposición presenta la colección de fotomontajes de la serie “Sueños” que la fotógrafa alemana publicó entre 1948 y 1951 en la página “El psicoanálisis le ayudará” de la revista Idilio (editorial Abril), producción clave de la vanguardia fotográfica en la Argentina.

En síntesis, los fotomontajes surgían del análisis de los sueños que las propias lectoras enviaban a la redacción, interpretados por el sociólogo Gino Germani -director de Idilio-, que firmaba sus notas con el seudónimo de Richard Rest. La colaboración duró alrededor de tres años y se publicaron cerca de 150 trabajos. Durante el primer año, Grete fotografió casi todos los fotomontajes antes de entregarlos. Luego abandonó esa rutina y, por eso, en la actualidad sólo se conservan 46 negativos.

La exposición, que se inaugurará el próximo viernes a las 20.30, cuenta con la curaduría de Luis Priamo; este investigador de fotografía antigua trabajó con Stern durante cinco años (1992-1997) en un proyecto de conservación de fotografías de la Fundación Antorchas. Vale destacar que el sábado, a las 20, en el marco de “La noche de los museos” Priamo ofrecerá una visita guiada en la que abordará la génesis y los conceptos de la obra de esta artista fuera de serie. Desde entonces, la exposición podrá visitarse de forma libre y gratuita hasta el lunes 7 de mayo.

Grete Stern (1904-1999)

En el texto curatorial que redactó especialmente para esta exposición, Priamo explica: “Grete Stern, fotógrafa argentina, como le gustaba definirse, nació en Wuppertal-Elberfeld, Alemania. De 1923 a 1925 estudió dibujo y tipografía en la Escuela de Artes Aplicadas de Stuttgart. En 1927 se trasladó a Berlín y tomó cursos de fotografía con Walter Peterhans. Dos años después, con Ellen Auerbach, amiga y condiscípula, creó el estudio de fotografía comercial ringl + pit. En 1932-1933 estudió durante dos semestres en el taller de fotografía de la Bauhaus, que daba Peterhans, donde conoció a su futuro esposo, Horacio Coppola. En 1934, poco después de que los nazis tomaran el poder, Grete y Coppola emigraron a Londres. Allí se casaron y en 1935 se trasladaron a Buenos Aires. Ese mismo año, inauguraron en la sede de la revista Sur lo que hoy se considera la primera exposición de fotografía moderna en el país. Al año siguiente, después de una breve estadía en Londres para cerrar definitivamente su estudio, Grete volvió a la Argentina, donde residió hasta su muerte, en 1999.

“Integrada a la vida cultural porteña, paulatinamente fue afianzando su actividad profesional, que abarcó no sólo fotografía, sino diseño gráfico. En 1943, se trasladó con su familia a Ramos Mejía, y muy pronto su casa fue centro de reuniones semanales de jóvenes artistas porteños de vanguardia, a los que ella ofreció su biblioteca y experiencia europea. Una de las primeras exposiciones organizadas por el Grupo Madí, en 1945, se realizó allí. En 1956, organizó el taller fotográfico del Museo Nacional de Bellas Artes, convocada por su director, Jorge Romero Brest, donde aplicó la fotografía científica al servicio de la restauración de arte, retirándose en 1970.

“La obra fotográfica que Grete desarrolló en nuestro país desde que llegó hasta que abandonó el oficio en 1985, por una pérdida de visión que le impedía trabajar, es de una riqueza, variedad y profundidad ejemplares. Al principio se dedicó intensamente al retrato, por lo cual se la vinculó más tarde erróneamente a este género de un modo poco menos que exclusivo. Empero, su obra fotográfica sensible, honda y sutil, recorrió el estudio del paisaje, tanto natural como urbano, el reportaje social de largo aliento, la composición publicitaria, la naturaleza muerta o bodegón y el fotomontaje, con la misma precisión y rigor. El reconocimiento de dicha obra no fue inmediato, pero sí progresivo y firme, hasta alcanzar la alta estimación que hoy tiene no sólo aquí, sino en el exterior, especialmente en Europa.

“De ese conjunto la serie de los Sueños, como hoy se la conoce, es la que mayor prestigio otorgó a nuestra fotógrafa. De gran originalidad e imaginería visual, describe con humor, ironía y compasivo dramatismo la discriminación y sumisión de la mujer en la sociedad de la época. Es la primera mirada crítica de nuestra fotografía sobre el tema y la más importante obra en el género de fotomontaje en la historia fotográfica del país. Actualmente, las fotografías de Grete Stern forman parte de grandes colecciones públicas y privadas, nacionales y extranjeras, e ilustran importantes publicaciones, varias de ellas dedicadas exclusivamente a su obra”.

Sueños idílicos

En 1948, Grete Stern recibió el ofrecimiento de ilustrar una sección titulada “El psicoanálisis le ayudará”, de la nueva revista Idilio, publicada por la Editorial Abril. En las páginas de dicha sección, el sociólogo Gino Germani y Enrique Butelman organizaron un consultorio psicológico por encargo de César Civita, fundador de la empresa. Allí -continúa Priamo- respondían cartas de lectoras que relataban sus sueños, según un cuestionario preestablecido, interpretándolos. Firmaban la página con el seudónimo de Richard Rest. Grete propuso ilustrar la sección con fotomontajes, cuya composición se hacía sobre la base del sueño de una lectora seleccionado por Germani. Luego, en la revista, el mismo Germani comentaba el fotomontaje de Grete haciendo una interpretación de sus símbolos. Grete publicó sus “Sueños” ininterrumpidamente desde el número 1 al 140 de Idilio (desde el 26 de octubre de 1948 hasta el 24 de julio de 1951). Ella entregaba a la revista el collage original, que no le era devuelto. En 1967, cuando fue a buscarlos para hacer una exposición, la empresa no los tenía, los habían tirado. Durante el primer año de trabajo y antes de entregarlos, Grete le hizo un negativo de reproducción a casi todos los “Sueños” concluidos. Luego abandonó esa rutina, aunque guardó algunas imágenes más de las obras ya impresas en la revista.

En la actualidad, su archivo tiene 46 negativos de reproducción y 29 “Sueños” recortados de las páginas de Idilio, es decir poco más del cincuenta por ciento de la obra completa. Dicho conjunto era lo único conocido del total editado en la revista y fue publicado por el Instituto Valenciano de Arte Moderno (Ivam) en el libro “Grete Stern. Sueños” editado en 1995.

A fines de 2003, con el auspicio de la Fundación Ceppa (Centro de Estudios para Políticas Públicas Aplicadas), se presentó en el Centro Cultural Recoleta (Buenos Aires) la exposición “Sueños. Fotomontajes de Grete Stern. Serie Completa”, que reunía la obra impresa en Idilio y que se exhibirá en el Museo Municipal de Artes Visuales Sor Josefa Díaz y Clucellas. El propósito de esta muestra es ofrecer, a través de reproducciones tomadas de Idilio y editadas con técnicas digitales, la totalidad de los Sueños, como aporte al conocimiento cabal de una obra mayor en el género del fotomontaje. Las imágenes fueron recogidas de la colección de la revista que se encuentra en la Biblioteca Nacional.

La nota

“Los sueños de proyección”. Idilio Nº 81 6/6/1950

 

La nota

 

La nota

“Autorretrato con la cámara”, 1970. Gelatina de plata, 30 x 22 cm. (Detalle)

Fotos: Gentileza producción

La nota

“Los sueños de evasión”. Idilio Nº 84 27/6/1950

La nota

“Los sueños de dependencia”. Idilio Nº 89 - 1º/8/1950

La nota

“Los sueños de celos”. Idilio Nº 96 19/9/1950