Emblema de la música contemporánea

El compositor, pianista y director murió ayer en su casa a los 77 años, de un paro cardiorrespiratorio. Figura de la música argentina contemporánea, abordó desde su estilo elementos del jazz y el tango.

Emblema de la música contemporánea

Gandini en 2006, En el 9º Festival de Jazz de Santa Fe, dirigiendo su obra “Tangos & Postangos” junto a Néstor Marconi (bandoneón), Carlos Nozzi (cello) y la Santa Fe Jazz Ensamble.

Foto: Archivo El Litoral / Mercedes Pardo

 

Télam/DyN

El compositor, pianista y director orquestal Gerardo Gandini, figura indispensable de la música argentina contemporánea, falleció ayer en Buenos Aires, informaron allegados al compositor.

Discípulo de Alberto Ginastera, audaz y crudo en sus definiciones estéticas, Gandini ofreció su caligrafía musical en los círculos de la música académica, espacios de vanguardia, ámbitos del jazz y el tango, y también en la pantalla cinematográfica.

Los restos del músico, que falleció en su casa, fueron velados ayer desde las 17 y trasladados hoy a las 11 al Panteón que Sadaic tiene en el cementerio de Chacarita.

Recorrido

Entre tantas formas con las que asumió su oficio, Gandini fue director de la Orquesta Filarmónica Nacional y director musical del Teatro Colón, donde creó el Centro de Experimentación en Ópera y Ballet.

Nacido en Buenos Aires en 1936, estudió composición con Goffredo Petrassi y Alberto Ginastera y se formó como pianista con Roberto Caamaño, Pía Sebastiani e Ivonne Loriod. Integró el sexteto que Astor Piazzolla conformó en 1989.

Fue profesor del Instituto Di Tella (Buenos Aires), de la Juilliard School of Music de Nueva York, de la Facultad de Música de la Universidad Católica Argentina, del Conservatorio Gilardo Gilardi de La Plata (Argentina) y de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad Nacional de La Plata (Argentina).

Géneros

Sus definiciones estéticas no pretendían complacer el gusto políticamente correcto. “No existe el cruce de música clásica y popular porque son cuestiones distintas y requieren diferentes grados de reflexión”, afirmaba.

Esos enunciados para nada lo alejaron de la música de género, donde se desarrolló en el jazz, el tango y realizó un trabajo conjunto con Fito Páez, “Moda y pueblo”, lanzado a través del sello Circo Beat.

“Nos fuimos enganchando, haciendo amigos y creció el vínculo. Me gusta su mirada sofisticada del cancionero popular argentino; ver su pensamiento de algunos clásicos”, repetía el rosarino.

Di Tella

Gandini también ocupó un lugar clave en la usina creativa que constituyó, en los ‘60, el Instituto Di Tella, como parte del Centro Latinoamericano de Altos Estudios Musicales (Claem), que funcionó entre 1961 y 1971.

“La convocatoria de aquel proyecto la hizo (Alberto) Ginastera, uno de los compositores más importantes del siglo XX. Fue él quien le dio a los cursos y talleres una impronta latinoamericana para apoyar a los músicos jóvenes del continente”, recordó ayer José Luis Castiñeira de Dios, músico, compositor y director Nacional de Artes. Aquel proceso, del que Gandini fue uno de los emergentes, se guiaba por “una voluntad de identidad continental”, explicó el funcionario.

Cine y tablas

También Gandini llevó su música a la pantalla de cine, donde sobresalieron sus trabajos en las películas de Fernando “Pino” Solanas: fue director musical de “La nube” (1998) e intérprete de muchas otras (“Argentina latente”, “La próxima estación”). También de “Vidas privadas” (2001), de Páez.

Entre sus óperas se destacan “La pasión de Buster Keaton”; “Espejismos II”; “La casa sin sosiego”, con libreto de Griselda Gambaro; y acaso la más popular de todas “La ciudad ausente”, con libreto de Ricardo Piglia.

En Santa Fe

Tres proyectos vinculados a la música popular trajeron a Gandini a Santa Fe en la última década. El 29 de julio de 2005 presentó “Moda y Pueblo” (como pianista y director) junto a Fito Páez en el Centro Cultural Provincial.

El 10 de marzo de 2006 participó del 9º Festival de Jazz de Santa Fe, donde dirigió y tocó el piano, en la presentación de la obra “Tangos & Postangos” hasta entonces inédita en Argentina, que interpretó en compañía de dos renombrados solistas, Néstor Marconi (bandoneón) y Carlos Nozzi (cello), y de la Santa Fe Jazz Ensamble. Dicho encuentro se dio en el Paraninfo de la UNL.

En junio de 2007, finalmente, se presentó en el Teatro Municipal junto a Ernesto Jodos, abordando experimentalmente el lenguaje de jazz a dos pianos.