LOA PROARTE

Cuando una actriz cambia una puesta

Roberto Schneider

En oportunidad del estreno en LOA Espacio Proarte AGM de “Quiero tomar tu mano”, obra escrita por Mari Delgado sobre la base de “Nunca estuviste tan adorable” de Javier Daulte sostuvimos que las distintas situaciones de la historia se repiten y al mismo tiempo transmutan, bajo los aires de nuestra Santa Fe, más cercana. Al igual que en el original, se presenta un salto temporal que llega hasta nuestros días, a este 2013 que estamos transitando.

Con mano diestra, Delgado se introduce con hondura en la interioridad de sus criaturas y no les ahorra alegrías, momentos de transición y hasta confidencias duras sobre sus personas, pero la ternura por ellos puede más y les da una oportunidad, les posibilita un respiro y un camino para no ingresar en la irracionalidad.

Destacábamos asimismo que Delgado, directora también de su propio texto, habla de las relaciones familiares, del rechazo a otras culturas, de prejuicios y, sobre todo, del miedo a lo desconocido. Lo hace con un lenguaje vivo y concreto, descaradamente escorado hacia el melodrama puro y duro, y a través de una arriesgada estructura dramática en la que las dos épocas se cruzan una y otra vez, formando un puzzle que sólo se completará en el sorpresivo final de la función, que abre una puerta a la esperanza y es también un tributo a varias vidas vividas. En esta forma de contar la historia hay habilidad y trampa.

Uno de los soportes esenciales de este espectáculo es el homogéneo y destacable nivel de interpretación del elenco. Hubo un cambio que enriquece la propuesta, que se puede apreciar aún en la misma sala. Se incorporó la actriz Nidia Casís y todo adquiere una riqueza digna de destacar. En su rol de Amalia, esta joven y muy talentosa actriz aborda con toda su alma un personaje delicioso.

Casís tiene en la escena una movilidad espléndida, apoyada por la belleza de su rostro y la facilidad en los movimientos cuando baila. También porque posee una dicción clara, contundente. La directora sabe potenciar esas habilidades de la actriz y la hace dialogar perfectamente con el resto del elenco. Verla a Casís y a sus compañeros de elenco es un placer. Que, además, diverte. Chapeau.