Tres estrenos en cartel

Una fascinante aventura

Una fascinante aventura

Bilbo Bolsón (Martin Freeman) tendrá que dejar su vida tranquila en Hobbiton para sumarse a Gandalf y 13 enanos en la reconquista de un tesoro.

Foto: Gentileza Warner Bros./Metro-Goldwyn-Mayer

Con lujos digitales, Peter Jackson recrea “El hobbit”, una historia de J.R.R. Tolkien anterior a “El señor de los anillos”. También llegan “Otros silencios”, de Santiago Amigorena, y “Ánima Buenos Aires”, producida por Caloi.

De la redacción de El Litoral

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Once años después de que el mundo cayera seducido por la magia en la pantalla grande de “El señor de los anillos” (2001), Peter Jackson trae “El hobbit: Un viaje inesperado”, megaproducción que llega hoy a los cines para mostrar qué pasó antes de la conocida trilogía.

Se trata de una historia apasionante, repleta de valores y con una imagen digital revolucionaria. En esta ocasión, Jackson cuenta las andanzas del hobbit Bilbo Bolsón (Martin Freeman) en la Tierra Media, aventuras genialmente imaginadas por el escritor J. R. R. Tolkien en 1937.

Más de 100 millones de copias vendidas en 75 años de historia, explican por qué “El hobbit: historia de una ida y una vuelta” título original del libro, merecía un espacio de privilegio en el cine.

La historia de la película, que fue concebida para un público infantil y se ubica 60 años antes de los eventos de “El señor de los anillos”, deja ver de entrada al mago Gandalf (Ian McKellen), quien busca los servicios de Bilbo Bolsón, un hobbit muy común de Hobbiton, aldea de La Comarca.

“El hobbit tiene un ritmo muy rápido porque Tolkien la escribió como una historia para sus hijos. Es un hilo que va de evento a evento”, dice Jackson en las notas de producción de la película.

Tras las sorpresas que le genera la propuesta de Gandalf el Gris, Bilbo tiene una inesperada misión, un reto que lo hará salir de su comodidad para devolver el reino que pertenece a los enanos: Erebor (la Montaña Solitaria), reino que les fue arrebatado a los enanos por el despiadado dragón Smaug, junto con el tesoro que allí había.

En la peligrosa aventura, Bolsón y Gandalf se unirán a trece valientes enanos, liderados por Thorin Escudo de Roble interpretado por Richard Armitage. Su viaje los llevará a zonas salvajes, a través de tierras traicioneras repletas de trasgos (orcos), wargos y “una figura misteriosa y siniestra conocida únicamente como el Nigromante (Saurón)”, detalla la sinopsis de la película.

Tampoco faltará el encuentro de Bilbo con Gollum, además del trascendental hallazgo del Anillo Único, de cuyo poder depende el destino de la Tierra Media. Los acontecimientos anteriores, con algunos cambios con respecto al relato original de Tolkien, se mostrarán en la primera primera parte de la nueva trilogía, la cual continuará con “El hobbit: La desolación de Smaug”, programado para diciembre del 2013, y “El Hobbit: historia de una ida y una vuelta”, que llegará en julio del 2014.

“Había material en los libros de El señor de los anillos que Tolkien pensaba usar para una versión expandida de El hobbit. Lo utilizamos”, aseguró Jackson en una conferencia de prensa en Nueva York.

La cinta, cuyos efectos especiales son obra de Weta Digital, resaltan en la pantalla por un delicado y revolucionario trabajo visual, el cual incrementa su vistosidad en la pantalla grande debido a que fue rodada 48 fotogramas por segundo (FPS), en lugar del tradicional 24 FPS. Esto se verá en las funciones anunciadas como High Frame Rate 3D (HFR 3D).

Muerte y venganza

Santiago Amigorena, radicado en Francia hace 35 años, estrenará este jueves “Otros silencios”, un western moderno que tiene como protagonista a una mujer policía que viaja desde Canadá a los cerros jujeños para vengarse del asesino de su familia.

Esta coproducción entre Argentina, Francia, Canadá y Brasil está protagonizada por la talentosa canadiense Marie Jose Croze, quien le pone una carga de crudeza y profundidad emocional a una policía que “cuando tiene todo para cumplir su venganza entiende que ya cambió y que el olvido empieza cuando se perdona”, explicó Amigorena.

La segunda película de Amigorena, que comienza en una Toronto invernal y nevada y se traslada luego al calor sofocante de Buenos Aires y los cerros jujeños, cuenta con las actuaciones de los actores argentinos Ignacio Rogers, Martina Juncadella, Ailín Salas y Oski Guzmán.

En una entrevista con Télam, el director afirmó que “quería hacer una película totalmente diferente a lo que había hecho en mi opera prima. Quería que fuera mucho más cruda y silenciosa, cuando aquella era más barroca y dialogada. Sin embargo, las dos se parecen, porque en ambos casos hay una mujer con una pistola”.

El cineasta, guionista y productor se refiere a “Unos días en septiembre”, filme de 2006 protagonizado por su ex pareja, la estrella francesa Juliette Binoche. Amigorena pensaba trabajar una vez más con Binoche en “Otros silencios”, pero la actriz se entregó por completo a un espectáculo de baile y debió reemplazarla por Croze: es alguien que “pelea para ir hasta el final de su venganza, pero cuando tiene todo para cumplirla, entiende que ya cambió y que el olvido empieza cuando se perdona”.

Entiende que “el primer paso hacia el olvido es el perdón y por eso, en ese momento, logra llorar todo lo que no había podido llorar” a causa del impacto que le provocó el asesinato de su esposo e hijo, a manos de un sicario argentino enviado a Canadá por un narcotraficante que trabaja en la frontera entre Jujuy y Bolivia.

La película, que habla de los dos silencios por los que atraviesa la protagonista (el de la piedra caliente de Jujuy y el que produce la nieve en Toronto), transita libremente el género policial y el western, con la idea de “salir del género y buscar sus fronteras, pero sin tomarlo en broma como lo haría Tarantino”.

El arte llevado al cine

Producido por el fallecido Caloi (Carlos Loiseau) y María Verónica Ramírez, es un largometraje animado en cuatro episodios que permitió reunir a algunos de las grandes representantes de la historieta argentina: el mismo Caloi y Ramírez, Carlos Nine, Pablo y Florencia Faivre y Pablo Rodríguez Jáuregui.

La concreción de “Ánima Buenos Aires” demandó varios años de trabajo y eso se percibe en cada una de las historias que se cuentan, en las que no faltan los típicos personajes de nuestra ciudad, a la vez que tampoco están ausentes el humor y el tango. Precisamente para encargarse de ponerle música al filme se convocó a Rodolfo Mederos, Gustavo Mozzi y Fernando Kabusacki.

La película que incluye animación tradicional, collage, fotomontaje, stencils y otras técnicas, combina la comicidad, lo absurdo de ciertas situaciones y la poesía urbana, y cuenta con un dúo de bailarines: Juan Pablo Zaramella y Mario Rulloni, que a través de sus coreografías encadenan cada uno de los episodios, titulados “Mi Buenos Aires herido”, “Meado por los perros”, “Claustrópolis” y “Bu-Bu”.